SALUD

Estudio sobre la relación entre actividad sexual y cancer

«El inicio temprano de la actividad sexual y del primer parto y la frecuencia de las relaciones sexuales son factores de riesgo de cáncer genital, según un estudio realizado por Elena García Sánchez y Angel García Iglesias, del departamento de, Ginecología y Obstetricia del Hospital Clínico de Salamanca. Otros factores de riesgo en el cáncer de ovarios y endometrio es no haber tenido ningún hijo, uno o dos; en el de vulva, tres o cuatro, y en el de cuello, más de cinco.En general, el nivel socioeconómico puede también influir de manera que las afecciones de vulva y cuello aparecen en mujeres p...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

«El inicio temprano de la actividad sexual y del primer parto y la frecuencia de las relaciones sexuales son factores de riesgo de cáncer genital, según un estudio realizado por Elena García Sánchez y Angel García Iglesias, del departamento de, Ginecología y Obstetricia del Hospital Clínico de Salamanca. Otros factores de riesgo en el cáncer de ovarios y endometrio es no haber tenido ningún hijo, uno o dos; en el de vulva, tres o cuatro, y en el de cuello, más de cinco.En general, el nivel socioeconómico puede también influir de manera que las afecciones de vulva y cuello aparecen en mujeres pertenecientes a los estratos sociales inferiores de forma más frecuente y en las zonas rurales más alejadas.

El trabajo de estos dos ginecólogos lleva el nombre de Epidemiología del cáncer en la provincia de Salamanca, y ha merecido el premio de la Real Academia de Medicina de Salamanca. Pese a que el estudio se ha realizado durante el año 1981, las hipótesis y otros datos se han basado en resultados obtenidos del examen de las mujeres que han acudido a la consulta durante los últimos diez años. Las estadísticas concretas se refieren a 180 salmantinas, observadas por sospecha de sufrir una lesión maligna.

Variación de las frecuencias de riesgo

Las conclusiones obtenidas pueden trasvasarse a otras provincias de condiciones similares a la estudiada, según sus autores, y sólo la frecuencia de los factores de riesgo variarán en función de diversas circunstancias en lugares distintos. Elena García y Angel García utilizarán, junto al resto de los miembros de su cátedra, este nuevo trabajo para considerar estos factores de riesgo en la prevención y diagnóstico precoz del cáncer en el centro que funciona en Salamanca desde 1957, y en el que se revisan periódicamente más de 4.000 mujeres al año.Otros factores de riesgo considerables, según la investigación, se refieren a la edad de las pacientes. La mayoría de las que padecen un cáncer de vulva tienen casi sesenta años, y algunos menos, las aquejadas de cáncer de útero.

Los doctores explican que algunos datos estadísticos, como la influencia de los hijos, las relaciones sexuales o el nivel socioeconómico pueden comprenderse si se tienen en cuenta que el envejecimiento de las células afectadas puede producirse por falta de higiene, por sufrimiento de los tejidos -partos o relaciones- o por sustancias que afectan a los mismos, entre otros factores desconocidos.

La sospecha de cualquier desarreglo en los órganos genitales -prurito, hemorragias, otros síntomas- debería obligar a las mujeres a realizarse una revisión inmediata. Además, los doctores insisten en que la detección precoz de lesiones premalignas e incluso de cánceres in situ es la garantía de su desaparición en el ciento por ciento de los casos. Por todo ello, mantienen que resulta necesario el examen periódico y espontáneo de todas las mujeres en los centros de diagnóstico precoz que existen en todas las ciudades españolas.

Archivado En