Falleció el hijo mayor de Miguel de Unamuno

Rafael de Unamuno Lizárraga, hijo de Miguel de Unamuno y de Concha Lizárraga, falleció anteayer en Salamanca, ciudad en la que vivió su padre la mayor parte de su vida. En la actualidad, de los nueve hijos del matrimonio del célebre rector de la universidad salmantina -seis varones y tres mujeres-, sólo queda con vida la última de la prole, María. Rafael de Unamuno ejerció en Salamanca como oculista, y en esta misma ciudad vivió con su esposa, Josefa Conde, hasta el momento de su muerte.Entre los hechos que se recuerdan de la vida de Rafael de Unamuno se cuenta que, tras el célebre enfrentamie...

Rafael de Unamuno Lizárraga, hijo de Miguel de Unamuno y de Concha Lizárraga, falleció anteayer en Salamanca, ciudad en la que vivió su padre la mayor parte de su vida. En la actualidad, de los nueve hijos del matrimonio del célebre rector de la universidad salmantina -seis varones y tres mujeres-, sólo queda con vida la última de la prole, María. Rafael de Unamuno ejerció en Salamanca como oculista, y en esta misma ciudad vivió con su esposa, Josefa Conde, hasta el momento de su muerte.Entre los hechos que se recuerdan de la vida de Rafael de Unamuno se cuenta que, tras el célebre enfrentamiento entre Millán Astray y Miguel de Unamuno, durante la celebración de un acto académico en el paraninfo de la Universidad salmantina, fue Rafael quien condujo a su padre a casa, de donde no volvería a salir Miguel hasta el momento de su muerte, el 31 de diciembre de 1936.

En aquella ocasión, Millán Astray pronunciaba un discurso, en el que proclamó la muerte de la inteligencia. Miguel manifestó su oposición, pronunciando la célebre frase «Venceréis, pero no convenceréis». Carmen Polo, esposa de Franco, que se encontraba presente en el paraninfo, intervino y acompañó al escritor amenazado por este motivo hasta la salida. Según los testimonios de entonces, aquella misma tarde, en el casino de la ciudad, Miguel de Unamuno fue insultado por la mayoría de sus contertulios por haber intervenido de la manera que lo hizo en el acto académico. Su hijo Rafael fue entonces quien le acompañó a su casa, en donde se recluyó.