Crítica:CINE

Una comedia muy menor

Es tradicional que muchas gacetillas publicitarias hagan creer que determinada película es idéntica a otra anterior que tuvo éxito, o que se oculte la fecha de producción cuando se ha desempolvado un viejo título gracias a la popularidad televisiva de un actor o una serie, o que se deformen las críticas entresacando una frase elogiosa, que, fuera de su contexto, es mentirosa. Con todo ello, sólo puede conseguirse que el espectador se canse de recibir mala información y deserte de los cines de forma más rápida y contundente. Ahora, por ejemplo, tras la entrega de los oscar, es fácil desc...

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Es tradicional que muchas gacetillas publicitarias hagan creer que determinada película es idéntica a otra anterior que tuvo éxito, o que se oculte la fecha de producción cuando se ha desempolvado un viejo título gracias a la popularidad televisiva de un actor o una serie, o que se deformen las críticas entresacando una frase elogiosa, que, fuera de su contexto, es mentirosa. Con todo ello, sólo puede conseguirse que el espectador se canse de recibir mala información y deserte de los cines de forma más rápida y contundente. Ahora, por ejemplo, tras la entrega de los oscar, es fácil descubrir cómo la visualización de las carteleras trata de confundir sobre qué películas han obtenido premio y cuántas, en verdad, las agraciadas.Aunque esta situación es general, en el caso Con amor y con humor, que es ya una traducción informativa de una película que originalmente se titula El mármol negro (The black marble), se han repetido ligeramente esos esquemas desinformativos. Las primeras gacetillas destacaban el nombre de Frank Capra, hasta el punto de que algunos espectadores del día del estreno estaban convencidos de que verían una obra del clásico autor de comedias americanas; en realidad, el Frank Capra que aparece en los títulos de crédito es un simple junior que ejerce de productor. «Una película con el toque del genial Frank Capra», decía un eslogan. El toque es una habilidad atribuida a Lubistch y no a Capra, y Con amor y con humor nada tiene que ver con esas estéticas narrativas.

Con amor y con humor (The black marble)

Director: Harold Becker. Guión: Joseph Wambaugh, sobre su propia novela. Música: Maurice Jarre. Fotografía: Owen Roizman. Intérpretes: Robert Foxworth, Paula Prentiss, Harry Dean Stanton. Norteamericana. Comedia. Locales de estreno: Richmond y Luchana 2

En realidad, se trata de una comedia, menor, que parte de un sencillo argumento que sí podía haber interesado: los mediocres y cotidianos casos que se ve obligada a solucionar una pareja de policías, hombre y mujer, que, aunque no se entiendan bien al principio, acabarán, lógicamente, enamorándose. Frente a las grandes peripecias policiales con que últimamente nos obsequia el cine americano, tiene gracia este nuevo planteamiento, tampoco muy original, pero sí más llevadero. Lo que ocurre es que Harold Becker, el director, ha alargado de tal manera las secuencias que éstas se copian entre sí, finalizando en una película reiterativa, prevista por el espectador mucho antes que los espectadores. De cualquier forma, es difícil no sorprenderse, negativamente, por una película que se anunciaba distinta.

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