Con rabia,
por la injuria, la afrenta, la humillación, el escarnio a los parlamentarios, y a los ministros, y a los funcionarios, y a los empleados del Congreso, y a los informadores, y a los militares leales, que los hubo, que los ha habido, que siempre los habrá, y a los guardias realmente civiles, y a los policías de verdad nacionales, que sirven bien a la nación, y a los ciudadanos libres, trabajadores, y todos, al país, a España, al pueblo entero.
En Madrid, con democracia y con Rey, hoy, todavía, con libertad!./...
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por la injuria, la afrenta, la humillación, el escarnio a los parlamentarios, y a los ministros, y a los funcionarios, y a los empleados del Congreso, y a los informadores, y a los militares leales, que los hubo, que los ha habido, que siempre los habrá, y a los guardias realmente civiles, y a los policías de verdad nacionales, que sirven bien a la nación, y a los ciudadanos libres, trabajadores, y todos, al país, a España, al pueblo entero.
En Madrid, con democracia y con Rey, hoy, todavía, con libertad!./