Filósofos españoles analizan "la deteriorada situación actual"

Cuatro filósofos españoles eligieron estos días la universidad canaria de La Laguna para celebrar una semana de filosofía, en la que analizaron, sobre todo, la crisis actual de España desde la perspectiva que es habitual en ellos: la filosófica. El pesimismo fue la nota dominante. Los pensadores citados son Emilio Lledó, Javier Muguerza, Luis Vega y Carlos Moya. La reunión fue organizada, informa Carmelo Martín, por el departamento de Filosofía del citado centro docente, que contó con la colaboración del Círculo de Bellas Artes y el Ateneo.

Los cuatro filósofos abordaron distintas alter...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Cuatro filósofos españoles eligieron estos días la universidad canaria de La Laguna para celebrar una semana de filosofía, en la que analizaron, sobre todo, la crisis actual de España desde la perspectiva que es habitual en ellos: la filosófica. El pesimismo fue la nota dominante. Los pensadores citados son Emilio Lledó, Javier Muguerza, Luis Vega y Carlos Moya. La reunión fue organizada, informa Carmelo Martín, por el departamento de Filosofía del citado centro docente, que contó con la colaboración del Círculo de Bellas Artes y el Ateneo.

Los cuatro filósofos abordaron distintas alternativas teóricas a «la deteriorada situación social actual». Al tiempo que ellos discutían, el profesor José María Chamorro presentaba en la misma universidad una tesis doctoral en la que se plantea la aplicación de una nueva teoría semántica al estudio de los problemas sociales. Mereció la calificación de sobresaliente cum laude.En la semana de filosofía propiamente dicha, Luis Vega, adjunto de Lógica en la Universidad de Educación a Distancia, puso en cuestión la afirmación de que los avances tecnológicos guardan relación directa con el incremento del placer para el ciudadano. Entre las tecnologías más primarias, Carlos Moya situó, por su parte, a la escritura y apostó por un nuevo modelo de Estado, resultado de una simbiosis mítico-ritual, en oposición al concepto tradicional del Estado centroeuropeo, que interpreta la historia desde una perspectiva economicista. Mientras, el catedrático de Ética, Javier Muguerza, que se definió como «un luchador de la causa perdida», defendió la utopía de una comunidad de diálogo en una democracia plena, libertaria, aséptica. Señaló que no se trata tanto de preguntarse si el comunismo es o no posible cuanto si es o no justo. Sin embargo, Muguerza afirmó que «ahora mismo está más vivo el marxismo porque es consciente de su crisis».

En la necesidad de la recuperación del diálogo y el lenguaje coincidieron Emilio Lledó y el citado catedrático de Etica. El primero, filósofo de la historia, mostró su pesimismo porque la transformación política del país no había implicado una renovación de las estructuras educativas y de comunicación. «La discusión democrática de la polis griega ha sido secuestrada en la democracia española», afirmó Lledó. El debate sobre la actual juventud española permitió a Carlos Moya, por otra parte, indicar que esta juventud está asociada a los movimientos juveniles euroamericanos en los años sesenta. Dijo que los jóvenes españoles están propiciando una juvenilización de la sociedad porque han logrado que los mayores sientan el deseo de imitarlos. «Cuando en Irán la juventud revolucionaria se identifica con el padre (el imán), en España los jóvenes cometen un parricidio permanente, una rebelión contra los mayores», expresó Moya.

Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Archivado En