El cine feminista irrumpe en el Festival de Berlín

Los alemanes occidentales siguen analizando en sus películas la última guerra mundial

ENVIADO ESPECIAL, Al cine alemán, incluso a los jóvenes directores, les sigue preocupando el tema de la guerra mundial y la posterior destrucción que sufrió este país. Por eso se entiende que haya, sido acogida con tanto interés la película Alemania, madre pálida, de la directora Helma Sanders-Brahms, en la segunda sesión del Festival Internacional de Cine de Berlín. La película es, además, en el contexto de una fuerte corriente del cine feminista que se puede apreciar en Berlín, un alegato en favor de la emancipación de la mujer.

Alemania, madre pálida, título que da nombre a la...

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ENVIADO ESPECIAL, Al cine alemán, incluso a los jóvenes directores, les sigue preocupando el tema de la guerra mundial y la posterior destrucción que sufrió este país. Por eso se entiende que haya, sido acogida con tanto interés la película Alemania, madre pálida, de la directora Helma Sanders-Brahms, en la segunda sesión del Festival Internacional de Cine de Berlín. La película es, además, en el contexto de una fuerte corriente del cine feminista que se puede apreciar en Berlín, un alegato en favor de la emancipación de la mujer.

Alemania, madre pálida, título que da nombre a la película, corresponde al primer verso de un poema escrito por Bertold Brecht en 1933. Cuando Hitler prepara la definitiva declaración de guerra se produce una historia de amor que termina, como otras muchas, en boda. Poco después comienza la campaña de Polonia y el marido tiene que ir al frente. Su mujer, que había quedado embarazada, tiene el niño ella sola y desarrolla por sí misma una fuerza especial para sobrevivir ella y el niño a la guerra. Termina la guerra y, vuelto su marido, tiene que reasumir su antiguo papel de mujer ama de casa. No le va el papel y tiene todavía que seguir luchando por su emancipación en las circunstancias de la reconstrucción y de la «época del milagro».«No tengo nada que ver con la guerra», dice Helma Sanders Brahms (Emden, 1940), «ni siquiera está directamente en mi memoria, pero creo que los casos que se dieron durante ella de madres que tuvieron que salir solas adelante con sus niños son todo un símbolo universal que tiene vigencia hoy día. Las razones de las mujeres solteras y solitarias de hoy son completamente diferentes, pero la situación de muchas mujeres hoy día es prácticamente la misma. Su única posibilidad es continuar viviendo solas. Esto no quiere decir que sea una feminista teórica. No creo en palabras como feminismo o emancipación. Estos conceptos hay que hacerlos realidad. No creo en el feminismo dogmático. No soy de las que piensan que los hombres no son necesarios, pero a veces no lo son si hacen como si no existieran o, sobre todo, cuando no aceptan sus responsabilidades. Las mujeres, entonces, tienen que asumir toda la responsabilidad, y ello les hace más fuertes. »

La tendencia feminista de Helma Sanders-Brahms, que ha dirigido hasta ahora doce películas, se enriquece de una manera decidida con las aportaciones a este Festival de películas realizadas por mujeres que han sido presentadas tanto dentro de las secciones de nuevas películas alemanas (Diario de una película, de Barbara Kusenberg, por poner un ejemplo) como a la sección Forum del Cine Joven, al que concurre, entre otras, Lue Bondy, con Las mujeres Ortlieb.

Otra de las películas que hasta ahora se han proyectado, y que ha sido bien acogida dentro de la sección de competición, es Tránsito, del israelí Daniel Wachsman. Cuenta la historia de un judío alemán ciudadano de Israel que huyó del fascismo en Berlín y que desea volver para huir en parte de una existencia en el Israel de los años sesenta, traumatizada por los conflictos militares, donde por encima de todo subsiste la violencia contenida y el nerviosismo de una situación social que en cualquier momento puede estallar.

Representación española

Por lo que se refiere a la escasa representación del cine español en esta 30ª edición del Festival de Berlín, hay que reseñar que ayer comenzó a exhibirse en sesión informativa la película de Antonio Hernández F. E. N., y hoy le seguirá en la misma sección Tierra de rastrojos, de Antonio Gonzalo. Mañana, viernes, se podrá ver en la sección Foro del Cine Joven la película de Alvaro del Amo Dos.En cortometrajes, que se proyectan antes de las sesiones de competición, España está representada por Ana Manuscrito, de Francisco Periñán, que narra la historia de una chica traumatizada por una violación que trata de asumir su vida cotidiana, su cuerpo y sus relaciones con las demás personas. En la sección de exposición de películas se pasó ayer Mamá cumple cien años, de Carlos Saura.

El clima frío de Berlín, debido a la estación atmosférica en que vivimos, y el ambiente de aislamiento del Este que aquí se vive, y al que los periódicos hacen constante referencia, parece que tampoco propician la visita de las grandes estrellas del cine. Entre otros, hasta ahora se ha observado la presencia de Michael Piccoli y Curd Juergens, y se ha anunciado la visita de Geraldine Chaplin (es la protagonista de la película La viuda de Montiel, del mexicano Miguel Littin) y de Anthony Quinn. También se espera la visita de Marco Ferreri, Andrzej Wajda y Pilar Miró, entre otros. Mientras tanto, existen verdaderas peleas para conseguir una entrada para la película de William Friedkin Cruising.

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