Videla amenazó con dimitir si Timerman no era liberado
El presidente argentino, general Jorge Videla, condicionó su permanencia en el cargo al acatamiento de la decisión de la Corte Suprema de Justicia de poner en libertad al periodista Jacobo Timerman, señala la agencia Noticias Argentinas.La agencia, que cita «fuentes responsables» para su información, indicó que Videla se enfrentó con la oposición inicial de la mayoría de los altos mandos del ejército.
Los mayores escollos para acatar la decisión de la Corte estuvieron en el seno del ejército, cuyos altos mandos se reunieron el lunes y resolvieron no liberar a Timerman por seis vo...
Regístrate gratis para seguir leyendo
Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
El presidente argentino, general Jorge Videla, condicionó su permanencia en el cargo al acatamiento de la decisión de la Corte Suprema de Justicia de poner en libertad al periodista Jacobo Timerman, señala la agencia Noticias Argentinas.La agencia, que cita «fuentes responsables» para su información, indicó que Videla se enfrentó con la oposición inicial de la mayoría de los altos mandos del ejército.
Los mayores escollos para acatar la decisión de la Corte estuvieron en el seno del ejército, cuyos altos mandos se reunieron el lunes y resolvieron no liberar a Timerman por seis votos contra tres.
Timerman, de 57 años, ex director del matutino La Opinión, de Buenos Aires, permaneció treinta meses bajo arresto, en cárceles y en su propio domicilio, acusado de relaciones con la guerrilla.
El martes último fue privado de su ciudadanía argentina y expulsado del país por la Junta Militar, después de que el 17 de septiembre la Corte Suprema de Justicia consideró «ilegítima» y «carente de sustento jurídico» la detención a que estaba sometido.
La decisión de los altos mandos del ejército de negar la libertad a Timerman fue comunicada al comite militar, que integran los comandantes en jefe de las tres fuerzas armadas y el presidente de la nación. Entonces Videla advirtió sobre las consecuencias de no acatar el fallo de la Corte Suprema de Justicia, que serían las renuncias de los miembros del alto tribunal, la dimisión del ministro de Justicia y la suya propia.
De otra parte, el Gobierno argentino ha desmentido que el presidente Videla hubiese adquirido «un supuesto compromiso» con la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), en relación con la liberación y expulsión de Timerman.