Dámaso Alonso: "La Real Academia está totalmente abandonada por el Estado"

El presidente de la Real Academia Española de la Lengua, Dámaso Alonso, ha declarado en Oviedo que la Real Academia se encuentra en una auténtica miseria y totalmente abandonada por el Estado español. «Recibimos -dijo- una dotación absolutamente insuficiente para nuestros proyectos. Puedo citar un caso aleccionador. Nosotros teníamos la intención de confeccionar un diccionario usual completamente modernizado. Pero ese proyecto lo tenemos paralizado desde hace casi un año, porque la subvención económica que nos prometió el Ministerio aún no la hemos recibido.»«La Real Academia -añadió- necesita...

El presidente de la Real Academia Española de la Lengua, Dámaso Alonso, ha declarado en Oviedo que la Real Academia se encuentra en una auténtica miseria y totalmente abandonada por el Estado español. «Recibimos -dijo- una dotación absolutamente insuficiente para nuestros proyectos. Puedo citar un caso aleccionador. Nosotros teníamos la intención de confeccionar un diccionario usual completamente modernizado. Pero ese proyecto lo tenemos paralizado desde hace casi un año, porque la subvención económica que nos prometió el Ministerio aún no la hemos recibido.»«La Real Academia -añadió- necesita una ayuda de unos veinte millones para realizar ese diccionario que tanta falta nos hace. Es grotesco que esto ocurra en un país que debería trabajar por la conservación y puesta a punto de una lengua que hablan más de trescientos millones de personas. Aún esperamos y confiamos que la promesa que nos hizo el ministro en el mes de enero se convierta en realidad. Ciertamente es una cuestión importantísima para todos nosotros, para todo el mundo hispano-parlante.»

Dámaso Alonso, que se autodefinió como no purista, se mostró partidario de una unidad básica de la lengua, sin forzar a los latinoamericanos a utilizar los mismos giros que los españoles, pero sí de luchar contra los vulgarismos. En su opinión, los extranjerismos son admisibles cuando son necesarios, cuando se consiga que sea usado por todo el mundo hispano y cuando la garganta española sea capaz de adaptarlo a la fonética hispánica.