Argelia critica el creciente entendimiento USA-URSS
En el espacio de unos días los medios de prensa argelina han criticado sin vacilaciones la voluntad manifestada por Estados Unidos y la Unión Soviética de solucionar en privado algunos de los dilemas que afectan al mundo. El acontecimiento ha retenido la atención de los observadores políticos.La primera de esas críticas concierne a los términos del comunicado conjunto soviético-norteamericano sobre Oriente Próximo, al que se estima aquí bastante ambiguo en lo que se refiere a las aspiraciones nacionales del pueblo palestino.
Se señala en esta capital que el documento admite diversas...
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En el espacio de unos días los medios de prensa argelina han criticado sin vacilaciones la voluntad manifestada por Estados Unidos y la Unión Soviética de solucionar en privado algunos de los dilemas que afectan al mundo. El acontecimiento ha retenido la atención de los observadores políticos.La primera de esas críticas concierne a los términos del comunicado conjunto soviético-norteamericano sobre Oriente Próximo, al que se estima aquí bastante ambiguo en lo que se refiere a las aspiraciones nacionales del pueblo palestino.
Se señala en esta capital que el documento admite diversas interpretaciones sobre el contenido de la resolución 242 de las Naciones Unidas, que, como se sabe, es rechazada por toda la resistencia palestina.
Si, desde el momento en que no se la menciona, se da por supuesto que la citada resolución ha quedado superada en el espíritu de los dos supergrandes, lo cierto es que también se pasa en silencio la propia existencia de la Organización de Liberación de Palestina.
La declaración conjunta norteamericano-israelí publicada, al término de las conversaciones mantenidas por Moshe Dayan con los dirigentes de Estados Unidos es considerada por los medios argelinos como la prueba de que Tel-Aviv trata de imponer la resolución 242 y dispone, en ese sentido, del apoyo tácito de una notable fracción del establishment norteamericano, con el propósito de torpedear al comunicado difundido días atrás por la URSS y Estados Unidos.
El segundo gesto de malhumor ha surgido en ocasión de las conversaciones que mantienen norteamericanos y soviéticos, en Washington, a propósito de la limitación de armamentos en el Océano Indico.
Los argelinos han manifestado su sorpresa por esa reunión que, si bien consideran fructífera para las ambiciones de los dos grandes, estiman debe ser criticada desde el instante en que a la misma no han sido invitados los principales interesados en el problema: los países costeros.
La organización de los países no alineados, a la que pertenece Argelia, reclama la desmilitarización del Indico desde la cumbre de jefes de Estado y Gobierno celebrada en Lusaika en 1970.