El Príncipe de Asturias podría presidir la bececerrada de la Escuela Taurina

Es posible que el príncipe Felipe presencie, desde el palco real, la becerrada que la Escuela Nacional de Tauromaquia programa para la presentación de sus alumnos, el sábado 2 de julio, en la plaza de Las Ventas.Al término de la corrida de Beneficencia, los Reyes, don Juan Carlos y doña Sofía, que habían presidido el festejo, recibieron en la antesala del palco a los diestros actuantes y personalidades, y también, a los representantes de la Cooperativa Nacional de Toreros, a la que pertenece la mencionada escuela.

Estos dieron a conocer a los Reyes sus inquietudes y proyectos y, también...

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Es posible que el príncipe Felipe presencie, desde el palco real, la becerrada que la Escuela Nacional de Tauromaquia programa para la presentación de sus alumnos, el sábado 2 de julio, en la plaza de Las Ventas.Al término de la corrida de Beneficencia, los Reyes, don Juan Carlos y doña Sofía, que habían presidido el festejo, recibieron en la antesala del palco a los diestros actuantes y personalidades, y también, a los representantes de la Cooperativa Nacional de Toreros, a la que pertenece la mencionada escuela.

Estos dieron a conocer a los Reyes sus inquietudes y proyectos y, también, les hicieron saber cuánto les gustaría que el príncipe Felipe asistiera a la becerrada. Doña Sofía les contestó que se haría todo lo posible para que fuera así.

Como ya dijimos, el piso de plaza lo ofrece gratuitamente la Diputación Provincial, que es propietaria del coso, con la autorización de la empresa arrendataria, pero aquí empiezan y terminan todas las ayudas que cooperativa y escuela reciben en su primer festejo de promoción.

Es inaudito, que en un tiempo en que escasean las figuras del toreo -y se buscan-, un movimiento de promoción tan serio como es la Escuela Nacional de Tauromaquia, tenga que hacerse sin el apoyo de los distintos estamentos de la fiesta. El taurinismo de esta época es así. Lo cual no será obstáculo para que sean los prurneros en criticar a la escuela y señalarla como inservible, en el caso de que la becerrada de presentación no tenga resultados brillantes.

Los mismos taurinos se indignan porque otros no apoyan a la fiesta, en forma de desgravación fiscal, propaganda, crítica positiva, etcétera. Curioso mundillo, éste.

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