"Cría cuervos", en el Festival Internacional de Bruselas

El mundo cinematográfico belga, colonizado por los franceses, quiere salir de su ghetto con la promoción de realizadores y artistas belgas.

Para conseguirlo se viene organizando, desde hace cuatro años un festival internacional de cine con particularidades propias. El festival no otrorga premios ni recompensas, por el contrario, tiene sus puertas abiertas al público que, por precios normales de una sesión de cine, puede ver una selección importante del momento cinematográfico belga e internacional y codearse con estrellas y directores.

La fórmula atrae cada año ...

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El mundo cinematográfico belga, colonizado por los franceses, quiere salir de su ghetto con la promoción de realizadores y artistas belgas.

Para conseguirlo se viene organizando, desde hace cuatro años un festival internacional de cine con particularidades propias. El festival no otrorga premios ni recompensas, por el contrario, tiene sus puertas abiertas al público que, por precios normales de una sesión de cine, puede ver una selección importante del momento cinematográfico belga e internacional y codearse con estrellas y directores.

La fórmula atrae cada año a más público y sus organizadores se declaran satisfechos de su modelo de festival que no encuentra parecido con Cannes, Berlín, San Sebastián u otros.

Por primera vez un filme español, Cría cuervos, de Carlos Saura, figura entre los 32 filmes (de los setenta presentados) que han sido seleccionados por los organizadores.

El festival pretende salir de esquemas clásicos. Mezcla, entre las obras presentadas, filmes políticos, comedias, horror y cómicos.

Entre los filmes que se proyectarán del 13 al 23 de este mes, cabe destacar Anima persa, de Dino Risi, Barocco, de Andre Techine, L'Eredita ferramonti, de Mauro Bolognini, Otalia de bahía, de Marcel Camus, The front, de Martin Ritt, Une femme a sa fenetre, de Granier Deferre, Le desert des Tartares, de Valerio Zurlini y Bruti, sporchi, cattivi, de Ettore Scola.

El festival es centro de reuniones y contactos entre profesionales del séptimo arte. Al margen de los filmes se celebran reuniones entre el Club europeo de distribuidores de filmes, el Comité de Industrias Cinematográficas de las Comunidades Europeas y una serie de debates sobre el cine europeo, con participación de miembros de la CEE.

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