Sebastián Lelio devuelve a Florence Pugh a los trajes de época en la espléndida ‘The Wonder’

El ganador del Oscar por ‘Una mujer fantástica’ ha contado con la actriz de moda para una historia contra el fanatismo y a favor de la ciencia en la Irlanda del siglo XIX

Florence Pugh atiende las indicaciones de Sebastián Lelio en el rodaje de 'The Wonder'.Aidan Monaghan (Netflix)

En dos años, Sebastián Lelio (Santiago de Chile, 48 años) encadenó tres películas, dos de ellas en inglés, y recogió innumerables premios, entre ellos el Oscar. Aún recuerda que para promocionar Una mujer fantástica —con la que se llevó la estatuilla de Hollywood— en la Berlinale de 2017 solo se pudo ausentar unas horas del rodaje de Disobedience, drama amoroso con Rachel McAdams y Rachel Weisz como dos judías ultraortodoxas enamoradas. “Y cuando estrené Disobedience, ...

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En dos años, Sebastián Lelio (Santiago de Chile, 48 años) encadenó tres películas, dos de ellas en inglés, y recogió innumerables premios, entre ellos el Oscar. Aún recuerda que para promocionar Una mujer fantástica —con la que se llevó la estatuilla de Hollywood— en la Berlinale de 2017 solo se pudo ausentar unas horas del rodaje de Disobedience, drama amoroso con Rachel McAdams y Rachel Weisz como dos judías ultraortodoxas enamoradas. “Y cuando estrené Disobedience, ya estaba filmando Gloria Bell, con Julianne Moore”, recuerda desde Toronto a través de videollamada. “Personalmente, y lo digo con todo el respeto del mundo a quienes lo han pasado mal, el encierro de la pandemia me vino bien para parar y pensar”, insiste. Y ese parar y pensar le llevó a The Wonder, que tras su proyección en Telluride (Colorado, EE UU) y Toronto concursa este jueves en la sección oficial de San Sebastián, y que protagoniza Florence Pugh, la actriz del momento por su talento y por la polémica que ha rodeado el paso por el certamen de Venecia de No te preocupes, querida, por su desencuentro con su directora, Olivia Wilde.

The Wonder, que llegará a salas comerciales antes de su estreno en Netflix el 16 de noviembre, devuelve el traje de época al vestuario de Pugh, que se hizo famosa con Lady Macbeth (2016), antes de entrar en producciones de más presupuesto, como Mujercitas, Midsommar o Viuda negra. Ella aporta una enorme fisicidad al llenar el encuadre dando vida a Lib Wright, una enfermera inglesa que es contratada por las fuerzas vivas en la Irlanda rural de 1862 para que observe a una niña de 12 años que lleva sin comer desde hace meses, y que asegura que se alimenta de maná del cielo. ¿Santa o impostora? Y, como pronto descubre Wright, ¿a quién le interesa que haya un milagro en ese pueblo embarrado y pobre de las Midlands? “Ella es la vía de acceso a una sociedad patriarcal. Y como buena racionalista, solo cree en la ciencia, en la investigación, e intuye que de alguna manera la cría está siendo alimentada. Por eso hay muchos momentos de reflexión y por eso necesitaba una actriz que hiciera casi palpables sus pensamientos”, desarrolla el chileno.

Fanatismo contra humanidad

En The Wonder el juego no avanza entre milagro o ciencia, sino entre fanatismo y humanidad. “Lo que interesa es que Wright y el público descubran la mecánica, porque una vez que la desvelan entienden la razón, una razón devastadora, que es lo que me llevó a hacer la película, y que empuja a la enfermera a dinamitar su sistema de valores”, insiste Lelio, que se ha proyectado en ese personaje. “El dolor atrapa y altera la moral”.

A Florence la admiro cada día más, es todo lo que puedo decir”, asegura el director acerca del desencuentro entre su actriz protagonista y Olivia Wilde, la directora de ‘No te preocupes, querida’

El filme se ha visto beneficiado en diversos aspectos por la pandemia. “Es casi mi primera película después del Oscar, porque en escalas cinematográficas dos años no son nada. En aquel invierno de 2017 yo ya sabía que iba a encadenar estos proyectos y decidí que al final de ellos tenía que parar. La covid alargó el tiempo de reflexión y me empujó a hacer un cine nuevo”, apunta el chileno, que defiende esta teoría: “Se nota en el cine actual que muchas películas son hijas de la crisis que pasamos”. En su caso, The Wonder defiende la prevalencia de la ciencia. “La razón más que el pensamiento mágico, o la ciencia más que la superstición”, responde. “Pero déjeme llegar más lejos: la película ilustra una colisión entre sistemas de creencias. Ciencia contra fe. The Wonder es en sí misma un constructo y usa el mismo mecanismo por el que el espectador cree a Lib, que Lib desarrolla para creer en su propio relato. Al final se le lanza al público una pregunta: ¿en qué cree usted?”.

Como apunte final, Lelio insiste: “No vale parapetarse en el pensamiento, porque por su misma naturaleza un pensamiento puede ser deconstruido, alterarse. Es decir, lo que ocurre hoy en día, con los ataques a la ciencia, con los vilipendios a la racionalidad, y gente que dice haber conocido una verdad inmutable, lo que el resto llamamos fanatismo. The Wonder es una película contra el fanatismo y sus peligros”.

Florence Pugh, en el centro, junto a Tom Burke y Kíla Lord Cassidy, en 'The Wonder'.

Otros dos nombres, más allá de Pugh, encadenan Lady Macbeth y The Wonder: la guionista Alice Birch, que ha adaptado junto a Lelio la novela de Emma Donoghue; y la directora de fotografía Ari Wegner, candidata al Oscar por El poder del perro. “La primera vez que vi a Florence fue en Lady Macbeth, y me impresionó mucho”, recuerda Lelio. “Pero Emma, Alice y yo redactamos el guion sin nombres en la cabeza. Florence entró al final de una manera muy rápida. Desde que recibió el guion hasta que firmó el contrato pasaron tres días, para gran alegría de todos, especialmente de Alice. Teníamos película y empezamos a buscar a la actriz que encarnara a la niña”. Y desde los tendidos, ¿cómo ha visto Lelio este desencuentro entre su actriz protagonista y Olivia Wilde en la promoción de No te preocupes, querida? El chileno respira, sonríe y dice: “A Florence la admiro cada día más, es todo lo que puedo decir”.

Lelio tiene una querencia natural, “nunca programática”, por los personajes protagonistas femeninos. “En mi primer ejercicio en la escuela de cine ya hice un relato paralelo entre la vida de cuatro mujeres. Hablamos de 1997, así que siempre ha estado ahí”, responde. “Yo busco personajes que se merezcan, por sus sentimientos y anhelos, una película donde la sociedad no parece verla. Con Gloria es evidente, hay una conexión profunda y real, y por aquel impulso engatillé todos estos guiones. Gloria se merecía su película”. En realidad, fueron dos: la de 2013 con Paulina García, y Gloria Bell, con Julianne Moore trasladando al personaje a Los Ángeles. “Lleva toda la razón [risas]. Con todo, aún estamos en el debe de las narrativas femeninas y del número de cineastas mujeres”.

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