‘Goma, 14 de abril’: la nueva vida de uno de los mejores discos incomprendidos del rock español
El guitarrista Manuel Imán revisita 47 años después el único disco del grupo sevillano Goma, una banda que se disolvió mientras grababa este trabajo experimental y reivindicado con el tiempo
La aguja del giradiscos se posa sobre el microsurco (se trata de una edición en vinilo con tirada limitada) y, dentro de una atmósfera lisérgica, irrumpe como un rayo el viejo riff de guitarra, que se reconoce de inmediato con toda su fuerza y prestancia. La batería marca un ritmo trepidante y pronto entra en juego la vivacidad del saxofón. Se trata del tema Aquí y ahora en el arranque del disco 14 de abril de la banda sevillana de rock Goma. No estamos ...
La aguja del giradiscos se posa sobre el microsurco (se trata de una edición en vinilo con tirada limitada) y, dentro de una atmósfera lisérgica, irrumpe como un rayo el viejo riff de guitarra, que se reconoce de inmediato con toda su fuerza y prestancia. La batería marca un ritmo trepidante y pronto entra en juego la vivacidad del saxofón. Se trata del tema Aquí y ahora en el arranque del disco 14 de abril de la banda sevillana de rock Goma. No estamos escuchando su grabación original (Movieplay/Gong, 1975), sino una revisión de ella publicada como Goma, 14 de abril. Revisited, editada recientemente por Serie Gong Productores, la marca rescatada por el polifacético Gonzalo García-Pelayo, que coproduce el disco junto con el fundador de la formación y líder del actual proyecto, Manuel Imán.
La idea de volver a grabar aquel icónico disco rondaba desde hace años en conversaciones con García-Pelayo, que siempre mostró su predilección por aquella grabación. Ya en 2006 declaraba en el libro 201 discos para engancharse al pop/rock español): “14 de abril es un disco fantástico, nuevo, originalísimo. Esos silencios repentinos, esas subidas de volumen… Es una de las mejores obras de la historia. Si tuviese mucho dinero, me daría el gustazo de reunir a aquellos músicos y regrabar el álbum con la tecnología actual, con un sonido del carajo”. Decenio y medio después parece haber cumplido su sueño. Pero ¿por qué, dentro de la extensísima y brillante producción de aquel legendario sello, el disco de Goma ha sido el primero en ser rescatado y regrabado (no reeditado, hay que subrayar)? Además de la referida preferencia, el productor afirma: “Quizás sea el mejor de unos discos que fueron incomprendidos en su momento y el único cuyos autores me ofrecieron la idea de volverlo a hacer”.
El subsello Gong de la discográfica Movieplay/Fonomusic fue fundado en 1974 por el citado García-Pelayo y, durante los años setenta y ochenta del pasado siglo, publicó una interminable relación de discos, muchos de ellos éxitos de ventas: Triana, Lole y Manuel y una larga nómina de cantautores españoles (Luis Eduardo Aute, Hilario Camacho, Carlos Cano…), además de los cubanos Pablo Milanés y Silvio Rodríguez. El disco de Goma fue uno de los primeros de la serie, en paralelo con el primero de Triana; de hecho, se registraron en las mismas fechas (uno de día, el otro de madrugada, en los estudios Kirios de Madrid). Pero, a pesar de su reconocida calidad, la grabación tuvo una repercusión y unas ventas muy limitadas, algo que no es nada de extrañar. Si se pregunta a los integrantes originales del grupo, todos coinciden en afirmar que, cuando lo hicieron, no se le pasaba por la cabeza ninguna intención comercial. “Se trataba de una obra creativa, un disco experimental, de exploración e investigación”, afirma taxativo el guitarrista Manuel Imán. Ello no ha impedido, y puede que incluso haya contribuido, que el grupo y su única obra sean tenidos como objeto de culto y disco de referencia por aficionados e iniciados, contando con fenómenos de venta en países como Japón, de donde llegaron a recibir derechos de autor.
En ese fenómeno de culto, también pudieron entrar en juego hechos como que la banda salió prácticamente disuelta del estudio de grabación o que de ellos solo se contabiliza un único concierto, del que no se conservan registros. Sí los hay de su paso por la televisión en blanco y negro de aquellos años que, por cierto, se puede rastrear en los archivos de RTVE (programa Ahora, 24 de agosto de 1975). La escucha de aquella sesión en directo ofrece otro elemento imprescindible para comprender lo que Goma supuso: una formación avanzada a su tiempo, con dos temas improvisados en los que dominaba la atonalidad y la música modal, con evidentes e inesperadas referencias al free jazz.
Claro que pasajes de similar tono se podían encontrar en el 14 de abril original y en esta nueva versión que lo revisita, aunque sean más reconocibles —y reconocidas— otras influencias destacadas. Entre ellas, es lugar común el recurso al grupo de rock progresivo inglés King Crimson, que los miembros Goma consultados admiten haber escuchado en esos años. Antonio Smash, batería en la formación original y en este nuevo disco, señala, por ejemplo, su forma de improvisar y los cambios de atmósferas. La otra referencia es inevitable: el rock andaluz, del que serían en todo caso pioneros, pues cuando ellos graban todavía no se había creado la etiqueta. Manuel Imán reconoce en cualquier caso cierta deuda con un acorde de procedencia flamenca, obra de Manuel Molina, que se encuentra en el tema Madre Tierra, pero que también registraron, cada uno a su manera, tanto Triana como Lole y Manuel. Pepe Saxo, el otro superviviente de la formación, concluye por su parte que la música de Goma fue “una fusión de diferentes etiquetas, pero que, a la vez, era muy de aquí”, en referencia a Andalucía.
Goma había nacido solo un año antes de realizar su única grabación por impulso de la galería sevillana de arte M-11, que le encargó al saxofonista Pepe Sánchez (Pepe Saxo) un proyecto de grupo. Ello ocurrió el 13 de abril de 1974 y, al día siguiente, 14 de abril, el músico volvió con los nombres de la formación, que, además de Sánchez, compondrían el jovencísimo guitarrista Manuel Rodríguez (posteriormente Manuel Imán), el baterista Antonio Rodríguez (Antonio Smash), el teclista Alberto Toribio y el bajista Pepe Lagares, que, desgraciadamente, es el único que no ha sobrevivido para esta revisión. El concepto de revisión lo subraya Manuel Imán, quien recalca que, dentro del reto que el proyecto suponía, nunca se planteó regrabar lo mismo: “Son los mismos cuatro temas del disco de 1975, pero con una aproximación y dimensión distinta, otra perspectiva”.
Para ello, además del concurso de con Pepe Saxo y Antonio Smash, Manuel ha querido contar con representantes de las nuevas generaciones de músicos sevillanos, como Christian de Moret, que pone su voz en el tema Aquí y ahora; los bajistas Dani Escortell y Pepe Frías; el teclista Pepe Ávila; el batería Antonio Gamero y el saxofonista Bernardo Parrilla. Su participación ha supuesto para Manuel una auténtica revitalización de la obra, que, en su opinión, incorpora la frescura de hoy y una muy mejorada calidad de sonido. “Todos hemos aprendido mucho, los músicos y también los técnicos”, afirma. Antonio Smash apunta al conocimiento y la madurez, frente a la pasión que dominaba la grabación original y ve la nueva versión como “más madura y asentada”.
La portada republicana de Alberto Corazón
La portada del disco actual, obra del artista Fernando Pinteño, ofrece una deconstrucción de la original, creación de Alberto Corazón. Aquella primera fue objeto de censura: el título '14 de abril', de clara resonancia republicana, por más que se quisiera vestir como la fecha de constitución del grupo, aparecía sobre una cinta con los colores de la bandera tricolor de la Segunda Republica (rojo, gualda y morado) proclamada en la misma fecha. La casa Movieplay, quizás para evitarse problemas, eliminó el morado y dejó solo el rojo y gualda de la enseña nacional. Igualmente, a la pirámide truncada central, que iba coronada por el ojo de Marilyn Monroe enmarcado en el tradicional triángulo del 'ojo de Dios que todo lo ve', se le eliminó ese atributo divino para dejar la mirada de la actriz flotando dentro de una singular estrella.