Tres camiones españoles para empaquetar los museos de Ucrania
Los profesionales del arte envían 200 metros cúbicos de cajas y 12.500 kilos de herramientas para ayudar a salvaguardar las obras de arte en peligro por la invasión rusa
Mientras que el centro de Madrid se blinda para celebrar la cumbre de la OTAN, 10 kilómetros al este de la ciudad, en el municipio de Coslada, tres camiones con matrícula polaca se preparan para partir. Pintados con los colores de la bandera ucrania —cabina amarilla y remolque azul—, a medida que transcurría la mañana de este lunes, los tráileres se iban llenando de cajas de cartón, paquetes de cinta aislante, extintores, rollos de papel de burbujas… Todo lo ...
Mientras que el centro de Madrid se blinda para celebrar la cumbre de la OTAN, 10 kilómetros al este de la ciudad, en el municipio de Coslada, tres camiones con matrícula polaca se preparan para partir. Pintados con los colores de la bandera ucrania —cabina amarilla y remolque azul—, a medida que transcurría la mañana de este lunes, los tráileres se iban llenando de cajas de cartón, paquetes de cinta aislante, extintores, rollos de papel de burbujas… Todo lo necesario para desmontar un museo y salvaguardar sus obras de arte. Con la ofensiva rusa todavía activa, que ya cumple más de 120 días, el Gobierno de Zelenski ha hecho una llamada a los países europeos para que les faciliten estos materiales, agotados tanto en su país como en los más próximos. Este lunes 27 de junio España ha enviado su grano de arena con tres cargas con destino a Komorowo (Polonia), que ayudarán a preservar el patrimonio ucranio en peligro desde la invasión de Putin.
El resultado de la operación, bajo el nombre de Profesionales y museos con Ucrania, son 200 metros cúbicos de cajas y 12.500 kilos de material, que se han recogido en 15 instituciones colaboradoras en apenas dos meses. En los tres camiones predominan cajones de embalaje, palés, planchas de espuma de polietileno, esquineras para cuadros o botes de gel de sílice. Asimismo, también se ha conseguido equipo informático, útil también para el inventario de los museos, como discos duros externos, tablets, ordenadores y teléfonos móviles. Destaca una remesa de 300 extintores, un elemento que se ha vuelto muy preciado y que se vende a un precio desorbitado en el mercado negro nacional. En él, objetos tan cotidianos como una caja de cartón se han vuelto muy valiosos.
Teresa Reyes, presidenta de ICOM España (Consejo Internacional de Museos), cuenta frente a los camiones que la llamada de socorro fue recibida en mayo: “Los compañeros de Ucrania nos explicaron la situación por la que estaban pasando y nos dijeron que necesitaban materiales de conservación, cajas de embalaje y todo lo necesario para desmontar los museos de su país, porque se habían quedado sin material, tanto ellos como los países de alrededor”. Polonia ha sido uno de los que se ha volcado desde el primer momento con su vecino. Ya ha invertido más de un millón de euros en la prevención de arte, pero la escasez de materiales a causa de la guerra les ha obligado a recurrir a otros Estados, como Francia y Dinamarca, que también han enviado recursos. “Los precios subieron mucho, así que terminaron por pedir colaboración a los diferentes países que estábamos en la reunión. A raíz de eso, empezamos con el proyecto”, detalla Reyes.
Aclara que habría sido mucho más sencillo enviar solo una aportación económica —cosa que también se ha hecho—, pero que el problema residía en que no había donde comprar ese material porque todo estaba agotado en la zona. Ante el reto que suponía, se esperaba poder enviar un camión como mucho, pero gracias a la colaboración de museos de todo el país se ha conseguido llenar tres. Entre ellos, el Instituto del Patrimonio Cultural de España, el Museo Guggenheim, la Asociación de Museólogos y Museógrafos de Andalucía o el Museo del Prado.
Para se haya podido realizar el envío, han colaborado también empresas expertas en transporte de arte, como SIT, que ya lidió con el traslado del Guernica al Reina Sofía, y desde cuya sede ha partido la flota de este lunes. “Finalmente ha sido de gran ayuda Correos, que ha sido la que ha fletado los tres camiones para llevarlos hasta Ucrania. Uno de ellos de manera totalmente gratuita y los otros dos a un precio muy competitivo que pagamos entre las delegaciones españolas de ICOM e ICOMOS”. Anteriormente, la empresa española de mensajería ya había mandado más partidas con ayuda humanitaria a Ucrania, así que tenían la experiencia y la capacitación para solventarlo.
Los camioneros son polacos, pues en la situación actual alguien con otra nacionalidad y que no se maneje con el idioma tendría más problemas a la hora de cruzar las fronteras del país ucranio. Los camiones llegarán el viernes al almacén de la Agencia para las Reservas Estratégicas, situada en la ciudad polaca de Komorowo, desde donde se distribuirá a las ciudades y museos ucranios que precisen el material. Ahora les esperan por delante cinco días de carretera para salvar el patrimonio de un país.