‘Elvis’, pasable y olvidable ‘biopic’ sobre el rey Presley
Con tantas películas sobre músicos, estaban tardando demasiado tiempo en abordar en pantalla la vida de aquel prodigioso cantante que alborotó la temperatura sexual de Estados Unidos
Los biopics sobre los grandes protagonistas de la música en el siglo XX, algunos de los cuales aún siguen vivos y con la creatividad intacta (todavía no se han atrevido con Dylan, Van Morrison, Tom Waits, Caetano Veloso, e imagino que ya estarán dándole vueltas a cómo abordar las figuras de los difuntos monarcas de la seducción Leonard Cohen y David Bowie) mantienen parecido estético y narrativo, intentos de redimir al final las turbulencias y los pasotes que aquejaban a esa gente legendaria y que el espectador salga con buen sabor de boca. Pero es difícil encontrarte con el gran cine e...
Los biopics sobre los grandes protagonistas de la música en el siglo XX, algunos de los cuales aún siguen vivos y con la creatividad intacta (todavía no se han atrevido con Dylan, Van Morrison, Tom Waits, Caetano Veloso, e imagino que ya estarán dándole vueltas a cómo abordar las figuras de los difuntos monarcas de la seducción Leonard Cohen y David Bowie) mantienen parecido estético y narrativo, intentos de redimir al final las turbulencias y los pasotes que aquejaban a esa gente legendaria y que el espectador salga con buen sabor de boca. Pero es difícil encontrarte con el gran cine en este género tan milimétricamente calculado. Y la mayoría de ellas son aceptables, se pueden ver y oír, aunque siempre previsibles y epidérmicas. También hay directores con inmenso arte que construyeron joyas narrando la existencia gloriosa y trágica de dioses de la música. Lo hizo Clint Eastwood con su profundo y atormentado retrato del genial Charlie Parker en Bird. También Milos Forman en Amadeus, al hablarnos de aquel individuo insoportable que creó una música inmortal llamado Mozart.
Estaban tardando demasiado tiempo en abordar a Elvis Presley, aquel prodigioso cantante que alborotó la temperatura sexual de Estados Unidos, hizo vibrar a tanta gente joven que se identificaba hasta el delirio con su música, vivió una época en la que a su país le ocurrieron muchas cosas nuevas y trascendentes. También sombrías, como los asesinatos de los hermanos Kennedy y de Martin Luther King. Nos cuentan cómo el niño pobre de Memphis mamó desde pequeñito una música que habían inventado los negros, el gospel y el R&B, hablan del incendiario milagro que le ocurría al público cuando en el escenario este señor se ponía a cantar acompañado del movimiento de sus caderas y de su pelvis. O del estremecimiento que podía provocar en lo más íntimo de los oyentes interpretando canciones tan poderosas como Unchained Melody, Suspicious Minds e In The Ghetto. ¿Y qué le ocurrió en su vida aparte de mantener su trono en el escenario? Pues que ganó infinidad de pasta y se la pulió, que le hubiera gustado profundizar en la gran música y no se lo permitieron porque su imagen generaba fortunas, que pasó montones de años en Las Vegas vendiendo más de lo mismo, que frecuentó Hollywood interpretando películas lamentables, que no supo o no pudo salvar su matrimonio con el gran amor de su vida, que iba ciego con el pastilleo que le mató a los 42 años. Y lo más complejo y tenebroso: que dependió a niveles monstruosos de las decisiones que tomaba respecto a su vida y su profesión un tipo oscuro e inquietante que le representaba, el coronel Tom Parker, alguien con capacidad para hacerle inmensamente rico, aunque le negaba sus sueños, que jamás tuvo compasión con sus deseos artísticos.
Elvis la dirige Baz Lurhmann, presunto creador visual, autor de la muy boba Moulin Rouge y de la prescindible adaptación de la inolvidable novela de Fitzgerald El gran Gatsby. Cuentan que esta película entusiasmó al público en Cannes y que los críticos abominaron de ella. En mi caso, no entiendo que despierte pasiones o aborrecimientos. La veo y la escucho sin que me provoque ningún sentimiento extremo. Pero sí me resulta grotesco que algunos opinadores califiquen de horrenda la interpretación que hace Tom Hanks del coronel Tom Parker. Su personaje despierta repulsión. Sin embargo, Hanks, como siempre, lo hace bien. Y ya sé que puede resultar arduo y exótico ver al modélico Hanks otorgándole vida y misterio a un tipo farsante y oscuro.
Elvis
Dirección: Baz Luhrmann.
Intérpretes: Austin Butler, Tom Hanks, Olivia DeJonge, Helen Thomson, Richard Roxburgh.
Género: biopic. EE UU, 2022.
Duración: 159 minutos.
Estreno: 24 de junio.