La pandemia ha paralizado el rodaje de 25 largometrajes en Andalucía
El sector audiovisual de la Comunidad Autónoma se une en una plataforma para afrontar la crisis
La crisis del coronavirus ha logrado algo sin precedentes en Andalucía: la unión del sector del cine y el audiovisual en la Plataforma del Audiovisual Andaluz (PAA) que, desde el pasado 14 de abril, aglutina a 28 entidades del sector para convertirse en interlocutora con la Administración Pública y buscar salidas al parón derivado del estado de alarma. Los directores y guionistas Alberto Rodríguez y Benito Zambrano y la actriz Mercedes Hoyos, portavoces de la PAA, han analizado este miércoles lo...
La crisis del coronavirus ha logrado algo sin precedentes en Andalucía: la unión del sector del cine y el audiovisual en la Plataforma del Audiovisual Andaluz (PAA) que, desde el pasado 14 de abril, aglutina a 28 entidades del sector para convertirse en interlocutora con la Administración Pública y buscar salidas al parón derivado del estado de alarma. Los directores y guionistas Alberto Rodríguez y Benito Zambrano y la actriz Mercedes Hoyos, portavoces de la PAA, han analizado este miércoles los problemas a los que se enfrenta el sector en una videoconferencia.
A partir del 11 de mayo, la desescalada autoriza los rodajes —en aquellas provincias donde los datos sanitarios permitan suavizar el confinamiento y pasar a la llamada fase 1—, pero respetando las medidas de seguridad generales. Eso “dificulta la filmación y hay que asegurar la salud de los trabajadores”, ha apuntado Piluca Querol, directora de la Andalucía Film Commission. La pandemia ha paralizado y pospuesto en Andalucía 119 rodajes que, según el sector, no se podrán retomar este año. “Podrá hacerse algún documental o publicidad, pero no producciones de ficción que se encarecerían considerablemente, en torno a un 35%, si hay que cumplir los protocolos de distanciamiento”, ha añadido Querol. De entre los 119 proyectos interrumpidos, que incluyen 25 largometrajes, un 72% son producciones nacionales y un 28%, internacionales.
El sector audiovisual andaluz generó en 2018 —últimos datos de los que se dispone— en producciones cinematográficas, televisiones, empresas de posproducción, eventos cinematográficos, distribución y exhibición, según datos de la Consejería de Empleo, Formación y Trabajo Autónomo de la Junta de Andalucía, 38.676 empleos y tuvo una repercusión económica de más de 450 millones de euros.
“Si en 2018 el Gobierno de España hubiese aprobado el Estatuto del Artista, que permite una fiscalidad especial para trabajos tan irregulares como los del cine, aliviaría la situación actual”, ha afirmado Zambrano, quien ya da por perdido este año para el proyecto en el que está trabajando que implica parte del rodaje en África. “Hay que tomar medidas ágiles y urgentes y necesitamos el apoyo de la Administración, a través de la RTVA, para que el cine andaluz crezca y deje de representar solo el 20% del cine español”, ha precisado Zambrano, cuya película Solas, en 1999, supuso una nueva etapa de visibilización para las producciones andaluzas.
“Si algo ha demostrado el cine andaluz es que somos creativos, soñadores y peleones. Esperanzas todas y ganas de pelearlas, todas. Confiamos en el que el Gobierno andaluz se ponga las pilas y tome ejemplo de lo que está pasando en otras comunidades, porque somos una parte importante del futuro. Venimos de hacer un camino largo donde no había casi nada, un desierto, y ahora que tenemos a gente cualificada con capacidad para hacer productos grandes, estamos en el mejor momento de nuestras vidas creativa y profesionalmente y nos queda mucho por dar”, ha añadido Zambrano, quien el pasado año estrenó Intemperie, basada en un relato de Jesús Carrasco y protagonizada por Luis Tosar.
Para Alberto Rodríguez, que ha firmado Grupo 7 y La isla mínima o la serie La peste, la unión del sector en la Plataforma del Audiovisual Andaluz, que ha creado un vídeo que ha presentado este miércoles para dar a conocer su existencia, supone un gran paso adelante. “Una de las cosas que se pueden articular ya son las ayudas a la creación y al desarrollo y esto es hablar de futuro. Y no sólo por nuestra generación, sino por quienes vienen detrás. Hay gente que se tiene que abrir camino sea como sea y tal y como lo hicimos nosotros", ha afirmado Rodríguez.
Según Rogelio Delgado, representante de la Asociación de Empresas de Distribución Audiovisual de Andalucía (Aedava) y de las salas de exhibición, las 200 empresas andaluzas que cuentan con 604 pantallas perderán este año entre el 35% y el 50% de sus ingresos que, en 2019, ascendieron a 94 millones de euros, según cuando se reanuden las proyecciones comerciales.
“El descenso del PIB del sector cultural y artístico ha sido el mayor durante el primer trimestre, con una caída del 11,2%. En ese sentido el decreto estatal, que estamos estudiando ahora, nos deja con una sensación agridulce”, ha confesado Gervasio Iglesias, en representación de los productores. “No se ha activado una línea de financiación directa, que sí está presente en nuestro entorno en Europa. En producción, echamos de menos medidas más contundentes”, añadió.
“Hay comunidades, como Galicia, Cataluña o Madrid, que están apoyando al sector audiovisual como la industria estratégica que es. Estamos esperanzados que desde la Junta haya una sensibilidad especial con nuestro sector, ya que hemos aportado bastante a la creación de cultura y de empleo”, ha comentado el productor. La plataforma ha elaborado un documento de medidas que considera necesarias que le presentará a la consejera de Cultura andaluza, Patricia del Pozo, en una reunión telemática prevista para este jueves.