Exclusividad y tradición en Menorca
Más de medio centenar de los barcos más bellos del mundo participan en Mahón en una de las regatas con mayor encanto del Mediterráneo
Las isla de Menorca vuelve un año más a ser escenario de un espectáculo náutico de gran belleza y singularidad, la Copa del Rey Panerai de Vela Clásica de Menorca. La prueba, organizada por el Club Marítimo de Mahón y el Real Club Náutico de Barcelona, con la colaboración de las federaciones española, balear y catalana de vela, reúne una impresionante flota integrada por más de medio centenar de los barcos a vela más bellos que navegan por el Mediterráneo.
La cita menorquina es la competición de barcos clásicos y de época más importante que se celebra en España. Creada en 2003, forma pa...
Las isla de Menorca vuelve un año más a ser escenario de un espectáculo náutico de gran belleza y singularidad, la Copa del Rey Panerai de Vela Clásica de Menorca. La prueba, organizada por el Club Marítimo de Mahón y el Real Club Náutico de Barcelona, con la colaboración de las federaciones española, balear y catalana de vela, reúne una impresionante flota integrada por más de medio centenar de los barcos a vela más bellos que navegan por el Mediterráneo.
La cita menorquina es la competición de barcos clásicos y de época más importante que se celebra en España. Creada en 2003, forma parte desde 2005 del Panerai Classic Yachts Challenge, el circuito internacional de regatas de mayor prestigio reservado exclusivamente a este tipo de barcos.
La prueba comienza hoy con la recepción de los participantes y la medición de las embarcaciones. El jueves 31 de agosto, a las 12.30 horas, se disputará la primera regata de la XIV Copa del Rey Panerai, que se prolongará hasta el sábado 2 de septiembre. La competición se desarrolla en una zona que goza de gran variedad de vientos, con lo que el espectáculo en el mar está asegurado. Una vez más, la organización situará la línea de llegada en el interior del puerto de Mahón siempre que el tiempo lo permita. Esto dará al público la oportunidad de ver y disfrutar más de cerca de la espectacularidad de la prueba.65 embarcaciones de 13 países, han confirmado su participación en la que será la flota más numerosa de la historia de la regata.
El puerto de Mahón es uno de los fondeaderos mejor protegidos del Mediterráneo donde el mar que se adentra en la isla unos seis kilómetros, lo que le convierte en el segundo puerto natural más grande del mundo después de Pearl Harbour, en Oahu, Hawái (EE UU). A su abrigo se encuentran las instalaciones del club Marítimo y en sus pantalanes del Moll de Llevant se podrán admirar estas damas del mar, atenticas joyas de la navegación a vela. Un grupo de embarcaciones que han sido restauradas y son obra de los más prestigiosos diseñadores y astilleros.
Barcos con historia
El paso del tiempo casi hizo desaparecer a muchos de estos viejos barcos que quedaron varados en playas y calas, o abandonados en algún puerto. Gracias a iniciativas públicas y privadas algunos pudieron ser recuperados y restaurados en un proceso combinado de arqueología, ingeniería y artesanía naval.Muchos forman parte de la historia y han sido testigos de importantes acontecimientos en el siglo pasado.
El Eilean es un miembro distinguido del selecto club que estará en Menorca. Es un ketch bermudiano, construido en 1936, de 22 metros de eslora y 4,5 de manga, y con dos mástiles de 18 y 28 metros. En abril de 2006, Angelo Bonati, empresario italiano presidente de la firma de relojes de lujo, Panerai (patrocinador de la regata), se topó en la isla de Antigua, en el mar Caribe, con el moribundo Eilean. Lo compró. En 2009 tras ser restaurado en los astilleros Francesco Del Carlo, en Viareggio (Italia), regresó al mar tal como William Fife lo había concebido 70 años antes.
Otro de los que no faltará a la cita en la clase big boats será, con más de cien años, el legendario Moonbeam IV (1914), de 35 metros, que fue el barco donde pasaron la luna de miel Rainiero de Mónaco y Grace Kelly. También Germán Frers II, a sus 76 años , estará a la caña del Fjord III, uno de los barcos diseñado por su padre. La embarcación argentina, botada en 1947. Su padre, Germán Frers I, diseñó este balandro bermudiano de 14,88 metros de eslora que fue construido para participar en una regata entre Buenos Aires y Río de Janeiro.
Rivales a batir
La flota quedará dividida en cinco clases y los todos los ganadores de la edición de 2016 han confirmado su presencia. El Spartan, un cutter con aparejo de cangreja de 1912, diseñado por el americano Nathanel G. Herreshoff, se medirá a otros cinco barcos en la clase big boats (embarcaciones de más de 23 metros de eslora). Los barcos botados antes del 31 de diciembre de 1949, pertenecientes a la clase Época, formarán dos grupos en función de sus aparejos (Cangreja, los de velas trapezoidal, y Marconi, los de velas triangulares).En Cangreja , el Kelpie (1903) luchará por conseguir su segunda victoria. En Marconi, el Rowdy (1916), que posee el título de vencedor de las dos últimas ediciones, se presenta como principal favorito.
La categoría de clásicos (embarcaciones botadas entre el 1 de enero de 1950 y 1975) será la más numerosa con 25 representantes. El Argos (1964), que consiguió el año pasado su tercera victoria, segunda consecutiva, podría alargar su leyenda en esta edición. Por último, en la clase Espíritu de Tradición, el principal aspirante al título es el Calima (1970), auténtico “rey de copas” de la regata menorquina con diez victorias anotadas en su cuaderno de bitácora.