Carretera a la muerte

Una exposición fotográfica en Arlés recupera los lugares donde perdieron la vida iconos del siglo XX

El cruce donde murió James Dean, en Cholame (California). En este cruce, un Ford a gran velocidad chocó contra el Porsche de James Dean.Christophe Rihet

Cuando el director Alfred Hitchcock grabó a la actriz Grace Kelly conduciendo a toda velocidad —para horror de su acompañante Cary Grant— por las serpenteantes carreteras de la Costa Azul en la película Atrapa un ladrón nadie podía pensar que la misma escena, treinta años después, se volvería a repetir pero esta vez con un final trágico. En 1982, el coche donde viajaba la actriz con su hija Stephanie derrapó al tomar una curva cerca del Principado, cayendo a un barranco de unos cuarenta metros de profundidad. La que fuera una de las actrices más glamurosas de Hollywood y más tarde pri...

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Cuando el director Alfred Hitchcock grabó a la actriz Grace Kelly conduciendo a toda velocidad —para horror de su acompañante Cary Grant— por las serpenteantes carreteras de la Costa Azul en la película Atrapa un ladrón nadie podía pensar que la misma escena, treinta años después, se volvería a repetir pero esta vez con un final trágico. En 1982, el coche donde viajaba la actriz con su hija Stephanie derrapó al tomar una curva cerca del Principado, cayendo a un barranco de unos cuarenta metros de profundidad. La que fuera una de las actrices más glamurosas de Hollywood y más tarde princesa de Mónaco moría a causa de una hemorragia cerebral.

Bajo el titulo de Road to Death, el fotógrafo Christophe Rihet presenta una inquietante serie fotográfica que se puede ver este verano dentro del extenso programa de exposiciones de Los Encuentros de Arlés, el gran encuentro de la fotografía internacional que se celebra cada año en la ciudad provenzal. Inspirada en parte en la novela Crash, de James G. Ballard —trasladada a la pantalla por el director David Cronenberg—, la colección fotográfica recupera esas carreteras de la muerte ahora convertidas en paisajes silenciosos, que han quedado unidos de una forma trágica y macabra a la historia de algunos de los grandes iconos del siglo XX fallecidos en accidente automovilístico.

A primeras horas del amanecer o al final del día, las fotografías de Rihet se revelan entre la placidez y la belleza del paisaje y la propia leyenda, de muerte y violencia, que encierra su memoria. La nacional 6, bordeada de plátanos, cerca de la localidad francesa de Villeblevin donde encontró la muerte el premio nobel Albert Camus el 4 de enero de 1960, o la carretera entre Cannes y Opio en la que la moto Honda del cómico Coluche se estrelló contra un camión. Rihet declaró con motivo de la presentación: "No he tratado de buscar o analizar las causas del accidente, que en el caso de James Dean resultan casi incomprensibles, dos coches que chocan en un cruce en pleno desierto, lo que me gusta y lo que me interesaba era fotografiar esos lugares como paisajes".

James Dean. El nacimiento del mito

El 30 de septiembre de 1955, James Dean se estrella con su Porsche 550 Spyder cuando se dirige a la localidad de Salinas para participar en una carrera automovilística. Acababa de participar en Gigante, su tercer y último largometraje. Había salido temprano de Los Ángeles acompañado de su chófer, cuando cerca de Cholame, un Ford a gran velocidad se cruza en su camino, al tratar de esquivarlo, su Porsche da varias vueltas de campana, estrellándose contra la cerca de un rancho. El actor muere al instante. Tenía 24 años. Acababa de nacer la leyenda James Dean.

Grace Kelly. De la ficción a la realidad

El 13 de septiembre de 1982, Grace Kelly regresa al Principado acompañada de su hija la princesa Estefanía. La actriz y princesa de Mónaco conduce el coche, un Rover 3500. A la altura de la Corniche Cap d’Ail el automóvil cae por un barranco al tomar una curva. La actriz y su hija quedan atrapadas mientras el vehículo comienza arder. Gracias a la intervención de un granjero que acude en su ayuda consiguen apagar el incendio con el extintor de su camioneta. La actriz muere al día siguiente a causa de una hemorragia cerebral. Tenía 52 años.

Helmut Newton. La última fotografía

Cuando el Cadillac del fotógrafo Helmut Newton dejó el famoso Château Marmont de Los Ángeles eran las 11.40 de la noche del viernes 23 de enero de 2004. Su coche, según el portavoz de la policía, perdió el control cuando salía del aparcamiento del hotel tras acelerar bruscamente. Se estrelló contra un muro cercano. Newton moría unas horas más tarde en el hospital. Tenía 83 años y sus desnudos femeninos para algunas de las revistas más importantes habían transformado la imagen de la moda, acompañadas también de polémicas y denuncias de sexismo.

Jackson Pollock. Una noche de verano

El 11 de agosto de 1956, pasadas las diez de la noche, el coche, un Oldsmobile que conducía el artista Jackson Pollock, se estrella, no lejos de su casa, en una apacible carretera de la ciudad de Springs, en el Estado de Nueva York. El pintor, con problemas de alcoholismo desde los 15 años, conduce en estado embriaguez. En el accidente perecen dos personas más, mientras un tercer pasajero, su compañera sentimental, Ruth Kligman, sale ilesa del choque. Los restos del artista reposan en el cementerio de Green River (Springs).

Françoise Dorleac. La belleza mutilada

La mañana del 26 de junio de 1967, la actriz Françoise Dorleac, hermana de Catherine Deneuve, deja la localidad de Saint-Tropez para coger un avión en el aeropuerto de Niza. Le aguardan la presentación de la pelÍcula Las señoritas de Rochefort, que ha protagonizado junto a su hermana a las órdenes de Jacques Demy. La actriz conduce bajo una fuerte lluvia un coche de alquiler. A la salida de Villeneuve-Loubet, en una curva muy cerrada, pierde el control del coche, que da varias vueltas y se incendia. Tenía 27 años y había trabajado a las órdenes de directores como François Truffaut y Roman Polanski.

Jean Seberg. Al final de la escapada

El cadáver de la actriz Jean Seberg, la heroína de películas como Buenos días, tristeza, de Otto Preminger y A bout de souffle (Al final de la escapada) la obra revelación de la Nouvelle Vague, aparecía en el interior de un coche aparcado en el distrito residencial número 16 de París. El descubrimiento del cadáver se produce la mañana del 30 de agosto de 1979. La actriz estadounidense pero residente en Francia lleva más de una semana sin vida en el vehículo. Un  hombre que pasea con su perro percibe un fuerte olor que sale del interior del vehículo. La actriz se había encerrado y había ingerido una mezcla fatal de alcohol y barbitúricos. Acababa de cumplir 40 años.

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