TV3 se convierte en ‘telejuicio’

El proceso en el Tribunal Supremo monopoliza de la mañana a la noche la parrilla de la televisión catalana

La presentadora Helena García Melero (izquierda) y la escritora Empar Moliner, en el programa 'Tot es Mou'.

A las ocho de la mañana, TV3 está hablando del juicio a los líderes independentistas catalanes en el Tribunal Supremo. Y cuando se acerca la una de la madrugada, el juicio del procés sigue desatando profusos debates. En un día de sesión, el Supremo monopoliza la cobertura de la televisión pública catalana. Si se excluyen la telenovela del mediodía, el programa de cocina, el informativo comarcal y la serie nocturna, todo gira alrededor ...

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A las ocho de la mañana, TV3 está hablando del juicio a los líderes independentistas catalanes en el Tribunal Supremo. Y cuando se acerca la una de la madrugada, el juicio del procés sigue desatando profusos debates. En un día de sesión, el Supremo monopoliza la cobertura de la televisión pública catalana. Si se excluyen la telenovela del mediodía, el programa de cocina, el informativo comarcal y la serie nocturna, todo gira alrededor del juicio. Hasta el punto de que gran parte de las sesiones se retransmite en directo pese a que también las programa el canal informativo hermano 324.

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La apuesta le está dando frutos a TV3: en febrero, cuando arrancó el juicio, amplió su liderazgo de audiencia, logrando su mejor cuota (16,2%) desde octubre de 2017. Una portavoz de TV3 asegura que la cobertura es “equilibrada” y explica que se conecta solo en las declaraciones más importantes del juicio. “Responde al interés informativo”, dice. En una reciente comparecencia en el Parlament del director de TV3, Vicent Sanchis, el diputado de Ciudadanos, Ignacio Martín Blanco, acusó a la cadena de parcialidad por asumir “las tesis de las defensas”.

Un día entero —el pasado martes, cuando se reanudó el juicio esta semana— mirando TV3 permite trazar cierta radiografía. En una conexión del programa Els matins desde el Palau de la Generalitat, el periodista Jordi Eroles habla del “juicio contra los presos políticos”, el término que utiliza el independentismo pero cuya simbología ha sido acusada de partidismo por la Junta Electoral, que ha obligado a retirar lazos amarillos de edificios públicos. El poso político se intensifica según avanza el día, paralelo a intentos de erosionar las acusaciones contra los dirigentes en el banquillo. Entre los tertulianos de los magacines de la mañana y de la tarde —que apenas hablan al interrumpirse la programación—, se oyen pocas voces críticas con el procés. Ser un experto legal es una preciada baza. Y hay programas en los que es difícil no percibir simpatía hacia los acusados.

En Tot es mou, el magacín de la tarde, se intentan desacreditar las declaraciones de los agentes de la Guardia Civil que han testificado sobre el registro a la Consejería de Exteriores en septiembre de 2017 y lo han descrito como un “capítulo de terror total”. TV3 echa un capote a las defensas: la comentarista Empar Moliner analiza los vídeos sobre ese registro después de que el juez Manuel Marchena rechazara la petición de las defensas de mostrar imágenes.

Las críticas a las acusaciones de los presos del ‘procés’ son la tónica general
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Sin examinar los motivos de la actuación policial pocos días antes del referéndum ilegal, Moliner se burla de los agentes porque el vídeo muestra un ambiente más calmado que el descrito por ellos. “Ponedme música de apocalipsis zombi porque hoy este hombre nos ha dicho cosas terroríficas”, ironiza. “Qué interesante este ejercicio que nos estás haciendo hacer, Empar”, le agradece la presentadora, Helena García Melero. En la interpretación del juicio, otra voz clave es la de la abogada Mireia Balaguer, quien se declara “supercontenta” porque los guardias civiles “están exagerando mucho más que el propio fiscal”.

Cierra el programa la expolítica Pilar Rahola, analista de cabecera del independentismo y omnipresente en TV3, que tiene una sección diaria de opinión: “Se les están yendo tanto de las manos las acusaciones [...] que empieza a haber nervios”. Las dos son amigas. Garcia Melero fue una de las invitadas a una fiesta de Rahola en verano de 2016 junto al expresidente Carles Puigdemont.

En un informe del Consell de l’Audiovisual de Catalunya del último cuatrimestre de 2018, representantes del PP y PSC acusaron a Tot es mou de carecer de pluralismo porque en ese periodo solo entrevistó a un político socialista y a ninguno del PP, frente a 13 del PDeCAT y otros tantos de ERC. La portavoz de TV3 lo justifica porque, según ella, “muchas veces se rechaza desde esos grupos participar en el programa”.

Salvo el programa de cocina, la serie, culebrones y poco más, todo es juicio

Tras un informativo satírico llegan las noticias de la noche. Como al mediodía, el juicio no ocupa las primeras informaciones. Se le dedican 10 minutos. También se compara el testimonio de los guardias civiles con imágenes del registro a Exteriores. Una voz en off explica que es un “relato que no se ha podido mantener ante las preguntas de la defensa” y que “ha habido un momento de surrealismo”.

La noche siguiente, la del miércoles, el informativo ahonda más en las quejas de la defensa. “La sensación, por tanto, es que en la vista se puede hablar de aquello que la Fiscalía quiera con el beneplácito de Marchena. Por tanto, la pregunta es: ¿lo está haciendo bien el tribunal, garantiza el derecho de defensa?”, dice en el plató el periodista David Melgarejo. A continuación, se muestran declaraciones de dos expertos críticos con el criterio del Supremo.

Pasada la medianoche del martes, TV3 emite el programa de debate Més 324. En el arranque, el presentador, Xavier Grasset, también parece minimizar las declaraciones de los guardias civiles. “Este juicio que no deja de generar sorpresas”, dice. La noche del jueves, tras la última sesión de esta semana, vuelve a hablar del juicio.

En el programa de humor Polònia, la noche del jueves, también hay burlas a las declaraciones de agentes de la Guardia Civil en el juicio. Uno de ellos habla de “caras de rabia descontrolada”, lo que hace llorar al juez Manuel Marchena y al fiscal. Un actor entre el público dice que es un “maestro de la interpretación” y, al acabar su declaración, el uniformado hace reverencias como un actor. También hubo bromas sobre la Guardia Civil en el informativo satírico del martes Està passant. Aunque también se ríen de la propia cadena: “Esto es TV3, a la que miras hacia un rincón hay una estelada”, dice un colaborador.

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