LOS PRIMEROS PRESUPUESTOS DE URKULLU

La oposición resalta que el ‘lehendakari’ avanza hacia un “varapalo político”

Hacienda no prevé reunirse con EH Bildu y PSE para negociar las cuentas

Vitoria -
El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, conversa con el lehendakari, Iñigo Urkullu, durante su reunión en la sede de la CE en Bruselas.JULIEN WARNAND (EFE)

El tiempo se acaba y, a falta de avances, los intentos del Ejecutivo para salvar su primer proyecto presupuestario del mal trago político que supone la devolución del proyecto legal parecen brillar por su ausencia. La prueba de un Gobierno que parece haber arrojado la toalla presupuestaria quedó patente ayer, con una ronda de contactos que se ha quedado coja, sin que los portavoces de los dos principales partidos de la oposición, EH Bildu y PSE, hayan sido llamados por parte del Departamento de Hacienda para poner en práctica el discurso de la Lehendakaritza y el PNV: el de negociar hasta el ú...

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El tiempo se acaba y, a falta de avances, los intentos del Ejecutivo para salvar su primer proyecto presupuestario del mal trago político que supone la devolución del proyecto legal parecen brillar por su ausencia. La prueba de un Gobierno que parece haber arrojado la toalla presupuestaria quedó patente ayer, con una ronda de contactos que se ha quedado coja, sin que los portavoces de los dos principales partidos de la oposición, EH Bildu y PSE, hayan sido llamados por parte del Departamento de Hacienda para poner en práctica el discurso de la Lehendakaritza y el PNV: el de negociar hasta el último momento.

El propio Urkullu insistió ayer en esta línea ayer y criticó la falta de voluntad de la oposición para negociar, algo que la oposición también reprocha al equipo de Gobierno. Ese último momento llegará dentro de dos días pero, con el lehendakari en Bruselas —su visita finaliza hoy— y la ronda del consejero Ricardo Gatzagaetxebarria dada por finalizada por portavoces de su departamento, poco más queda por decir. El PP salió del encuentro con Gatzagaetxebarria a la espera de que el Ejecutivo le dé una respuesta por escrito a sus reclamaciones. Un acuerdo conllevaría la abstención de los populares, un gesto insuficiente por tan solo un voto, aquel que UPyD ha dejado claro que no está dispuesto a ceder.

Con todo, el lehendakari se arriesga a que los escaños de su bancada sean los únicos que voten en rojo a la devolución de los presupuestos, una votación que se celebrará pasado mañana. La única duda es si el Ejecutivo retirará su proyecto para evitar la escenificación parlamentaria de su soledad, una alternativa que el Gobierno no confirma y que obligaría a convocar un Consejo de Gobierno antes del viernes.

De una forma u otra, y si se cumple el guión, para esa fecha Euskadi será la segunda de las principales instituciones vascas que finalizará el año con sus cuentas prorrogadas, después de que la Diputación alavesa, gobernada por el PP, viese devuelto su proyecto de presupuestos ante la negativa del PNV a ir más allá de la abstención.

La incógnita radica en si el Gobierno retirará su proyecto antes de la votación

El País Vasco no ha vivido una prórroga desde hace prácticamente una década. La pasada legislatura, los socialistas sacaron sus tres presupuestos con el apoyo del PP y, en el mandato anterior de Juan José Ibarretxe este vio sus cuentas aprobadas durante cuatro años consecutivos con los apoyos del tripartito y el PSE. Una prórroga que en la práctica no va más allá del “varapalo político” que recibirá el Gobierno de Iñigo Urkullu este viernes, según quiso aclarar la portavoz de la ejecutiva del PSE, Idoia Mendia, en una rueda de prensa. Euskadi “no se va a caer”, aseguró la anterior consejera de Justicia.

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Mendia se sumó a las críticas que ha vertido la oposición al completo en las últimas semanas y criticó el “inmovilismo” del Ejecutivo a la hora de negociar. En vez de negociar y de “cambiar la columna de ingresos”, algo imprescindible para los socialistas, el equipo del lehendakari ha preferido elaborar “presupuestos en solitario, consigo mismo, y ha pretendido que los demás comulgasen con ellos”, resumió.

Más de 1.000 enmiendas que nadie votará

Después de que el lunes EH Bildu registrara sus 230 enmiendas parciales al Proyecto de Presupuestos de 2013, a la Mesa del Parlamento le tocó ayer la tarea de calificar y dar a trámite a 991 enmiendas parciales, cinco de totalidad y 12 al articulado, es decir, un total 1.008 correcciones.

Más de mil modificaciones a las cuentas presentadas por el Gobierno que nunca llegarán a ser ni debatidas ni votadas, ya que todo apunta a que el vienes el pleno de la Cámara votará la devolución de los primeros presupuestos de Urkullu, independientemente de la postura final que adopte el PP.

Su portavoz en el Parlamento, Arantza Quiroga, anunció ayer, tras mantener una reunión en la sede del Gobierno vasco con el consejero de Hacienda, Ricardo Gatzagaetxebarria, que las negociaciones siguen abiertas. Los diez votos del PP, sin embargo, no serían suficientes para que el Ejecutivo consiga sacar adelante el proyecto presupuestario.

El ranking de enmiendas lo encabeza el PP con 457 enmiendas parciales, seguido por UPyD con 296, EH Bildu con 230, y el PNV con ocho. El PSE es el único grupo que no ha presentado ninguna enmienda parcial. Sólo ha tramita la de totalidad, por lo que si, hipotéticamente, el lehendakari lograra el viernes sacar adelante los presupuestos, tendrían que negociar con las enmiendas de los demás grupos.

El PP fue el último en registrar, este pasado lunes, su enmienda a la totalidad, sumándose a todos los demás grupos de la oposición, que ya lo habian hecho la semana anterior.

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