La muerte se cuela en un entierro

La muerte se ha colado estos días en un entierro, lo que ha sumado más dramatismo a una historia que ha conmocionado a Colombia. Las autoridades han reportado un muerto y varios heridos este miércoles en una trágica estampida que se produjo durante el funeral de Danna Sofía Alzate, la niña de seis años que fue violada y asesinada por un hombre en el municipio de Chinchiná, Caldas, ubicado en el centro occidente de la región andina de Colombia.

La comunidad se había reunido para despedir a la pequeña en la Basílica Nuestra Señora De las Mercedes, cuando la multitud, entro en pánico y comenzó a correr hacia la salida del cementerio sin enterarse de lo que se encontraba en su camino. A pesar de las declaraciones en redes sociales, donde se decía que el sonido de disparos fue el principal causante de la estampida, la Policía del departamento de Caldas afirma que no se presentó tal cosa, pero que la aglomeración de personas derivó en el pisoteo y la muerte de Luis Alfonso Gonzáles, un hombre de 83 años. Fue trasladado al hospital, pero falleció tras sufrir un fallo cardiaco. La directora del Hospital San Marcos de Chinchiná, Alejandra Marín, confirmó que además se atendieron a diez personas heridas en la estampida, incluyendo una mujer de 73 años que no presenta lesiones graves.

La historia comenzó durante la noche del pasado domingo 20 de noviembre, cuando Danna Sofía Alzate, de seis años, rondaba por su barrio. Juan Carlos Yepes Bañol, alias El Cojo, aprovechó y secuestró a la niña. La víctima fue llevada hasta el sector de El Pescador, a las orillas del río Chinchiná, donde, según la confesión del hombre capturado, fue abusada sexualmente y luego asfixiada. Las autoridades encontraron el cadáver sin vida en una zona boscosa cerca de su casa en el barrio Nuevo Horizonte.

El Cojo, un hombre de 65 años de edad, ya contaba con un caso abierto por el abuso sexual de una menor de 14 años y un feminicidio en el municipio de Quimbaya, Quindío, en diciembre del 2021, por el cual estaba condenado a más de 15 años en la cárcel. El sujeto se había escapado recientemente de la estación de Policía en el municipio de La Virginia (Risaralda) donde cumplía condena. Al ser capturado por la policía, confesó que había estado en los alrededores del hogar de Danna Sofía el día del crimen, pero que no le había hecho nada. Durante la búsqueda, la policía encontró la chaqueta y sandalias que utilizaba la niña al ser raptada, lo que les condujo hacia el cadáver.

Yépes Bañol admitió la responsabilidad del crimen. El crimen ha desatado sentimientos de histeria e indignación en la comunidad, quienes realizaron una marcha exigiendo justicia para que hechos similares no se repitan, e intentaron linchar al responsable. Jorge William Ruiz, el secretario de Gobierno de Caldas, confirmó la presencia del Escuadrón Móvil Antidisturbios (ESMAD) en la estación para dispersar a las personas. El individuo está en la espera de una nueva condena por delitos de secuestro simple, acceso carnal con una menor de 14 años y feminicidio, estimada entre los 45 y 50 años de cárcel.

El alcalde de Chinchina, Eduardo Grisales López, ha manifestado su rechazo ante lo sucedido: ”No hay palabras para expresar la tristeza que nos causa la pérdida de Danna Sofía Alzate; hoy nos duelen sus sueños por cumplir y los momentos que se perdió de vivir al lado de los suyos”.

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