La playa más tóxica de Estados Unidos está en la frontera con Tijuana
Imperial Beach lleva tres años clausurada por las autoridades estadounidenses debido a los niveles de contaminación, aunque sigue siendo frecuentada por turistas
El problema recurrente de la contaminación de aguas residuales provenientes de Tijuana ha provocado que Imperial Beach, en San Diego, California, sea nombrada como la playa más tóxica de Estados Unidos en un informe de Surfrider Foundation. El desgastado drenaje del lado mexicano ha provocado que los residuos se arrastren hacia el Océano Pacífico, al lado de la frontera. La Planta Internacional de Tratamiento de Aguas Residuales, en el lado estadounidense de la frontera, opera desde 1997, pero ha visto su capacidad de procesar 25 millones de galones por día (1.095 litros por segundo) afectada por las fallas de infraestructura en Tijuana en 2022 y la tormenta tropical Hillary.
México dice que una nueva planta en construcción de 33,3 millones de dólares está programada para entrar en funcionamiento el 30 de septiembre. Mientras tanto, las autoridades de San Diego han optado por clausurar Imperal Beach a los visitantes. Desde septiembre de 2021 hay letreros en la arena que advierten a los turistas y residentes para no entrar en el agua, aunque muchos surfistas hacen caso omiso de los anuncios.