El Gobierno de Murcia podrá multar el uso del lenguaje inclusivo en la administración
PP y Cs apoyan una moción de Vox para sancionar a los funcionarios que empleen fórmulas que los ultraconservadores comparan con los totalitarismos del siglo XX
La cruzada de Vox contra el lenguaje inclusivo ha dado esta semana un paso más en la región de Murcia, donde los ultraconservadores consiguieron aprobar este miércoles una moción para regular, legislar e incluso sancionar a los funcionarios de la administración pública que no hagan un “correcto uso conforme a la norma gramatical vigente de la lengua española”. El encargado de defender la propuesta en el pleno de la Asamblea fue Juan José Liarte, uno de los diputados expulsados de Vox que, sin embargo, sigue ejerciendo como portavoz de su grupo parlamentario, y que no ahorró en calificativos pa...
La cruzada de Vox contra el lenguaje inclusivo ha dado esta semana un paso más en la región de Murcia, donde los ultraconservadores consiguieron aprobar este miércoles una moción para regular, legislar e incluso sancionar a los funcionarios de la administración pública que no hagan un “correcto uso conforme a la norma gramatical vigente de la lengua española”. El encargado de defender la propuesta en el pleno de la Asamblea fue Juan José Liarte, uno de los diputados expulsados de Vox que, sin embargo, sigue ejerciendo como portavoz de su grupo parlamentario, y que no ahorró en calificativos para comparar el lenguaje inclusivo con los totalitarismos del siglo XX. “El lenguaje que se empeñan en llamar inclusivo se debería llamar manipulativo y revolucionario”, aseguró, porque se usa “para moldear a la sociedad”. Y añadió: “Es como si usted dice que se siente perro y que tiene derecho a que los demás le llamemos perro y le tratemos como a un perro”.
Liarte, junto con los otros dos diputados expulsados de Vox, Francisco José Carrera y Mabel Campuzano, fue clave para evitar que prosperase la moción de censura contra el gobierno del Fernando López Miras (PP). De hecho, su apoyo político se saldó con el ascenso de Campuzano a consejera de Educación y Cultura.
Durante su intervención en el pleno, el diputado ultraconservador insistió en que el uso del lenguaje inclusivo es “simplemente incorrecto desde el punto de vista gramatical”. Y a esa incorrección gramatical es a la que se han agarrado los diputados del PP y los de Ciudadanos (tanto los tránsfugas que siguen en el Gobierno regional como los que promovieron la moción de censura) para votar a favor de la iniciativa, aunque rebajada a través de una enmienda. El texto original de Vox hablaba de adoptar “cuantas medidas legislativas o reglamentarias, incluso de carácter sancionador o disciplinario llegado el caso, se estimen precisas para garantizar el conocimiento y correcto uso conforme a la norma gramatical vigente de la lengua española […] con expresa prohibición del mal llamado lenguaje inclusivo”. El PP propuso una modificación del texto para suprimir esa “expresa prohibición”.
De esa manera, en la moción ya no aparece la alusión literal al lenguaje inclusivo, y en eso se escuda la vicepresidenta del Gobierno regional y consejera de Mujer, Igualdad, LGTBI, Familias y Política Social, Isabel Franco (Ciudadanos), que estaba presente en el pleno y votó a favor de la misma. La moción, ha dicho este jueves a los periodistas, “se transformó en una invitación al uso adecuado del idioma español, nada más. En una invitación para el uso adecuado de la gramática, en un ámbito totalmente genérico, que nada tiene que ver con la igualdad”.
No está de acuerdo la diputada socialista Gloria Alarcón, que cree que la iniciativa “es otro paso más hacia el ultraderechismo en el Gobierno regional”, que ha “asumido como propios los requerimientos de Vox”. El partido de Santiago Abascal, advierte, está utilizando la comunidad autónoma como su “laboratorio político” porque al PP regional “no le molestan sus posturas”. Ya ensayaron aquí el pin parental y ahora prueban con el lenguaje inclusivo.
Por su parte, la diputada de Podemos María Marín ha advertido de que “por medio del lenguaje, y con la complicidad de quienes dicen querer limpiarlo, fijarlo y dar esplendor, se han olvidado de la mitad del género humano”, en alusión al lema de la Real Academia de la Lengua (RAE), a la que tanto el diputado de Vox como los de PP y Cs se refirieron continuamente durante el debate, alegando que esta no reconoce la necesidad de usar el masculino y el femenino, sino solo el “masculino genérico”.
Para Olvido Garrido, portavoz de Movimiento Feminista Región de Murcia, en este como otros muchos asuntos, el lenguaje evoluciona a un ritmo mucho más rápido de lo que acepta la RAE, que “siempre va a la zaga”. “La sociedad ya está usando ese lenguaje inclusivo que la academia acabará aceptando, igual que ha aceptado que se diga ‘la abogada’ y no ‘la abogado’”, apunta. Y subraya que el siguiente cambio social debe tender a incluir también la terminación “no binaria”, en “e”, para arropar a todas las sensibilidades.
Desde la Plataforma Colombine de Mujeres Periodistas Feministas de la Región de Murcia, Lola Gracia ha lamentado que los diputados “pierdan el tiempo” debatiendo un asunto que supone “un retroceso claro de las libertades públicas y los derechos fundamentales”. El reglamento de la propia Asamblea Regional, ha recordado, está redactado con lenguaje inclusivo y continuos desdoblamientos del tipo “las diputadas y los diputados”.