EL PAÍS refuerza sus contenidos sobre educación y lanza una nueva sección
El equipo de periodistas centrado en la materia se amplía. El espacio destinado a la enseñanza y a la comunidad educativa contará con una ‘newsletter’ semanal
La educación es la base de una sociedad más libre y más justa. Por su importancia, y también para informar y debatir sobre sus problemas, que afectan a profesores, padres y, naturalmente, alumnos, EL PAÍS refuerza el equipo de periodistas dedicado a la educación e inaugura el lunes una sección en su edición digital centrada en la enseñanza. El objetivo es que la comunidad educativa encuentre un lugar en el que se vean reflejados sus aspiraciones y sus problemas, y también sus logros y sus avances. Será un espacio abierto al debate y a la información, a lo que se está haciendo en España y en el...
La educación es la base de una sociedad más libre y más justa. Por su importancia, y también para informar y debatir sobre sus problemas, que afectan a profesores, padres y, naturalmente, alumnos, EL PAÍS refuerza el equipo de periodistas dedicado a la educación e inaugura el lunes una sección en su edición digital centrada en la enseñanza. El objetivo es que la comunidad educativa encuentre un lugar en el que se vean reflejados sus aspiraciones y sus problemas, y también sus logros y sus avances. Será un espacio abierto al debate y a la información, a lo que se está haciendo en España y en el mundo. En sus cuatro décadas largas de andadura, este diario siempre ha considerado la información sobre la educación uno de sus pilares y pretende ahora no solo que lo siga siendo así, sino que crezca, reflejando el espacio esencial que ocupa en el desarrollo individual y social en cualquier país democrático.
Esta sección nace, además, en un momento en el que la enseñanza se enfrenta a un reto sin precedentes en su historia, porque las clases que volverán en septiembre, todavía bajo la influencia de la covid-19, son una tierra ignota, un lugar en el que la enseñanza no ha estado nunca. El colegio y la universidad no son solo espacios en los que se aprende, sino también en los que se socializa y se comparten las que son tal vez las experiencias más importantes de la vida. Nada será igual, ni en las mochilas, ni en las rutas, ni en las aulas, pero a la vez este principio vital no se puede perder. El primer reportaje de esta sección tratará de responder precisamente a las incógnitas que plantea el nuevo panorama educativo bajo la pandemia.
La nueva sección, dirigida por periodistas especializados en el sector educativo y reforzada por corresponsales nacionales e internacionales (se prestará una atención especial a América Latina), incluirá una newsletter semanal a la que desde el lunes 1 de junio se podrán suscribir los lectores, y que empezará a enviarse a mediados de mes; el foro de Educación, a través del cual el periódico invita desde septiembre a los miembros de la comunidad educativa a ofrecer su opinión sobre un tema de debate una vez a la semana; tribunas de opinión de expertos en distintos ámbitos del mundo de la educación; y distintas secciones de participación para profesores, alumnos y familias que reflejen iniciativas interesantes que se estén llevando a cabo en los colegios, institutos y universidades españolas. Además, se hará una amplia cobertura en las redes sociales en la cuenta de Twitter @elpaiseducacion y de Facebook en El País Educación.
Una de las ideas más importantes que acuñó la Grecia clásica fue la de paideia, la formación que convertía a las personas en ciudadanos porque no solamente aprendían una serie de asignaturas como la gramática o la geometría, sino que tomaban plena conciencia de sus deberes cívicos. No se trata de un concepto muy diferente del que defiende el apartado segundo del artículo 27 de la Constitución española de 1978: “La educación tendrá por objeto el pleno desarrollo de la personalidad humana en el respeto a los principios democráticos de convivencia y a los derechos y libertades fundamentales”.
Para que este ideal tan antiguo como nuestra cultura se cumpla es necesaria la inversión pública para luchar contra los males endémicos de nuestro sistema educativo. Por ejemplo, el abandono escolar, que afecta al 17% de los jóvenes frente al 10% de la media europea. Y se trata de un mal que repercute sobre todo en las familias más vulnerables: un 34% de los alumnos de Bachillerato dejaron los estudios por motivos económicos o para buscar un empleo, un 49% en el caso de la formación profesional.
Todos estos problemas estarán cada día en la nueva sección de Educación de EL PAÍS, que pretende debatir y hacerse eco de las preocupaciones de la comunidad educativa. Este diario espera que encuentren en ella un foro siempre abierto.
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