Un detenido en Alicante por grabar a su pareja y a las hijas de esta con cámaras ocultas

Dos hombres han sido detenidos en los últimos días en la provincia de Alicante por haber colocado cámaras ocultas en cuartos de baño, según ha trascendido este jueves. El primero de ellos, arrestado el domingo, dispuso el artefacto en el lavabo y uno de los dormitorios de su propia vivienda, donde convivía con su pareja y las hijas de esta. El segundo, detenido el pasado martes, escondió el dispositivo en el portarrollos de uno de los urinarios portátlies de la empresa en que trabajaba, para grabar a sus compañeras.

Hasta 20 personas diferentes pasaron por delante de las cámaras ocultas...

Dos hombres han sido detenidos en los últimos días en la provincia de Alicante por haber colocado cámaras ocultas en cuartos de baño, según ha trascendido este jueves. El primero de ellos, arrestado el domingo, dispuso el artefacto en el lavabo y uno de los dormitorios de su propia vivienda, donde convivía con su pareja y las hijas de esta. El segundo, detenido el pasado martes, escondió el dispositivo en el portarrollos de uno de los urinarios portátlies de la empresa en que trabajaba, para grabar a sus compañeras.

Hasta 20 personas diferentes pasaron por delante de las cámaras ocultas que el primero de los detenidos colocó en el baño y en uno de los dormitorios de su vivienda, en Alicante. Las principales víctimas, sin embargo, fueron su pareja y las dos hijas de esta, que aparecen en diferentes grabaciones realizadas desde hace cuatro años, cuando las chicas todavía eran menores de edad. La Policía Nacional detuvo al hombre que, tras pasar a disposición judicial, ya ha ingresado en prisión.

El arrestado colocó cámaras deportivas y bolígrafos espía en diferentes ubicaciones del cuarto de baño y de una habitación, dispositivos con los que grabó momentos íntimos de la familia, según han declarado fuentes policiales a Europa Press. Se había registrado el paso de hasta una veintena de familiares por el servicio. Ninguna de estas imágenes ha sido difundida a través de Internet o redes sociales.

Una de las hijas de la pareja del detenido descubrió el pasado domingo una tarjeta de memoria que el presunto autor había dejado olvidada y a la vista de cualquiera. La muchacha se dispuso a visionarla y comprobó que había imágenes íntimas de la familia. Posteriormente, interpuso una denuncia contra el arrestado.

Al domicilio se desplazaron efectivos de la Brigada de Delitos Tecnológicos, que procedieron a examinar los discos duros y las tarjetas de memoria que había en la vivienda, según detallan las fuentes de la Policía Nacional. Los agentes también tomaron declaración a las víctimas. Tras hablar con la pareja del detenido, los agentes sospecharon que podría haber sido víctima de un delito de maltrato psicológico, que también se está investigando. 

Cámara en el baño de la empresa

La operación realizada en Alicante, esta vez por agentes de la Guardia Civil del municipio de Aspe, ha derivado en la detención de otro individuo que instaló una cámara en el urinario portátil de sus compañeras de trabajo. Según ha informado este jueves el Instituto Armado en un comunicado, hasta el momento constan al menos cinco víctimas y se está investigando el uso que el arrestado pudo hacer de estas imágenes. El hombre, que fue arrestado este martes, ya ha pasado a disposición judicial.

En este caso, la denuncia procedió del gerente de la empresa, una explotación agraria de la comarca del Vinalopó Medio. El denunciante indicó que una de sus empleadas había descubierto una pequeña cámara de vídeo escondida en el portarrollos de papel higiénico del aseo femenino. El análisis de la tarjeta de memoria desveló que había grabaciones de cinco mujeres diferentes.

Las pesquisas comenzaron con uno de los vídeos registrados, en el que el propio autor de los hechos se había grabado instalando la cámara con un bote de pegamento. A partir de esas imágenes, se procedió a la identificación del sospechoso, que resultó ser un empleado ucranio de 52 años que, tras descubrirse el dispositivo, dejó su puesto de trabajo y no volvió a la empresa ni para cobrar el finiquito, según han manifestado las mismas fuentes.

El pasado 28 de mayo, los agentes finalmente detuvieron al hombre, al que se le imputan cinco delitos de violación de la intimidad. Los agentes registraron su domicilio, ubicado en la ciudad de Novelda, en el que intervinieron material informático, como un ordenador portátil, una tableta, un teléfono móvil y una cámara de vídeo, así como tres tarjetas de memoria para el almacenamiento de datos. Todos estos dispositivos serán analizados para confirmar la posible existencia de otras grabaciones con más víctimas y si las imágenes han sido difundidas.