Reportaje:

Conectados a la vida

Una exposición con fotografías de Tino Soriano recoge el día a día de pacientes que viven gracias a una máquina de hemodiálisis

Alrededor de 45.000 personas padecen una enfermedad renal crónica y necesitan una máquina de hemodiálisis en España. Durante un año, el fotoperiodista Tino Soriano ha visitado distintos centros sanitarios para recoger la labor de médicos y enfermeros, y sobre todo retratar el día a día de estos pacientes. "Gracias a estas máquinas, por el hecho que continúan con vida, parece como si la sociedad no le diera la importancia al hecho de que un paciente cada 48 horas tiene que conectarse, de ahí el título Conectados a la Vida, para l...

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Alrededor de 45.000 personas padecen una enfermedad renal crónica y necesitan una máquina de hemodiálisis en España. Durante un año, el fotoperiodista Tino Soriano ha visitado distintos centros sanitarios para recoger la labor de médicos y enfermeros, y sobre todo retratar el día a día de estos pacientes. "Gracias a estas máquinas, por el hecho que continúan con vida, parece como si la sociedad no le diera la importancia al hecho de que un paciente cada 48 horas tiene que conectarse, de ahí el título Conectados a la Vida, para limpiar todas las impurezas de su sangre -con toda la esclavitud y las limitaciones que ello conlleva", asegura Tino Soriano, que publica sus trabajos en publicaciones como National Geographic o EL PAÍS SEMANAL.

"Este tipo de trabajos nos sirven para ampliar problemas de salud que permanecen en un discreto tercer plano. Nada se nos pierde en un hospital hasta que nos toca ir por narices", asegura Soriano, que ya ha documentado durante años otras historias humanas relacionadas con enfermedades como el cáncer . "Con este tipo de trabajo también se muestra la importancia de la investigación médica y el trabajo de unos profesionales que están mal pagados, sobresaturados de trabajo, y que tiran la sanidad adelante más por vocación que no por incentivos", insiste.

A lo largo de este trabajo Tino Soriano se ha encontrado con historias duras, de las que destaca "el caso de María, una niña de cuatro años que, como no le llegó un riñón a tiempo, su madre se lo tuvo que donar porque, si no, se moría. Los riñones implantados tienen fecha de caducidad y su madre guardaba el suyo como oro en paño para dárselo cuando María fuera adolescente. Por suerte las dos están ahora bien".

El objetivo último de este trabajo es dar visibilidad a una serie de enfermedades (y sobre todo sus pacientes) que dependen de las máquinas de hemodiálisis. "Tanto el escritor Jordi Rovira [autor de los textos] como yo hemos detectado ignorancia de los propios pacientes al principio de su enfermedad, puesto que hay poca bibliografía no especializada". Así, Soriano ha puesto en su página web , el libro para que se pueda consultar de manera gratuita.

Conectados a la vida , hasta el 9 de mayo de 2010 en el Hospital Clínic de Barcelona.

Dolores Mezquida durante la visita médica en el Hospital 12 de Octubre, Madrid.TINO SORIANO

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