Rita Payés: “Tener un hijo es un buen filtro para ver qué gente se queda a tu lado”
La joven trombonista Rita Payés concilia su reciente maternidad con el lanzamiento de su tercer disco, ‘De camino al camino’
Se disculpa “muchísimo” por el retraso: “Estaba entretenida con mi hija y se me ha ido el santo al cielo”. Rita Payés (Vilassar de Mar, Barcelona, 24 años) tiene motivos para la distracción. Tras ser madre por segunda vez hace apenas cuatro meses, la compositora y trombonista que conquistó al público en la gala de los Goya 2022 junto a C. Tangana y que cuelga el cartel de “No hay billetes” en buena parte de Europa y Latinoamérica, regresa con un nuevo álbum. En De camino al camino, el tercero de su fulgurante carrera, la cantante de jazz, natural del Maresme, sigue en la búsqueda inagotable de su propio sonido y de la belleza de lo cotidiano: “Es una búsqueda eterna porque siempre llegas al mismo comienzo. El aprendizaje de la música no tiene fin y el de la vida, ahí está la metáfora, tampoco”.
¿Cómo consigue una trombonista tener más de 100.000 seguidores en Instagram?
¡Yo qué sé! Supongo que lo de C. Tangana le dio un empuje, aunque siempre he ido a paso de hormiga. Llevo toda la vida desviviéndome por la música, pero me siento privilegiada porque hay gente que hace cosas increíbles y no puede vivir de ella. Qué suerte que me ha tocado a mí.
Tener dos niñas con 24 la convierte casi en figura contracultural. ¿Se sintió distanciada socialmente al ser madre?
Mi vida ha cambiado radicalmente. En mi opinión, cuando tienes un niño tienes que estar dispuesta a revolcarte en ello y a vivir esa transformación vital. En cuanto a las amigas, es un buen filtro para ver qué gente se queda a tu lado y a quién quieres tú dedicarle la poca energía que tienes.
Imagino que sus nanas funcionan a la perfección…
Sí (ríe). De hecho, en el disco he incluido una nana, pero está dedicada a las madres. Me inspiré en todo ese tiempo que dedicamos a tratar de que los hijos duerman y en cómo a veces lo que quieres es que te canten las nanas a ti. Va dedicada a todas las madres que se lo curran y que merecen ser ellas mismas las acunadas.
Confiese algo: ¿cuándo fue la última vez que salió de fiesta?
Nunca me ha gustado salir de fiesta, creo que solo lo he hecho dos veces en mi vida. Me da pereza estar ahí en un polígono sin ningún encanto, escuchando canciones que no me gustan y teniendo que beber para pasarlo bien. Prefiero ir de jam session y quedarme toda la noche tocando.
Siempre se debate sobre el necesario rejuvenecimiento del público del jazz. ¿Tiene esperanza en el futuro?
Me he llevado una sorpresa estos últimos años. Siempre habían venido a verme tocar viejitos, y me encanta, pero últimamente veo a mucha gente joven entre el público.