“Tengo la casa llena de pelos y es horroroso”: los trucos que sí frenan la caída capilar en mujeres
Los expertos destacan que ningún champú detiene la pérdida del cabello, mientras que no hay evidencia científica de que los remedios naturales basados en ronquina, aceite de romero o extractos de cebolla sirvan para controlar la alopecia
A María Martín se le cae mucho el pelo. Tanto que la aspiradora se atasca con ellos y tiene que cortarlos para que vuelva a funcionar: “Tengo la casa llena de pelos y es horroroso. Aspiras y hay pelos, limpias el baño y hay pelos… Aparecen por todos los rincones”. La caída excesiva del cabello es un fenómeno común y alarmante para muchas mujeres. Basta con hacer una búsqueda en TikTok para encontrar múltiples testimonios de chicas preocupadas por el mismo motivo. EL PAÍS ha contactado con varios dermatólogos especializados en tricología para saber qué se considera una caída de cabello normal, qué trucos o tratamientos son aconsejables y cuáles deben evitarse.
María tiene 30 años y ha probado todo tipo de remedios, pero ninguno ha funcionado. “Es algo que me preocupa. No noto que haya perdido densidad, pero me da miedo quedarme con muy poco pelo. Tengo el cabello fino, y, estéticamente, no me gustaría que se me cayese de más”, reconoce. Ella acudió tanto al médico de cabecera como a una nutricionista, que le dijo que en su caso la caída de pelo podría estar relacionada con problemas intestinales.
Es normal perder entre 100 y 150 pelos al día. Así lo explican desde la Clínica AB Derma y señalan que es parte del ciclo natural del cabello: los pelos deben desprenderse para permitir el crecimiento de otros nuevos y esa caída normal “no llama la atención. No debería provocar áreas con menor densidad ni zonas donde lleguemos a ver el cuero cabelludo”. Si la caída de pelo es muy abundante, dura mucho tiempo o está acompañada de picor o dolor en el cuero cabelludo, los expertos consultados recomiendan consultar a un especialista. Diego Buendía, dermatólogo de la Unidad de Tricología y Trasplante Capilar del Grupo Pedro Jaén, destaca otros signos de alarma, como ver que la raya del pelo se ensancha o que clarean áreas del cuero cabelludo.
Los expertos consultados coinciden en que la causa más frecuente de pérdida de pelo en mujeres es el efluvio telógeno, una caída temporal causada por la sincronización de muchos cabellos que entran al mismo tiempo en la fase de renovación. “No es una alopecia como tal, sino una caída que puede ser muy abundante y llamativa, pero transitoria”, explica Buendía. El efluvio telógeno puede ocurrir por los cambios de estación, el parto, el estrés agudo o enfermedades infecciosas como la COVID-19, según el experto. En la mayoría de los casos, se resuelve por sí sola. Algo que, como señala Óscar Muñoz, especialista en tricología de la Clínica capilDERM, “puede hacer creer erróneamente a una paciente que la infusión de té y menta que le ha recomendado su vecina ha sido la causa de su curación”.
Otra causa común de la caída de cabello —tanto en mujeres como en hombres— es la alopecia androgénica, también conocida como calvicie común. Buendía señala que en este caso se produce una pérdida gradual de grosor y densidad del cabello. “A diferencia del efluvio telógeno, esta caída es crónica y requiere tratamiento para detener su avance y preservar el cabello”, sostiene.
Remedios naturales sin eficacia
En TikTok, muchas usuarias recomiendan productos para frenar la caída de pelo: de champús a suplementos, vitaminas, sérums y remedios caseros como la cebolla o el aceite de romero. A Paula Calvo, de 30 años, se le cae el pelo especialmente al peinarse y secárselo, pero también a lo largo del día. “Hoy llevo un jersey de lana y lo tengo lleno de pelos”, afirma. Esta joven ha probado muchos de estos productos, como pastillas para la caída, champús e incluso supuestos remedios naturales. “Una vez llegué a meter una cebolla dentro de un champú”, cuenta entre risas. No funcionó: “Ningún producto o truco que he probado ha sido milagroso”.
Mientras que algunos remedios como la cebolla no han demostrado eficacia, hay suplementos que pueden potenciar el funcionamiento adecuado del cabello, cuentan desde la Clínica AB Derma. “Los remedios promocionados como ‘milagro’ son con frecuencia ineficaces”, explica Kevin Díez Madueño, dermatólogo de la Clínica Eguren y del Hospital Universitario Infanta Leonor. El experto aconseja sospechar de los tratamientos o soluciones que se promocionan como “superefectivos, naturales y absolutamente ausentes de efectos secundarios”.
Un tratamiento adecuado parte de un diagnóstico acertado. “Los únicos productos tópicos que han demostrado eficacia significativa en el control de la alopecia son aquellos de prescripción farmacológica”, destaca Díez, que además es miembro de la Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV). Ante un caso de caída por efluvio telógeno, los remedios promocionados en redes como TikTok suelen ser innecesarios, según Buendía. Debido a las causas y los desencadenantes multifactoriales del efluvio telógeno, a menudo es difícil diagnosticarlo y tratarlo, según una revisión publicada en la revista Journal of Dermatological Science.
Buendía explica que los suplementos vitamínicos no tienen sentido si no existe un déficit concreto que pueda perpetuar la caída del cabello: “Consumirlos sin la recomendación de un especialista generalmente no es nocivo, pero puedes estar tirando el dinero”. Díez destaca además que “ningún champú va a protegernos de la alopecia o de la caída del cabello desde un punto de vista científico”.
Que no haya ningún champú capaz de frenar la caída del cabello se debe, según Buendía, a que este producto “únicamente actúa en la superficie del cuero cabelludo y no penetra en el folículo piloso (la raíz del pelo), que es donde se origina la caída. El tiempo de contacto entre un champú y el cuero cabelludo suele ser breve, por lo que no es el mejor candidato para tratar la mayoría de causas de caída”, según el dermatólogo, que destaca que el objetivo de un champú es limpiar el pelo y el cuero cabelludo y su efecto es meramente cosmético. Como destaca Buendía, tampoco hay evidencia científica de que la ronquina o el aceite de romero frenen la caída del cabello por efluvio telógeno.
Trucos para tener un pelo sano
Para mantener un cabello sano y fuerte, Muñoz recomienda lavarlo frecuentemente con champú, seguir una dieta mediterránea, evitar el tabaco y reducir el uso excesivo del peine —o utilizar peines diseñados para minimizar el roce con el cabello—. “Son consejos simples, pero que casi ninguna mujer de pelo largo sigue en su totalidad”, explica. Además, peinarse el pelo antes de ducharse o humedecerlo puede prevenir posibles daños en la fibra capilar, según indica Díez, que destaca además que el acondicionador puede servir para reducir la fricción al facilitar el desenredado del cabello.
Por el contrario, el dermatólogo desaconseja los tratamientos físico-químicos agresivos, frecuentes o prolongados, ya que pueden dañar el cabello y hacerlo más quebradizo. Se refiere a algunos alisados, rizados, tintes o secados excesivos, especialmente si no son realizados por profesionales. Además, sugiere no hacerse con frecuencia peinados que generen mucha tensión en el cabello. Los peinados tirantes o apretados tipo clean-look durante periodos de tiempo prolongados pueden conducir a una alopecia traccional “difícilmente reversible”. “Son más recomendables los recogidos no apretados y los coleteros con textiles suaves”, afirma.
Tener una buena salud capilar pasa también por desterrar algunos mitos extendidos. Por ejemplo, el de que es malo lavarse el pelo todos los días. “Para tener buen pelo es importante tener un cuero cabelludo sano y el primer paso y más fácil es mantener una correcta higiene”, explican desde la Clínica AB Derma. Además, según Buendía, no es cierto que un champú pueda acelerar el crecimiento del cabello: “El pelo tiene un ciclo de crecimiento y renovación que no se ve alterado por un champú”.
El dermatólogo también aclara que los cascos, pañuelos, sombreros y gorras no causan alopecia —aunque pueden hacer que el cabello se ensucie más rápido o se caiga por la manipulación—. Otro mito es que los tintes, planchas o tenacillas provocan la caída del cabello. Según el experto, si bien estos productos pueden “pueden empeorar el aspecto del pelo y dañarlo haciendo que se rompa, no causan alopecia”.