El Senado francés da su apoyo a España tras el manifiesto de 41 de sus miembros

Josep Borrell asegura que los firmantes de la misiva están "pésimamente informados"

El presidente de la Generalitat, Quim Torra, saluda a los acusados del 'procés', en el Tribunal Supremo.Emilio naranjo (EFE)

El presidente del Senado francés, Gérard Larcher, ha transmitido este martes su apoyo a las autoridades españolas tras el manifiesto en el que 41 senadores galos denunciaron la supuesta "represión" contra los líderes independentistas catalanes. En un comunicado difundido por el propia Cámara Alta, Larcher ha precisado que "desea reafirmar su plena confianza y su apoyo a las autoridades españolas". El ministro de Exteriores español, Josep Borrell, ...

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El presidente del Senado francés, Gérard Larcher, ha transmitido este martes su apoyo a las autoridades españolas tras el manifiesto en el que 41 senadores galos denunciaron la supuesta "represión" contra los líderes independentistas catalanes. En un comunicado difundido por el propia Cámara Alta, Larcher ha precisado que "desea reafirmar su plena confianza y su apoyo a las autoridades españolas". El ministro de Exteriores español, Josep Borrell, ha descartado cualquier conflicto diplomático afirmando que los senadores expresaron "opiniones particulares", aunque están "pésimamente informados de lo que ocurre en España". 

"Gran país europeo, España es una democracia viva, respetuosa del Estado de derecho y de las libertades individuales, así como de los derechos fundamentales de las personas". Así arranca el comunicado oficial del presidente del Senado francés. En él, Larcher subraya también el respaldo francés "a la unidad y a la integridad de España y al respeto de su marco constitucional".

El texto de esos 41 senadores de diferentes partidos del arco parlamentario fue publicado el domingo en el blog en el diario digital Médiapart del senador André Gattolin, miembro de La República en Marcha (LREM), el partido del presidente francés, Emmanuel Macron. Su declaración reclamaba "respeto a las libertades y los derechos fundamentales en Cataluña" y pidió que "Francia y los países de la Unión Europea intervengan para restablecer las condiciones del diálogo para encontrar soluciones políticas a un problema político". El manifiesto fue contestado inmediatamente por el Gobierno francés, que reiteró su confianza en la democracia española y en su Estado de derecho, al tiempo que llamó a no inmiscuirse en la situación sobre Cataluña.

El grupo de LREM en el Senado también se desmarcó de los legisladores firmantes con otro comunicado en el que dijo "no dudar de la capacidad de la democracia española para mantener un diálogo político apaciguado y plenamente respetuoso del Estado de derecho". "Nuestros dos países comparten una larga relación de amistad y de respeto recíproco y una visión común en la gestión de los desafíos europeos. (...) Dada la amplitud de esos retos, somos plenamente conscientes del espíritu de unidad y de solidaridad que debe guiar nuestra acción", concluyeron.

Borrell critica la misiva

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El ministro de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación, Josep Borrell, ha recalcado que los 41 senadores franceses que firmaron un texto de apoyo a los líderes independentistas estaban expresando "opiniones particulares" y que, además, están "pésimamente informados de lo que ocurre en España".

En declaraciones desde Buenos Aires, donde acompaña a los Reyes en su visita de Estado a Argentina, Borrell ha recalcado que tanto el Gobierno francés como el Senado han dejado claro que no comparten la posición de esos senadores.

Borrell ha dado por cerrado un "incidente" que, ha dicho, no ha sido "con Fracia, sino con un grupo de senadores que actúan a título individual" y a los que, además, se procurará "dar toda la información para que se den cuenta de cuán equivocada es su percepción".

Eso sí, ha afirmado que el Gobierno hará lo posible para "seguir defendiendo la democracia española y el sistema judicial español", que en su opinión está siendo "injustamente atacado de manera continua y permanente" por el independentismo catalán, que invierte en ello "muchos recursos, mucho tiempo y mucha energía".

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