La responsabilidad del cambio climático

Los lectores escriben sobre tomarse en serio la emergencia climática, el discurso de Mahmud Abbas ante la Asamblea General de la ONU, la inmigración y el cambio en la Selectividad

La mayor planta de carbón de Europa, en Bełchatów (Polonia), en noviembre.KACPER PEMPEL (REUTERS)

Hemos asumido que la responsabilidad del cambio climático es proporcional a todos los individuos. Se nos olvida que el cambio climático y la desigualdad son asuntos estrechamente relacionados. Es necesario exigir un reparto de compromisos. No tiene sentido que a un ciudadano de a pie se le exija pagar el pato de las grandes industrias, de los viajes en avión privado o de su propio transporte sin realizar las necesarias inversiones en transporte limpio (trenes, metros, ayudas para pasar a coches híbridos o eléctricos...). Ante esta injusta situación es lógico que haya personas que piensen que las políticas verdes pueden socavar aún más su nivel de vida. Entonces afloran los negacionistas, los conspiranoicos y los desapegados de la política. Para dar el paso a la transición verde y justa se necesitan ayudas y un reparto justo de la implementación de las políticas de reducción de emisiones de carbono. Tomémonos en serio este reto.

Sergio Fernández Uceda. San Roque (Cádiz)

Clamor en el desierto

Un desolado Mahmud Abbas, presidente de la Autoridad Nacional Palestina, clamaba en el desierto en la Asamblea General de la ONU: “Parad esta guerra, parad este crimen. Parad la matanza de niños y mujeres”, a la que tildó de genocidio, ante la pasividad del mundo frente a la barbarie Israelí en Gaza y Cisjordania. Corresponsabilizó a EE UU, a quien denominó “la democracia más grande del mundo”, por su apoyo incondicional y armamentístico a Israel, y le recriminó su reiterado veto en el Consejo de Seguridad al reconocimiento del Estado palestino. ¿Es lícito que “la democracia más grande del mundo” tolere la matanza de más de 41.000 gazatíes, en su mayoría niños y mujeres?

Francisco José Eguibar Padrón. Madrid

Europa enfrenta una paradoja

La migración, especialmente la irregular, alimenta el descontento y aumenta la presión para adoptar medidas más estrictas en política migratoria. Pero con mercados laborales ajustados y ciudadanías envejecidas, Europa necesita mano de obra migrante. La población en edad laboral de la UE ha caído en la última década y para 2050 habrá solo dos trabajadores por cada tres mayores de 65 años. Los líderes políticos deberían ser más honestos con los electores sobre la necesidad económica de estos flujos y proporcionar la infraestructura para apoyarlos.

Tomás Espuny Carreño. Barcelona

Incertidumbre

Soy alumna de segundo de Bachillerato y me preocupa el próximo cambio sobre la Selectividad. Con la nueva prueba, será importante conocer todo el contenido, ya que las posibilidades se verán reducidas. Más presión a una etapa que ya es estresante. Entiendo la importancia de mantener altos estándares académicos, pero hacerlo puede favorecer a aquellos que tienen los recursos para obtener apoyo extra, dejando de lado a los que no lo pueden pagar. Además, la educación debería enfocarse en más que solo memorizar para un examen. ¿Deberíamos recompensar más el pensamiento crítico y las habilidades en lugar de solo la memorización de datos?

Gisela Fernández Martínez. Gavá (Barcelona)

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