Las fosas y las cunetas

Los lectores escriben sobre la Ley de Memoria Democrática, la teleasistencia sanitaria, el consumismo de la Navidad y la actitud de Isabel Díaz Ayuso

Imágenes de desaparecidos y asesinados en la exhumación de la fosa común de Pico Reja, ubicada en el cementerio de San Fernando (Sevilla).María José López - Europa Press (Europa Press)

Hace ya algunos años, un jovencísimo vicesecretario de Comunicación del partido que en aquel momento gobernaba España dio unas más que desafortunadas declaraciones a cuenta de los desaparecidos y fusilados de la Guerra Civil y posterior represión franquista, a los que llamó “despectivamente” la guerra del abuelo y las fosas de no sé quién. No fue la primera burla ni la única. Esas quizás olvidadas fosas son donde ignominiosamente “reposan”, por decirlo de alguna manera, aquellos fusilados del...

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Hace ya algunos años, un jovencísimo vicesecretario de Comunicación del partido que en aquel momento gobernaba España dio unas más que desafortunadas declaraciones a cuenta de los desaparecidos y fusilados de la Guerra Civil y posterior represión franquista, a los que llamó “despectivamente” la guerra del abuelo y las fosas de no sé quién. No fue la primera burla ni la única. Esas quizás olvidadas fosas son donde ignominiosamente “reposan”, por decirlo de alguna manera, aquellos fusilados del “abuelo” y aquellos carcas de izquierda porque un régimen totalitario y represivo así lo decidió. La Ley de Memoria Democrática viene en parte a tratar de corregir y reparar, con justicia y dignidad, a los hijos, nietos o herederos de todos aquellos represaliados y darles un descanso digno. Seguro que ya, lector o lectora, has adivinado, quiénes son los que frivolizan con el dolor y la memoria de desaparecidos y represaliados y sus familias. No se puede obviar por más tiempo la deuda que tenemos con ese pasado porque está ahí incluso para los que reniegan de aquellas fosas y aquellas cunetas.

Olga Santisteban Otegui. Bizkaia

Teleasistencia sanitaria

Bienvenido a la sanidad, su llamada será grabada. Si desea conocer las condiciones de protección de datos marque… Por favor, brevemente, diga los motivos de su llamada… Si su emergencia es por fuertes dolores, hemorragia, rotura de ligamentos o hueso, si piensa que sufre un ictus o ataque cardiaco, marque uno. Si su llamada es por dolores débiles, problemas de salud mental, infecciones, taquicardias menores, marque dos. Si es por virus estomacales, pequeños cortes y laceraciones, ligeras dolencias estomacales, marque tres. Para cualquier otra consulta, espere. Todos nuestros operadores están ocupados, el tiempo medio de espera es de dos minutos (el real de cinco a siete).

Julián Campo Llopis. Madrid

Consumismo obligado

Se acerca la época más esperada para aquellos amantes de las comidas familiares y los villancicos. La Navidad es sinónimo de amor e ilusión, sin embargo, esta festividad religiosa se está convirtiendo en un ejemplo de la sociedad tan consumista en la que vivimos. Las campañas de Navidad empiezan cada vez más temprano, y la constante publicidad nos incita a gastar dinero en cosas innecesarias. Decoraciones navideñas, compra de lotería, grandes gastos en comidas familiares… Por no hablar de los regalos, una obligación en toda regla. Me pregunto dónde ha quedado el verdadero espíritu de la Navidad, posiblemente en aquello que no tiene precio.

Elena Guasch Olivé. Gava (Barcelona)

Destruir la democracia

Más que en el cumplimiento de ciertos requisitos formales, una democracia se basa en el reconocimiento del otro como interlocutor legítimo. Por eso, la forma más eficaz de destruirla es envenenar el clima social construyendo una imagen deformada del adversario político que lo presente como un ser perverso que, por razones misteriosas, solo intenta sembrar el mal y provocar el caos. Eso precisamente es lo que hace cierta presidenta autonómica cuando acusa infundadamente al presidente del Gobierno de querer encarcelar a la oposición y destruir la democracia. El mal que dice combatir es el que provoca.

Emilio Gómez-Caminero. Sevilla

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