Mi querido doctor Sharpe
La situación para las mujeres es hoy peor que hace 66 años, cuando el médico practicó un aborto a Gloria Steinem
La escritora Laura Ferrero tuiteaba estos días la dedicatoria de la escritora y activista Gloria Steinem al doctor Sharpe, el médico que le practicó un aborto cuando ella tenía 22 años, en su libro Mi vida en la carretera (Alpha Decay). A sus 82 años, Steinem (Premio Princesa de Asturias en 2021) publicó este libro de memorias y recordó las condiciones que aquel médico le puso antes de practicarle un aborto que entonces era ilegal. Él dijo: “Tienes que prometerme dos cosas. Primero, ...
La escritora Laura Ferrero tuiteaba estos días la dedicatoria de la escritora y activista Gloria Steinem al doctor Sharpe, el médico que le practicó un aborto cuando ella tenía 22 años, en su libro Mi vida en la carretera (Alpha Decay). A sus 82 años, Steinem (Premio Princesa de Asturias en 2021) publicó este libro de memorias y recordó las condiciones que aquel médico le puso antes de practicarle un aborto que entonces era ilegal. Él dijo: “Tienes que prometerme dos cosas. Primero, que no le darás mi nombre a nadie. Segundo, que harás con tu vida lo que te parezca”. Sesenta años después de aquel aborto, ella escribía esto para él: “Mi querido doctor Sharpe, confío en que a usted, consciente como era de la injusticia de las leyes, no le molestará que diga esto tanto tiempo después de su muerte: lo he hecho lo mejor que he podido. Este libro es para usted”.
Hoy, Gloria Steinem tiene 88 años y el aborto vuelve a ser ilegal en su país después de que el Tribunal Supremo haya derogado este derecho. Podría parecer que hemos retrocedido 50 años, pero lo cierto es que estamos peor que entonces. Hoy, la huella digital de nuestras acciones es visible y profunda. Por eso, de las dos condiciones que puso el doctor Sharpe, más de 36 millones de estadounidenses no podrían cumplir ninguna: ni hacer lo que quieran con su vida ni mantener la absoluta privacidad de sus acciones. Y en este punto hemos empeorado debido a que es muy complicado informarse o pedir píldoras abortivas por Internet en algún Estado donde el aborto sea ilegal sin dejar rastro.
Este es el motivo por el que la activista Alexandria Ocasio-Cortez, miembro de la Cámara de Representantes de Estados Unidos por el distrito 14 de Nueva York, tuitea para sus más de 13 millones de seguidores información sobre la Abortion OPSEC, una suerte de guía para que puedas buscar información crítica sin que puedan llegar a incriminarte por abortar en EE UU. OPSEC son las siglas de Open Platform for Secure Enterprise Connectivity, una plataforma dedicada a garantizar la seguridad de nuestras acciones en la Red.
En el caso del aborto, las recomendaciones de ciberseguridad para las mujeres son las siguientes. La primera es separar las acciones sensibles del resto de la actividad digital y crear cuentas de correo ad hoc, además de usar un número de teléfono distinto al habitual antes de buscar información crítica. Si, por ejemplo alguien va a comprar por Internet píldoras abortivas legales en otro Estado debe cubrirse las espaldas digitales. En segundo lugar, es importante bloquear la geolocalización del teléfono si nos acercamos a algún lugar sensible (como una clínica abortiva). También es clave desactivar la opción de rastreo del teléfono desde la sección de ajustes/privacidad, pues de otro modo podríamos compartir información indeseada sobre las actividades que realizamos, incluidos ciertos pagos. La cuarta recomendación advierte sobre el peligro de compartir fotos con nuestros contactos, por cuanto a menudo incluyen información añadida, como la geolocalización. El manual de ayuda circula por la red a través de voces de mujeres que tratan de preservar el derecho a la intimidad de otras. La resistencia se organiza ante el control sobre la intimidad y el cuerpo de las mujeres a través del uso de tecnología y big data. Así las cosas, la privacidad que pedía Sharpe antes de practicar un aborto ilegal hace 66 años, hoy parece un cuento de hadas.