López Obrador cuestiona a la Suprema Corte por anular el ‘plan B’ electoral: “¿Con qué autoridad moral?”

El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha arremetido este viernes contra la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) después de que el máximo tribunal del país tumbara la última parte del plan B electoral aprobado por la Cámara de Diputados y el Senado. “¿Con qué autoridad moral cuestionan el procedimiento del Poder Legislativo? Yo no tengo por qué opinar sobre lo que debería hacer el Poder Legislativo”, ha dicho López Obrador durante la conferencia de prensa diaria desde Chiapas. La Corte anuló este jueves el segundo paquete de leyes secundarias que el Congreso pasó en febrero pasado, en el que se buscaba recortar los recursos y las facultades del Instituto Nacional Electoral (INE), el árbitro que organiza los comicios en México. “Están en una actitud de intromisión en las facultades del Poder Legislativo, lo que hicieron ayer fue corregirle la plana a otro poder”, ha reclamado. El mandatario ha aprovechado la ocasión para insistir en su idea de reformar la Constitución para que los magistrados sean elegidos a través del voto popular.

La SCJN había anulado el primer paquete de medidas electorales aprobado bajo el nombre de ‘plan B’ a principios de mayo. Esa decisión ya había desatado el enojo del presidente, que entonces acusó al Poder Judicial de estar “podrido”. Este jueves, el máximo tribunal de justicia tumbó con mayoría de votos el segundo grupo de reformas secundarias. La reforma electoral había sido pensada primero como una profunda modificación constitucional. Pero luego del fracaso en las negociaciones para conseguir votos suficientes —dos terceras partes— para cambiar la letra de la Constitución, fue presentada como dos grupos de reformas que apuntaban a reducir la estructura y el presupuesto del INE, entre otras medidas. Ambas legislaciones fueron aprobadas en sesiones en las que no se discutió ni una palabra de lo que decían los proyectos. Las mayorías simples en ambas Cámaras le permitieron a Morena, el partido gobernante, sacarlas adelante sin mayor dificultad.

La oposición y el INE, entonces, llevaron el asunto a la Corte, promoviendo acciones de inconstitucionalidad. La decisión del pleno de la SCJN en ninguno de los dos casos trató el asunto de fondo. Fue la forma en la que se aprobaron las medidas lo que debatió el tribunal. El Supremo decidió anular el ‘plan B’ debido a que las violaciones al procedimiento legislativo durante la sanción del proyecto fueron suficientemente graves como para invalidar esas modificaciones.

“Nosotros somos respetuosos de la división y el equilibrio entre poderes, algo que ellos no están cumpliendo”, ha reclamado López Obrador. “Es como si el Poder Legislativo decidiera enjuiciar a jueces, a magistrados, a ministros corruptos. Tendría que aclararse si hay facultades para eso, porque es el que un Poder intervenga en los procesos internos de otro”. El mandatario se ha mostrado visiblemente enfadado con la decisión de la Corte, con quien lleva una guerra desde hace meses. En el camino les ha acusado de estar completamente corrompidos, les ha dicho que violan la ley al ganar salarios más alto que el presidente, y hasta ha expuesto una lista de “excesos” que tienen supuestamente los ministros. Este viernes les ha vuelto a llamar el “supremo poder conservador”.

“Interpreto esto más que nada como una actitud política de protección, de defensa, de los intereses de una minoría rapaz y corrupta, la que dominaba en México, que se sentían los dueños de México”, ha agregado López Obrador. “Están menospreciando al pueblo. Piensan que pueden hacer sus fechorías y que el pueblo no se da por enterado”. Tal y como lo hizo cuando la Corte anuló el primer paquete de reformas electorales, el mandatario ha aprovechado la situación para insistir en la necesidad de una reforma judicial. Desde hace semanas, el partido gobernante presiona para organizar el próximo año una consulta popular para preguntarle a la gente si los ministros del Supremo deberían ser elegidos por el voto popular, como los cargos políticos.

López Obrador, consciente de que la Suprema Corte anularía también este segundo paquete de medidas, ha avisado de que espera a las elecciones de 2024 para conseguir una mayoría amplia que le permita modificar la Constitución y emprender esas reformas ahora frenadas.

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