La caída de Giovani dos Santos

México confió todas sus fichas en una generación excepcional de futbolistas. Un grupo de adolescentes mexicanos se consagró en el Mundial de menores de 17 años en 2005. Era lo nunca antes visto para un país que no había dado el estirón en el fútbol. Entre los jugadores estaba Giovani Dos Santos (Ciudad de México, 32 años), uno de los jóvenes promesa que formaba el Barcelona. Su talento intermitente y las lesiones le han marginado al grado de que le han cortado del América, donde permaneció más tiempo en la enfermería que en la cancha.

Giovani Dos Santos había ilusionado a Frank Rijkaard, el entonces entrenador del Barcelona en 2007. El jugador se había ganado una buena reputación en el equipo filial y el hecho de haber ganado el Mundial juvenil le daba puntos para debutar en Primera División. Lo hizo cobijado por Ronaldinho, Thierry Henry, Deco y su compatriota, Rafael Márquez. Gio quería más minutos, se impacientaba con los pocos que recibía y su entorno forzó su salida. El Tottenham, en pleno proceso de reconstrucción, le fichó en 2008. La fotografía, que aún circula por redes sociales, le mostraba junto a otro joven reclutado: Luka Modric, quien terminaría en el Real Madrid y con un Balón de Oro en 2018.

Una sucesión de indisciplinas llevaron a Dos Santos a ser castigado por el Tottenham. La vida nocturna de Londres devoró al mexicano que terminó relegado al Ipswich de una división inferior. Su desempeño no terminó por convencer al Tottenham que le cedió al Galatasaray, al Racing de Santander y al Mallorca. Fue en el fútbol español donde pudo mostrar sus dotes de media punta y de amante del regate. El Villarreal le dio un voto de confianza en 2013 y le firmó por cuatro años. La estabilidad había llegado para un Gio que, en su paso, jugó en la Europa League y clavó un gol de tiro libre al Real Madrid en el Bernabéu. Jugó con su hermano, Jonathan, en el submarino amarillo. Era el gran momento para el 10 mexicano.

En 2015, una millonaria oferta del LA Galaxy de Estados Unidos sedujo al mexicano, quien ganaba más de seis millones de dólares anuales. El desempeño de Giovani dos Santos se fue a picada. Fue contratado para que el club ganara la Liga, pero todo se quedó en una intención. El mejor año de Gio fue en 2016 cuando anotó 15 goles. Las lesiones marginaron el desempeño del mexicano por más de 70 días, de acuerdo con cifras de Transfermarkt. El club lo relegó a horas del inicio de la temporada en 2019 para que liberara el lugar de jugador franquicia.

Dos Santos recaló en el América como futbolista libre y fue presentado como el gran fichaje. Su padre, Zizinho, jugó en el conjunto americanista y era el equipo favorito de la familia. Parecía ser la oportunidad para la redención del futbolista, pero poco ocurrió. En su primera temporada fue suplente y el equipo perdió la final de la Liga MX frente al Monterrey en casa. Cuando empezaba a ganar vuelo, sufrió un duro corte en la pierna en un choque con el futbolista Antonio Briseño. En el último torneo jugado, al mando de Santiago Solari, jugó en siete de 17 partidos y en ninguno pudo terminar los 90 minutos. En sus dos años en el América solo coleccionó cuatro goles.

El mejor Giovani Dos Santos, sin embargo, ha sido con la selección mexicana. Con el Tri ha ganado una medalla olímpica, el mayor mérito de su país en torneos internacionales y dio un gran Mundial en Brasil 2014 en el que llevó al límite a Holanda en los octavos de final. Su rendimiento le ha alejado del equipo nacional y le ha dejado ahora estancado en la ciénega al quedarse sin equipo.

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