Un juez dicta prisión preventiva para el ‘rey del acero’ Alonso Ancira

El dueño de Altos Hornos de México (AHMSA), Alonso Ancira, pasará formalmente su primera noche en una prisión mexicana. Un juez federal ha dictado este jueves prisión preventiva contra el llamado ‘rey del acero’ como lo había solicitado la Fiscalía General, que advirtió de que el imputado tiene la capacidad económica suficiente para huir del país. Así, el presidente de una de las empresas siderúrgicas más importantes de México, con más de 18.000 empleados, permanecerá arrestado en el Reclusorio Norte hasta que se decide si es vinculado o no a proceso por lavado de dinero. El magistrado ha fijado la audiencia en la que se resolverá su situación jurídica para la próxima semana.

La defensa del aún presidente de AHMSA intentó en vano librar a su cliente de la cárcel. En el último minuto de la audiencia inicial celebrada este jueves, sus abogados ofrecieron una garantía de dos millones de dólares para que el magnate acerero recuperara su libertad. Además, aseguraron al juez de control del Reclusorio Norte que Ancira utilizaría un brazalete electrónico y entregaría su pasaporte para garantizar que no saldría del país. Ninguno de estas promesas persuadieron al juez para concederle la prisión domiciliaria.

La prisión preventiva contra Ancira se dictó tras una maratónica sesión que comenzó la noche del miércoles, luego de que fuese extraditado desde España. La audiencia tuvo que ser aplazada unas horas porque el acusado, de 69 años, sufrió un cuadro de hipertensión arterial y descompensación metabólica por falta de descanso y alimentación. La diligencia judicial reinició este jueves poco después de las 14.00 (hora local) y culminó siete horas más tarde. Debido a las medidas por la pandemia, Ancira no estuvo físicamente ante el juez, su comunicación fue a través de una videoconferencia en dos salas judiciales.

El llamado “rey del acero mexicano” fue arrestado en Palma de Mallorca en mayo de 2019 y en noviembre del año pasado la justicia española confirmó su extradición al considerar que los hechos perseguidos por México no han prescrito y son también delitos en España. Las acusaciones contra el empresario del sector siderúrgico apuntan a la adquisición de Pemex de la planta de Agro Nitrogenados, propiedad de AHMSA en 2014. El complejo industrial llevaba inactivo más de 14 años y fue comprada a sobreprecio por 275 millones de dólares cuando su valor había sido tasado en 58 millones. La Fiscalía General investiga cuatro transferencias por 3,4 millones de dólares hechas entre junio y noviembre de 2012 desde la empresa de Ancira a Tochos Holding, una sociedad en un paraíso offshore donde el entonces director de la petrolera, Emilio Lozoya, recibió sobornos para comprar una casa a cambio de favores.

En la antesala de un proceso judicial, el caso de Ancira sigue la narrativa del Gobierno de López Obrador contra varios políticos y empresarios vinculados con la cúpula de la Administración de Enrique Peña Nieto. El empresario es acusado de estar relacionado a una presunta trama de corrupción conectada con el caso Odebrecht. La Fiscalía y la Unidad de Inteligencia Financiera de Hacienda (UIF) siguen la estela de corrupción que dejaron los sobornos pagados por Odebrecht en el país y en el que supuestamente participó activamente el empresario junto con el ahora también procesado Lozoya.

El nombre de Alonso Ancira aún figura en el organigrama de AHMSA como presidente de su consejo de administración. La compañía presume en su perfil en la Bolsa Mexicana de Valores de una capacidad instalada de más de 5,5 millones de toneladas de acero líquido por año y una participación del 13% en el mercado nacional. Por el contrario, Ancira vive sus horas más bajas, en prisión y a la espera de que un juez prolongue su reclusión o lo deje en libertad.