El exministro Xavier Bertrand pide cohesionar la sociedad francesa: “Los extremos fracturan”
El actual presidente de Alta Francia sostiene que sus soluciones regionales sirven para dirigir Francia y confirma que quiere concurrir a las elecciones de 2027
“¿Los políticos queremos unir o fracturar? Los extremos fracturan". Así de tajante ha sido este lunes el presidente de la región francesa de Alta Francia, Xavier Bertrand, en su intervención en el foro World In Progress que organiza en Barcelona el Grupo PRISA, editor de EL PAÍS. El veterano político galo, que fue en tres ocasiones ministro con Jacques Chirac y Nicolas Sarkozy, ha hecho una llamada a los representantes políticos, con especial mención a los franceses, “a unir a la sociedad” y sostener así a las administraciones ante embates que las pongan en riesgo.
La contundencia del mensaje de Bertrand llegaba de la mano de una descripción muy gráfica de la historia de su país y del riesgo de poner en riesgo su estabilidad institucional: “Francia ha sido capaz de cortar la cabeza a un rey, de auténtica violencia”, ha recordado, en alusión a la muerte de Luis XIV durante la Revolución Francesa. Por ello, ha hecho una llamada a rebajar la tensión que sobrevuela la V República bajo la presidencia de Emmanuel Macron, con sus sucesivos e inestables cambios de gobierno.
No obstante, Bertrand ha considerado que la institución de la presidencia francesa no está en riesgo, y ha apostado por la continuidad de Macron hasta el final de mandato porque justamente, ha afirmado, un final abrupto generaría “inestabilidad”: “Hay que evitar caer en tentativas fáciles, que lleve su mandato hasta el final”. Sí ha precisado que él es partidario de un mandato único, de siete años (en lugar de los cinco actuales), pero sin posibilidad de reelección.
Preguntado por el corresponsal de EL PAÍS en Francia, Daniel Verdú, el exministro ha señalado que tiene intención de presentarse a las presidenciales en 2027: “Me estoy preparando”, ha dicho. En 2015 consiguió ganarle unas elecciones regionales a la líder de Reagrupamiento Nacional, Marine Le Pen. Ahora, ha asegurado, está convencido de que el rival en la ultraderecha no será Le Pen, sino Jordan Bardella, que intenta dar una nueva imagen más centrada. “Cambian el escaparate, pero no el ADN”, ha dicho sobre el antiguo Frente Nacional.
Desde su posición de presidente de una de las regiones francesas, Bertrand ha defendido que las soluciones que él plantea para los problemas de Alta Francia pueden servir en el resto de regiones y —esto lo ha sugerido— en el conjunto del Estado Francés. ¿Cuáles son? “El paro de mi región es el más bajo en 20 años y hago política para las clases medias, que son la médula espinal de la sociedad, y por eso he conseguido hacer retroceder a los extremos”, ha aseverado.
También se ha referido “al ámbito de la vivienda, la seguridad y la inmigración”, tres problemas que están en lo más alto de las preocupaciones de la población, según las encuestas. “En las presidenciales es lo mismo”, ha remachado. Y ha apostado por introducir medidas de flexibilidad en el sistema de las pensiones, reforma que el último Ejecutivo francés ha tenido que retirar para garantizarse el apoyo de la mayoría parlamentaria.
Bertrand ha pronosticado que la derecha no se unirá a la extrema derecha de Le Pen. Y siempre ha puesto el acento en la necesidad de “aportar soluciones” para la sociedad, un déficit que, en su opinión, estaría detrás de “la falta de confianza en la política” actual, de la que ha deslizado que vive sumida en el corto plazo. Como ejemplo, ha puesto que el presidente francés centre sus políticas en planes a cinco años, pensando más en mantenerse un segundo mandato que en forjar una hoja de ruta a largo plazo. Por ello, ha reclamado un referéndum en la Constitución para que los mandatos vuelvan a ser de siete años.