Un nuevo bombardeo israelí sobre una escuela de Gaza causa una treintena de muertos

Naciones Unidas denuncia que nunca un conflicto o un desastre natural había sido tan mortífero para sus empleados

Palestinos desplazados internamente en Gaza corren a refugiarse tras un ataque aéreo israelí contra la escuela Khadija, al oeste de la ciudad de Deir Al Balah, el 27 de julio.MOHAMMED SABER (EFE)

Un bombardeo del ejército israelí sobre una escuela en Deir al Balah, en la mitad meridional de Gaza, ha causado una treintena de muertos, la mayoría mujeres y niños, este sábado. Mientras, el primer ministro Benjamín Netanyahu sigue su viaje oficial esta semana a Estados Unidos, principal aliado de Israel. Tanto ...

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Un bombardeo del ejército israelí sobre una escuela en Deir al Balah, en la mitad meridional de Gaza, ha causado una treintena de muertos, la mayoría mujeres y niños, este sábado. Mientras, el primer ministro Benjamín Netanyahu sigue su viaje oficial esta semana a Estados Unidos, principal aliado de Israel. Tanto la vicepresidenta Kamala Harris como el candidato republicano a la Presidencia Donald Trump, aunque con diferentes sensibilidades ante la contienda, le han pedido que impulse un acuerdo de alto el fuego que acerque el fin de la guerra en la Franja, que va camino de los 10 meses y los 40.000 muertos.

Tras el bombardeo sobre el hospital de campaña de la escuela Khadija de Deir al Balah, han vuelto a repetirse —y a difundirse ampliamente— las mismas imágenes dantescas de cuerpos de todas las edades desmembrados, cadáveres esparcidos en el lugar del impacto de los misiles, traslado de heridos y carreras entre los supervivientes alarmados e incrédulos. “Reina el caos dentro del hospital mientras los médicos intentan asistir a los palestinos heridos con la atención médica esencial”, informó desde el hospital Al Aqsa de Deir al Balah, Tareq Abu Azzoum, uno de los reporteros de la cadena catarí Al Jazeera.

El lugar golpeado, como muchos otros, sirve de acomodo a miles de personas que han sido empujadas fuera de sus lugares de residencia a lo largo de la contienda para que, supuestamente, el ejército israelí pueda cumplir su objetivo de acabar con las capacidades militares de Hamás. De hecho, como en anteriores ocasiones, esa es la justificación presentada para este último ataque por los portavoces militares; que la escuela acoge un centro de mando de los radicales donde, además, almacenaban armamento.

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“La masacre en la escuela Khadija es un crimen que confirma el alejamiento del enemigo israelí de todos los valores humanos y su desafío a todas las leyes de la guerra”, ha denunciado por su parte Hamás en un comunicado en el que, además, señala a Estados Unidos como cómplice y reclama la ayuda de la comunidad internacional. El grupo fundamentalista niega las acusaciones israelíes de que emplea infraestructura civil y sanitaria para sus operaciones militares contra las tropas de ocupación. El ejército no informa de cuántos civiles ha matado, pero sí da la cifra de 14.000 milicianos.

La de Gaza “se trata, con mucho, de la mayor pérdida de personal muerto en un solo conflicto o desastre natural desde la creación de las Naciones Unidas”, ha alertado el comisionado general de la agencia de la ONU para los refugiados palestinos (UNRWA), Philippe Lazzarini, en su perfil de la red social X. Solo los empleados muertos de esta agencia en la presente contienda ascienden casi a 200, ha señalado “No son números, son nuestros colegas y nuestros amigos. Son maestros, médicos, enfermeras, ingenieros, personal de apoyo, técnicos que dedicaron su vida a apoyar a la comunidad. Muchos fueron asesinados con sus familias, otros estaban en el cumplimiento del deber”, ha añadido.

Unas horas antes del lanzamiento de varios misiles en esa escuela refugio, las autoridades israelíes habían ordenado, una vez más, el movimiento forzoso de miles de personas de varios barrios de Jan Yunis, algo más al sur que Deir al Balah, hacia la zona de Al Mawasi, una zona junto a la playa en la orilla del Mediterráneo, que Israel define como “humanitaria” y “segura” pese a haberla atacado varias ocasiones. Con esta nueva orden, la tercera en pocos días, el ejército cada vez deja menos espacio para la población en esa ciudad, cuyo casco urbano sufre inmensos daños tras meses de asedio militar.

En esta localidad, la segunda de la Franja, la operación que el ejército desarrolla desde el pasado lunes ha costado ya la vida a 170 palestinos, según los servicios de emergencia. El pasado miércoles, soldados israelíes junto a integrantes de los servicios secretos lograron recuperar de un túnel de Jan Yunis los cadáveres de cinco víctimas de los ataques del 7 de octubre que habían sido trasladados al interior de Gaza.

Negociaciones en Roma

La violencia no se limita a la mitad sur de la Franja. En el norte, en diferentes zonas de Ciudad de Gaza, los enfrentamientos de la resistencia armada palestina con los militares invasores siguen siendo intensos, según detalla Hamás a través de sus redes sociales. Además de los enfrentamientos directos, aseguran que un ataque sobre un vehículo militar enemigo dejó varios muertos y heridos, sin especificar más detalles, en el convulso barrio de Tel al Hawa.

Las negociaciones ante un posible alto el fuego que permita liberar a los más de cien rehenes que quedan en Gaza ha sido otro de los asuntos que ha abordado Netanyahu en su viaje a Estados Unidos. Está previsto que Roma acoja a partir de este domingo nuevas conversaciones para poder acercar a las partes a la tregua.

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