Argentina incauta el avión de carga venezolano retenido en Buenos Aires a petición de EE UU
Un juzgado del Distrito de Columbia considera que el Boeing 747 de Emtrasur que lleva dos meses inmovilizado violó leyes estadounidenses de control de exportaciones
La justicia de Argentina aceptó un pedido de Estados Unidos y ordenó este jueves la incautación del avión de la aerolínea venezolana Emtrasur retenido desde el 8 de junio pasado en Buenos Aires. El Boeing 747 quedará a partir de ahora bajo control del juez federal Federico Villena y su par del Distrito de Columbia, Michael Harvey, que investiga una presunta violación a las leyes de control de exportaciones que aplica la Casa Blanca a países considerados sospechosos de...
La justicia de Argentina aceptó un pedido de Estados Unidos y ordenó este jueves la incautación del avión de la aerolínea venezolana Emtrasur retenido desde el 8 de junio pasado en Buenos Aires. El Boeing 747 quedará a partir de ahora bajo control del juez federal Federico Villena y su par del Distrito de Columbia, Michael Harvey, que investiga una presunta violación a las leyes de control de exportaciones que aplica la Casa Blanca a países considerados sospechosos de terrorismo. El avión pertenecía a la aerolínea Mahan Air, que no estaba habilitada a venderlo a terceros porque está bajo sanción estadounidense desde 2008. Emtrasur tampoco podía comprarlo sin autorización. La escalada judicial alimenta aún más la tensión diplomática entre Buenos Aires y Caracas, que considera la retención del avión un “secuestro” y al presidente argentino, Alberto Fernández, un “títere del imperio”.
Tras la incautación judicial, agentes del FBI se presentaron en el aeropuerto internacional de Ezeiza, a las afueras de Buenos Aires, inspeccionaron la aeronave venezolana y redactaron el inventario que pidió el juez Harvey. El juez Villena también autorizó al Servicio de Alguaciles de los Estados Unidos, a cargo del transporte de presos federales, a coordinar la custodia y mantenimiento del avión. Argentina y Estados Unidos tienen un tratado de colaboración judicial mutua que no exige que los hechos investigados sean delito en ambas jurisdicciones a la vez. De ahí que el juez Villena haya considerado “procedente” el pedido que le llegó desde Columbia a través del ministerio de Justicia argentino.
Villena decidió, sin embargo, tramitarlo como un expediente separado de la causa madre, que investiga a los 19 tripulantes de la aeronave —14 venezolanos y cinco iraníes— por presuntos vínculos con el terrorismo. El desdoblamiento del trámite deja sin capacidad de apelación a Venezuela y a la empresa estatal Conviasa, propietaria del Boeing 747 de Emtrasur.
El expediente principal debe determinar si el objetivo de algunos miembros de la tripulación era diferente al comunicado en el plan de viaje. El avión transportaba autopartes de una multinacional y la carga fue entregada, pero una denuncia de la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA) puso el ojo sobre los cinco iraníes a bordo. Su presencia inquietó a la comunidad judía del país sudamericano, que pidió que se aclarase si tenían vínculos con algunos de los imputados por el atentado que en 1994 destruyó la sede de la AMIA en Buenos Aires, con un saldo de 85 muertos.
La retención del Boeing 747 de Emtrasur ha deteriorado las relaciones bilaterales entre Caracas y Buenos Aires. Este jueves, al grito de “devuelvan el avión y la tripulación”, el chavismo organizó una protesta frente a la embajada argentina en la capital venezolana. El caso ya forma parte de la maquinaria propagandística de los grandes medios de difusión del chavismo, y comentado varias veces con irritación por importantes jerarcas revolucionarios en declaraciones y debates legislativos. La etiqueta #DevuelvanElAvión está siendo promocionada en la televisión estatal, Venezolana de Televisión, en un spot que va acompañado de un enérgico discurso de Nicolás Maduro cuestionando “al imperialismo”.
En la concentración de la embajada argentina en Caracas estuvo presente el ministro de Transporte de Venezuela, Ramón Velásquez, junto a varios diputados oficialistas, y participaron trabajadores de la aerolínea estatal Conviasa. El ministro fue recibido por el embajador argentino, Oscar Laborde, que recién asume funciones en Caracas. “Esperamos que se imponga la verdad, que la justicia argentina reaccione”, ha declarado Velásquez.
“Ahora se nos quiere embargar un avión en Argentina por una decisión de un tribunal del Estado de Florida”, se quejó previamente Maduro. “O sea que a partir de ahora un tribunal de la Florida o Nueva York decide quitarle un barco, un avión o cualquier propiedad a Venezuela o a cualquier país y puede hacerlo. ¿No hay dominio soberano? ¿No hay respeto a la soberanía? ¿No hay respeto a la ley internacional o es que en Argentina mandan los tribunales de Estados Unidos?”, agregó el presidente
El enojo de Caracas ha aumentado rápidamente en los últimos días, si bien no hubo aún un pronunciamiento oficial del Gobierno venezolano una vez conocida la decisión de incautación judicial. Argentina no respondió directamente a las acusaciones venezolanas. El miércoles, en un encuentro con periodistas en la sede de la Cancillería en Buenos Aires, el subsecretario de Asuntos Latinoamericanos, Gustavo Martínez Pandiani, dijo ante una consulta de este periódico que “el tema del avión no altera en nada el vínculo con Venezuela”. “Es un tema judicial y el Poder Ejecutivo no tiene mucho para hacer. No nos vamos a meter”, dijo. “El vínculo con Venezuela está normalizado, tomamos la decisión de elevar la relación a nivel de embajadores, lo que se dice corre por cuenta de quien lo dice”, agregó.
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