Nicaragua rompe relaciones diplomáticas con Taiwán y las restablece con China

El anuncio llega en medio de la crispación entre Pekín y la isla, y cuando el Departamento de Estado ha anunciado sanciones contra un asesor de Ortega

El canciller Denis Moncada en una comparecencia ante la prensa oficialista el 19 de noviembre.STR (AFP)

China y Nicaragua han restablecido este viernes relaciones diplomáticas formales, después de que Managua rompiera horas antes las que mantenía con Taipéi. La decisión, en medio de una crispación cada vez mayor entre los dos lados del estrecho de Formosa, deja a Taiwán con solo catorce aliados diplomáticos en el mundo y aumen...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

China y Nicaragua han restablecido este viernes relaciones diplomáticas formales, después de que Managua rompiera horas antes las que mantenía con Taipéi. La decisión, en medio de una crispación cada vez mayor entre los dos lados del estrecho de Formosa, deja a Taiwán con solo catorce aliados diplomáticos en el mundo y aumenta la presión de Pekín sobre la isla autogobernada que considera parte inalienable de su territorio.

En un comunicado, el Ministerio de Asuntos Exteriores chino precisa que el restablecimiento de relaciones se formalizó en una ceremonia en la ciudad china de Tianjin, tras una serie de reuniones con una delegación nicaragüense en la que figuraban el ministro de Finanzas del país centroamericano y dos de los hijos de Daniel Ortega. El acuerdo está firmado por el viceministro de Exteriores chino Ma Zhaoxu y por Laureano Ortega Murillo.

En él, Nicaragua asume la posición de Pekín sobre el gobierno de Taipéi y declara que el de la República Popular de China es “el único gobierno legítimo que representa a toda China, y Taiwán forma parte inalienable del territorio chino”.

“Es la decisión correcta, que se ajusta a la tendencia general y a las aspiraciones populares”, ha asegurado el ministerio de Exteriores en Pekín.

El cambio de alianza diplomática de Nicaragua representa un duro golpe para Taiwán, que puede perder otro aliado más en Centroamérica si la presidenta electa de Honduras, Xiomara Castro, cumple su promesa de romper relaciones con la isla para entablarlas con Pekín.

Desde que finalizó la tregua diplomática tácita entre China y Taiwán tras la derrota electoral del Kuomintang y la llegada en 2016 al poder en la isla de la presidenta Tsai Ing Wen, de posiciones alejadas de las de Pekín, arrebatar aliados diplomáticos a Taipéi se ha convertido en una herramienta a la que Pekín recurre con cierta regularidad cuando las relaciones entre ambos gobiernos se tensan especialmente.

Nicaragua es el octavo país que abandona a Taiwán por China en cinco años, después de Burkina Faso, República Dominicana, Sao Tomé y Príncipe, Panamá, El Salvador, las islas Salomón y Kiribati. Ello deja al gobierno de Tsai con solo catorce países con los que mantiene relaciones diplomáticas formales, concentrados principalmente en América Latina y el Caribe.

La última vez que se produjo un cambio en las alianzas diplomáticas -las islas Salomón y Kiribati se sumaron a los países que reconocen a Pekín en septiembre de 2019-, Taiwán se preparaba para celebrar unas elecciones presidenciales en las que Tsai, aborrecida por Pekín, ganó por amplia mayoría.

Esta vez, el anuncio de Nicaragua llega cuando Pekín ve con alarma una profundización de las relaciones -informales- entre Taipéi y países occidentales, muy especialmente Estados Unidos.

Aunque sus funcionarios salieron inmediatamente al quite para asegurar que no había cambio de posición, el presidente Joe Biden llegó a indicar en octubre que defendería Taiwán si este territorio fuera atacado por China, que nunca ha renunciado al uso de la fuerza para lograr la unificación. La isla se encuentra entre los gobiernos invitados a participar en la cumbre sobre la democracia que se celebra este fin de semana en Washington, algo que ha causado un profundo malestar en los pasillos del poder en Pekín. China, que presiona sobre Taipéi mediante maniobras militares en aguas cercanas y vuelos sobre el espacio de defensa aéreo taiwanés, ha calificado el gesto de Estados Unidos como un “error”.

Además, Pekín ha rebajado sus lazos diplomáticos con Lituania y, según el gobierno en Vilna, trata de castigar a la nación báltica económicamente, después de que Taiwán abriera una embajada de hecho en la capital lituana, su primera en Europa en los últimos 18 años.

Y el exprimer ministro de Japón Shinzo Abe, que mantiene una gran influencia dentro del Partido Liberal Demócrata en el gobierno en Tokio, apuntaba la semana pasada que Tokio ayudaría a Taiwán en caso de conflicto con China.

El anuncio de este viernes llega también después de meses de deterioro de los lazos entre Nicaragua y Estados Unidos, y el mismo día en que el Departamento de Estado ha anunciado sanciones contra Néstor Moncada Lau, asesor de Daniel Ortega, tras acusarle de fraude aduanero y operaciones corruptas para enriquecer a miembros del gobierno en Managua.

Taiwán ha expresado su decepción por el abandono de Nicaragua, y ha anunciado el fin inmediato de sus proyectos de colaboración con el país centroamericano. La isla era hasta ahora el donante bilateral más importante de Nicaragua, país donde financiaba 27 proyectos en áreas de producción de alimentos, cultivos de frutales y cría de cerdos de calidad superior, entre otros, por valor de entre 30 millones y 50 millones de dólares, según datos del Gobierno nicaragüense citados por Efe.

“Lamentamos que el gobierno del presidente Ortega haya hecho caso omiso de los muchos años de amistad entre los pueblos de Taiwán y de Nicaragua”, ha indicado el ministerio de Exteriores en Taipéi. “Como miembro de la comunidad internacional, Taiwán tiene el derecho a intercambios y al desarrollo de relaciones diplomáticas con otros países”, agrega.

El principal partido de oposición taiwanés, el nacionalista Kuomintang -más cercano a China que el Partido Demócrata Progresista de Tsai-, ha indicado por su parte que “lamentamos profundamente que Pekín busque continuamente suprimir nuestra presencia internacional y arrebatar nuestras relaciones diplomáticas. El KMT rechaza aceptar ninguna acción que perjudique la paz y la seguridad en el estrecho” de Formosa.

Washington, por su parte, ha acusado al gobierno de Ortega de privar a Nicaragua de un aliado leal, y ha asegurado que Taiwán aporta “beneficios económicos y de seguridad significativos a los ciudadanos de aquellos países” con los que mantiene lazos diplomáticos.


Suscríbase aquí a la newsletter de EL PAÍS América y reciba todas las claves informativas de la actualidad de la región

Sobre la firma

Más información

Archivado En