Fallece el expresidente de Ecuador Gustavo Noboa, artífice de la estabilización del país tras la crisis de 1999

Estaba a punto de someterse a una neurocirugía por un tumor de las meninges, pero el expresidente Gustavo Noboa tenía espacio entre sus preocupaciones para pensar en el futuro de su país. “El domingo voten con conciencia y Dios bendiga al Ecuador”, publicaba en Twitter, a sus 83 años, tres días antes de la operación y agradeciend...

Estaba a punto de someterse a una neurocirugía por un tumor de las meninges, pero el expresidente Gustavo Noboa tenía espacio entre sus preocupaciones para pensar en el futuro de su país. “El domingo voten con conciencia y Dios bendiga al Ecuador”, publicaba en Twitter, a sus 83 años, tres días antes de la operación y agradeciendo por los buenos deseos recibidos. Ese mensaje resumía dos de las facetas más reconocidas, la de demócrata y la de católico, del exjefe de Estado ecuatoriano que falleció este martes de un infarto en el hospital Jackson Memorial de Miami, en Estados Unidos. Estaba recuperándose bien de la intervención quirúrgica del 9 de febrero, que estaba agendada dos días después de las elecciones.

Gustavo Noboa accedió a la presidencia del país andino en enero del año 2000 en medio de un torbellino político y económico. Jamil Mahuad había sido derrocado por los militares, quienes, en aras de la estabilidad nacional, depusieron el control y se lo entregaron al entonces vicepresidente. Fue ratificado por el Parlamento, entonces llamado Congreso Nacional y cumplió todo el periodo restante del mandato, desempeñando un papel clave en la estabilización nacional. Le tocó ratificar y encarrilar la economía ecuatoriana que acababa de adoptar el dólar como moneda después del doloroso episodio del feriado bancario de 1999, cuando millones de personas emigraron hacia España e Italia. También enfrentó la reconstrucción de las zonas de la costa devastadas por el fenómeno de El Niño.

“Dilecto amigo, demócrata respetado, formador moral de juventudes, patriota. Mi sentido pésame a sus familiares y amigos”, se pronunció el presidente, Lenín Moreno, al conocer la noticia del fallecimiento. Luego anunció luto nacional desde este miércoles. Como Moreno, Gustavo Noboa tuvo que renegociar la deuda externa del país tras la moratoria en la que entregó la Administración de Mahuad. Esa decisión le condujo después hacia uno de los periodos más duros de su vida. La justicia ordenó prisión contra él por supuesta malversación de fondos, una “persecución”, según sus propias palabras, que devino del Gobierno de León Febres Cordero.

Recibió asilo en República Dominicana dos años, entre 2003 y 2005, hasta que pudo volver a Ecuador. Su último mensaje público, también en redes sociales, revelaba su afán de superación pese a que era la segunda vez que debía enfrentar un tumor cerebral. “Me encuentro en recuperación y vamos adelante”. Su familia confirmó que el infarto tuvo lugar cuando aún estaba ingresado en el hospital. Casado, con seis hijos, era un referente en la política ecuatoriana por su mesura y prudencia a la hora de analizar el devenir actual. “Lamento excusarme, estoy fuera de la arena política”, le dijo a EL PAÍS, al ser consultado sobre el giro político que estaba tomando Lenín Moreno, tras distanciarse de Rafael Correa.

Además de vicepresidente, fue gobernador de la provincia de Guayas y tuvo gran influencia en la academia. El doctor en Jurisprudencia y catedrático guayaquileño ocupó el cargo de rector de la Universidad Católica Santiago de Guayaquil durante una década (1986-1996) y de esa época cosechó el reconocimiento de formador de juventudes que hoy todos, políticos, empresarios, periodistas o alumnos, destacan en sus mensajes de condolencia.

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