Aparecen cuatro cadáveres baleados en una carretera de entrada a la CDMX

La policía ha encontrado cuatro cadáveres este lunes en una de las principales vías de acceso a la Ciudad de México, la carretera que va a Toluca. Todos presentaban heridas de bala. Los agentes han cerrado la circulación durante horas. Mientras tanto, los peritos de la fiscalía del Estado de México, aledaño a la capital, recogían las muestras pertinentes. En un comunicado, la fiscalía ha informado del hallazgo de cinco casquillos percutidos. A las 9.00, la carretera ha vuelto a abrirse. Hasta septiembre, el Estado de México, la entidad más poblada del país, contaba 1.699 victimas de asesinato, 41 menos que las registradas en todo 2015.

Los medios locales informaban de lo ocurrido a primera hora de la mañana. Habían aparecido cuatro cuerpos, algunos en bolsas negras, en el arcén de la carrertera, más o menos en el kilómetro 38, en el sentido de entrada a la Ciudad de México. Miles de vehículos circulan cada día por ahí. La vía une la ciudad con Toluca, la capital del Estado de México. En los fines de semana, las praderas cercanas a la carretera se llenan de vecinos de la Ciudad de México y otros pueblos. La Marquesa, así se llama el lugar, es uno de los sitios preferidos por lo vecinos para jugar a fútbol, asar carne o volar el papalote (la cometa).

En números absolutos, el Estado de México es el más peligroso del país. Además del alza en los asesinatos, otros delitos de alto impacto, como el secuestro o la extorsión, también aumentan. Si en todo 2015 se denunciaron 187 secuestros, en septiembre de este año ya se contaban 204; en los primeros nueve meses de 2016 se han registrado 635 denuncias por extorsión, 27 menos que en todo 2015.

En septiembre, la entidad ya fue noticia por el secuestro y el asesinato de María Villar, sobrina del presidente de la Federación Española de Fútbol. Villar tomó un taxi pirata en Santa Fé, un barrio de clase media alta,ubicado a orillas de la carretera Toluca - Ciudad de México. La secuestraron, pidieron un rescate, cobraron parte y luego la mataron. Su cuerpo apareció en un poblado del Estado de México, cerca de un riachuelo.

Casi en la misma fecha del secuestro de Villar, las autoridades mexiquenses anunciaban el lanzamiento de una red de cámaras de vigilancia para frenar la escalada delictiva en la región. El Gobernador, Eruviel Ávila, del PRI, inauguraba un centro de monitoreo de 10.000 cámaras de vigilancia junto al secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, el segundo al mando del Gobierno federal.

La visita de Chong se producía a meses de la elecciones estatales en el estado, una contienda clave para el PRI de cara a las presidenciales del 2018. Siempre en manos del Partido de la Revolución Institucional, la pérdida del Estado de México en 2017 abriría una herida de consecuencias poco previsibles para la formación.

Además de un hecho trágico, la aparición de los cuatro cadáveres en una de las carreteras más importantes del estado se convierte así en un símbolo, en una duda: ¿Puede el PRI controlar a la delincuencia en el mayor caladero de votos del país?