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Una mujer increpa al Papa por la corrupción en Argentina

“No seas cómplice Bergoglio”, le espeta tras conocer la detención de José López

Juliana Conget y su peculiar protesta en el Vaticano.
Juliana Conget y su peculiar protesta en el Vaticano.

La guerra fría de tinte político que viven el Papa Francisco y el presidente Mauricio Macri se ha hecho tan profunda que los propios argentinos comenzaron a tomar partido por uno u otro. Así, con el kirchnerismo cercado en los tribunales judiciales y un peronismo renovador, por momentos muy afín al oficialismo, el Sumo Pontífice parece ser la única oposición de peso al gobierno nacional. El efímero encuentro entre ambos en febrero pasado, la recepción a la titular de Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini en el Vaticano y el rosario que Francisco le envío a la dirigente social encarcelada Milagro Sala son gestos que cayeron muy mal en la Casa Rosada.

Es por ello que muchos de los ciudadanos que votaron a Macri hoy sufren una suerte de contradicción con quien fuera el orgullo argentino, desde aquella fumata blanca del 13 de marzo de 2013. Ese sector, en descontento con algunos gestos de Francisco, hoy lo llama en forma despectiva el Papa peronista. En ese contexto, no sorprende la actitud de una mujer que se acercó al Vaticano y le gritó al religioso: “Jorge, la corrupción mata. No seas cómplice, Bergoglio”.

En dos videos publicados por el periódico La Nueva, de Bahía Blanca, puede verse a Juliana Conget, quien está de vacaciones en Europa, con una gorra y camiseta blanca, exhibiendo un cartel en el que repite la frase. En otra de las cintas se escucha cuando grita casi con la voz quebrada, mientras el Sumo Pontífice pasa por el lugar a bordo del Papa móvil. Incluso, la mujer de 43 años advierte al inicio de la filmación: “Me escondo para que no me saque nadie”.

En declaraciones a la prensa, la mujer justificó su accionar admitiendo que está indignada. En particular, tras conocer la noticia de la detención del ex secretario de Obras Públicas José López. “El Papa tiene que marcar diferencia entre lo bueno y lo malo, pero lo único que hace es meterse en política recibiendo a gente implicada en casos de corrupción. Y la corrupción mata. Y no es de buen católico bancar a corruptos, creo”, opinó la mujer. “No puede ser lo mismo recibir a Guillermo Moreno que a Margarita Barrientos y esa fue mi manera de repudiar lo malo: no me parece sano naturalizar actos corruptos. Y no debe dar lo mismo”, finalizó.

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