Alberto Caballero, sobrino de José Luis Moreno, sobre su detención: “Nos sorprende, pero tampoco nos extraña”
El director, guionista y productor de ‘La que se avecina’ aclara que lleva años sin ningún contacto profesional ni personal con su tío, acusado de un delito de estafa y blanqueo de capitales
Alberto Caballero lleva años sin mantener contacto, ni personal ni profesional, con su tío, el productor televisivo José Luis Moreno. El creador, guionista, director y productor de la exitosa serie de televisión La que se avecina, dice que la noticia de la detención del ventrílocuo en la mañana del martes, acusado por un delito de estafa y blanqueo de capitales, “siempre sorp...
Alberto Caballero lleva años sin mantener contacto, ni personal ni profesional, con su tío, el productor televisivo José Luis Moreno. El creador, guionista, director y productor de la exitosa serie de televisión La que se avecina, dice que la noticia de la detención del ventrílocuo en la mañana del martes, acusado por un delito de estafa y blanqueo de capitales, “siempre sorprende y afecta porque no deja de ser familia, aunque ya no haya contacto. Ojalá que estas cosas no ocurrieran”. Aunque reconoce: “Nos sorprende, pero tampoco nos extraña”.
“Nos hemos enterado por la prensa y nos hemos quedado un poco en shock”, responde tranquilo en conversación telefónica con EL PAÍS. “Estamos preocupados desde la distancia, aunque desde hace unos cuantos años no teníamos contacto con él, pero al fin y al cabo es familia”, dice en nombre de sus padres y su hermana, Laura Caballero, también creadora y productora de la exitosa serie de Mediaset.
Desde primera hora de la mañana de este martes y hasta ya entrada la tarde, la policía ha llevado a cabo el registro del domicilio del empresario, de 74 años, que se encuentra en la localidad madrileña de Boadilla del Monte, para después continuar en la sede de una de sus productoras, Kulteperalia, situada en Moraleja de Enmedio, y donde el ventrílocuo tiene uno de los mayores estudios de grabación de España.
Después de despegar en la industria televisiva de la mano de su tío en 2003, gracias a la serie Aquí no hay quien viva (Antena 3) —donde Moreno era el productor ejecutivo— y durante los primeros años de La que se avecina, hace ya casi una década que los sobrinos de José Luis Moreno rompieron toda relación con el empresario y crearon su propia productora para continuar con la exitosa comedia de vecinos. Su último vínculo terminó precisamente hace un año, cuando finalizó el contrato de alquiler del estudio de grabación donde se rodaba la serie, propiedad de Moreno. “Afortunadamente, desde 2012 creamos nuestra productora y hemos trabajado al margen de su circunstancia y la única relación con él es que producíamos una serie en unos platós que le teníamos arrendados. Y ese vínculo terminó justo el año pasado”, explica aliviado Caballero. “Tuvimos una serie de desavenencias a nivel profesional y personal y llevó a un distanciamiento progresivo a lo largo del tiempo. En estos años no hemos tenido contacto con él ni hemos sabido de sus andanzas ni por su entorno ni por terceras personas”, añade.
En una entrevista con este periódico el pasado marzo, los hermanos Caballero ya hablaron de la nula relación con José Luis Moreno, y no tuvieron problemas en dar detalles sobre lo que les motivó a tomar caminos separados en el ámbito profesional con el popular productor de televisión. “Queríamos crear la empresa en la que nos hubiera gustado trabajar cuando empezamos, en cuanto a las condiciones, de respeto y de espíritu. Y queríamos ganar en calidad de vida y en tranquilidad”, decía tajante Alberto Caballero sobre la creación de Contubernio S. L., la productora que administra con su hermana desde finales de 2011. Una decisión que tomaron después de varios problemas de índole económica y financiera que tuvieron con su tío: “Era un contrasentido muy bestia estar haciendo un éxito tan grande y que hubiera impagos”.
La detención de Moreno no supone para Caballero ningún quebradero de cabeza y admite estar “muy tranquilo” en cuanto a la investigación policial se refiere. Sin embargo, la productora que comparte con su hermana sí se vio hace unos años involucrada en lo que él mismo ha denominado un “intento de estafa”. “Recibimos un requerimiento de un par de entidades bancarias reclamando el pago de dos pagarés y nosotros no trabajamos con pagarés. Descubrimos que alguien había falsificado los pagarés como si los hubiéramos firmado nosotros y a unas empresas que no eran proveedoras nuestras, empresas que luego investigando eran empresas fantasmas, sin una actividad clara. Nos habían intentado estafar y simplemente nos limitamos a denunciarlo y el proceso sigue en los tribunales”, explica asegurando no tener ningún conocimiento de la investigación que, paralelamente, se estaba realizando a su tío. “El proceso en los tribunales ha seguido su curso, pero siempre hemos pensado que era mala suerte y alguien había intentado colarnos la típica estafa. Ahora a raíz de las noticias ya no sabes qué pensar, pero no hemos acusado a mi tío. Solo hemos requerido a los tribunales que esclarezcan el asunto. Esperamos que el fallo sea positivo a nuestro favor y nos exculpe, claro. Siempre inquieta que intenten engañarte”, culmina.
No es la primera vez que el nombre del famoso ventrílocuo, que sufrió un sonado y violento atraco en su chalé en 2007, aparece ligado a escándalos y corruptelas más allá de los escenarios y los platós de televisión. Moreno fue condenado en 2013 por no respetar los derechos de sus trabajadores. El empresario fue denunciado por no pagar a sus empleados los mínimos establecidos y por no sufragar las cantidades estipuladas en la grabación de las obras y de las dietas. En ese momento, los denunciantes fueron ocho actores que participaban en las obras musicales Lo más grande en Zarzuela, La Revoltosa y La Gran Vía. El juzgado lo condenó entonces a desembolsar 30.000 euros. Además, según la lista de morosos de Hacienda del año en curso (2021), una de sus empresas, Kulteperalia S.L., que ofrece y alquila platós de grabación, mantiene una deuda con el fisco español de 1.041.884 euros.