Robert Capa tiende un puente de Vallecas al Museo Reina Sofía

La famosa foto del reportero húngaro de los bombardeos de la guerra civil sobre Madrid se hace un hueco en la nueva colección permanente del museo

La foto realizada por Robert Capa de unos niños delante de una casa bombardeada en Vallecas en 1936. INTERNATIONAL CENTER OF PHOTOGRAPHY / MAGNUM PHOTOS

El fotoperiodismo sobrevive entre el optimismo de los que no dudan de su utilidad para martillear conciencias y enmendar conductas y el pesimismo de aquellos que se dejan llevar por la corriente de indiferencia que inunda una sociedad anestesiada por la sobrecarga de imágenes que nos rodea. Que un retrato hecho hace más de tres décadas y publicado en la portada de National Geographic haya servido estos días para que su protagonista haya...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

El fotoperiodismo sobrevive entre el optimismo de los que no dudan de su utilidad para martillear conciencias y enmendar conductas y el pesimismo de aquellos que se dejan llevar por la corriente de indiferencia que inunda una sociedad anestesiada por la sobrecarga de imágenes que nos rodea. Que un retrato hecho hace más de tres décadas y publicado en la portada de National Geographic haya servido estos días para que su protagonista haya sido evacuada desde Afganistán a Italia es un ejemplo interesante. Pero tenemos casos mucho más cercanos.

Hay una foto de Robert Capa (1913-1954) de los bombardeos de Madrid durante la guerra civil a la que el paso de los años está sentando de maravilla y demuestra que, muchos años después de muertos, el trabajo de algunos fotógrafos sigue siendo de enorme utilidad. Esa imagen, tomada en 1936 a la altura del número 10 de la calle Peironcely del barrio vallecano de Entrevías, no era en principio de las más conocidas del reportero nacido en Hungría, pero estos días ha pasado a formar parte del nuevo recorrido de la colección permanente del Museo Nacional Reina Sofía.

Desde este viernes la fotografía, con medidas de 30 por 40 centímetros y que lleva por referencia Children in front of a bullet-riddled building, Peironcely, 10, Vallecas, Madrid, puede verse en la sala 205.04 de la segunda planta del edificio Sabatini titulada España, mito trágico. Es la única foto que convive junto a obras de Le Curbusier, Jacques Lipchitz, Joan Miró y David Smith. Se trata de una sala que “refleja la respuesta de la comunidad artística internacional en el contexto de la Guerra Civil. La situación española se convirtió en un campo de experimentación y compromiso, de forma que se produjeron obras inspiradas en la guerra”, comentan fuentes del museo. “La fotografía de Capa, el reportero que alcanzó mayor renombre en esos años, muestra el contraste entre guerra y paz, retratando a unos niños en una calle bombardeada. Los niños fueron además un sujeto muy representado en las manifestaciones propagandísticas y reivindicativas de la época”, añaden.

El pasado 15 de octubre, cerca de medio centenar de intelectuales de varios países, entre los que se encuentran Rosa Regás, Ian Gibson o Federico Mayor Zaragoza, pidieron al director del museo, Manuel Borja-Villel, que la foto de Capa de los bombarderos de la capital pasara a formar parte de los nuevos recorridos. Argumentaban que debía ser así por la importancia del autor para la historia de la fotografía, porque esa foto formaba parte de la primera vez que la firma de Capa aparecía dentro de un reportaje -revista Regards el 10 de diciembre de 1936-, porque gracias a sus numerosas apariciones en medios ha acabado convertida en un icono de la vulnerabilidad infantil ante el horror de la guerra y por los cambios sociales que sigue propiciando 80 años después de ser realizada.

La solicitud fue respondida este jueves, la víspera de la inauguración, cuando les llegó el escrito de confirmación de que la referida foto se ha incorporado. Los firmantes de aquella carta han recibido con satisfacción lo que consideran una decisión de justicia por parte de las autoridades culturales. El director del museo, además de disculparse por el retraso al contestar, explica que ya tenían pensado con anterioridad a la solicitud incluir esa foto de Capar en el nuevo recorrido. También la concejal socialista Mar Espinar se había dirigido al museo para solicitar la inclusión de la foto de Vallecas en la nueva reorganización.

Gracias a esa fotografía y al movimiento social y cultural que ha generado a su alrededor en los últimos años, encabezado por la Fundación Anastasio de Gracia, se ha conseguido otorgar protección al edificio de Peironcely, 10, que finalmente ha sido expropiado por el Ayuntamiento de la capital y salvado de ser demolido. También se ha logrado que las familias que habitaban en sus infraviviendas fueran realojadas. El equipo de gobierno que encabeza el alcalde José Luis Martínez Almeida no ha concretado el uso definitivo al que será destinado. En todo caso, el pasado mes de abril la plataforma #SalvaPeironcely10 presentó el denominado Plan Robert Capa-Entrevías al gobierno municipal.

Doble página de The New York Times Magazine del 24 de enero de 1937 en el que aparece publicada la foto (centro) del edificio de la calle Peironcely, 10 de Madrid que hizo el reportero Robert Capa.Luis de Vega

Robert Capa, uno de los fundadores de la agencia Magnum, realizó la foto delante del número 10 de la calle Peironcely de Madrid a finales de 1936. Recientemente se ha sabido que apareció publicada en The New York Times Magazine el 24 de enero de 1937, algo más de un mes después de se publicara en las páginas de Regards, de cuya publicación pronto se cumplirán 85 años.

Esta foto de Vallecas llegó al Reina Sofía en 1998 dentro de un grupo de 205 fotos realizadas durante la guerra civil española por Robert Capa. Fueron seleccionadas y donadas por su hermano, Cornell Capa, responsable hasta su muerte en 2008 de su legado. La mayoría formaron parte de una exposición Capa: cara a cara inaugurada en el museo en febrero de 1999. La foto de Entrevías también estuvo expuesta de forma temporal en el Reina Sofía en 2019 durante un festival que organizó la Fundación Anastasio de Gracia.

En la nueva colección hay, además, otras siete fotografías del mismo autor que se muestran en el contexto del exilio, en la cuarta planta del edifico Sabatini. Se realizaron en 1939 siguiendo los pasos de personas que salían a pie por carretera desde Barcelona hacia el norte o ya en territorio francés. Todas son copias póstumas, es decir, realizadas tras la muerte del autor, y cuentan también con medidas de 40 por 30 centímetros como todas las donadas por el hermano del fotógrafo en 1998.

Suscríbete aquí a nuestra newsletter diaria sobre Madrid.

Sobre la firma

Más información

Archivado En