El Botànic aprueba sus séptimos presupuestos para la Generalitat Valenciana con un incremento del 9%
Las cuentas incluyen dos partidas “reivindicativas” para compensar la infrafinanciación y mantener el gasto social
El Gobierno valenciano ha logrado sellar los presupuestos de la Generalitat para 2022. Después de tiras y afoljas, de encuentros y desencuentros y de una nueva fórmula para la elaboración de las cuentas, el Botánic ha conseguido sacar adelante su séptimo presupuesto, que supera en un 9% al del año anterior.
Tanto la vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, como el consejero de Hacienda, Vicent...
El Gobierno valenciano ha logrado sellar los presupuestos de la Generalitat para 2022. Después de tiras y afoljas, de encuentros y desencuentros y de una nueva fórmula para la elaboración de las cuentas, el Botánic ha conseguido sacar adelante su séptimo presupuesto, que supera en un 9% al del año anterior.
Tanto la vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, como el consejero de Hacienda, Vicent Soler, han destacado la capacidad de diálogo, negociación y acuerdo para aprobar “el mejor presupuesto para los valencianos”, tal como ha calificado Oltra.
Sanidad, Educación y Servicios Sociales se llevan la mayor parte del montante que asciende a 27.967 millones de euros. La primera dispondrá de más de 7.800 millones de euros, lo que supone el mayor gasto de la historia. Vivienda, en manos del vicepresidente segundo, Héctor Illueca, es la consejería que incrementa en mayor medida su partida, con un 75%. También registra un aumento, por encima de la media del presupuesto en su conjunto, Igualdad y Políticas Inclusivas, que contará con cerca de 2.200 millones de euros. “Son los presupuestos más inversores, sociales y europeos para impulsar una recuperación justa en la que nadie quede atrás”, ha asegurado Vicent Soler.
Como novedad, las cuentas incluyen dos partidas “reivindicativas” en los ingresos: la de compensación por la infrafinanciación que sufre la Comunidad Valenciana, de 1.336 millones de euros y la del fondo de transición hacia la nueva normalidad, que el Consell había exigido para mantener el gasto social en niveles semejantes a los de la pandemia, de 1.000 millones.
El proyecto de presupuestos se presenta ha presentado tres días después de que venciera el plazo establecido del 31 de octubre por un leve retraso en el acuerdo de la comisión política de los tres socios del Botànic, PSPV, Compromís y Unides Podem. Los socialistas aceptaron la iniciativa reclamada por Oltra de negociar las cuentas de forma global y no consejería por consejería, una herramienta que, finalmente, ha funcionado y ha permitido que el Consell apruebe los presupuestos sin demasiadas asperezas. Pese a que se han presentado fuera de plazo, se ha ajustado el calendario parlamentario para que la tramitación finalice antes de Navidad.
Los once consejeros presentarán el proyecto de presupuestos de su departamento en comparecencias individuales entre el lunes 8 y el miércoles 10 de noviembre en las Cortes, lo que dará inicio a la tramitación parlamentaria hasta que las cuentas salgan adelante en el último pleno del año entre el 20 y el 22 de diciembre.