Salvador Illa: “No pediremos a nadie que renuncie a sus ideas políticas”

Salvador Illa (La Roca del Vallès, Barcelona; 57 años) ha hecho de la discreción su principal seña de identidad política tanto cuando era ministro de Sanidad como ahora que dirige el PSC. En un momento de máxima trascendencia para su formación, con todos los focos mirando a Cataluña por el peso de los partidos independentistas en la ecuación de la investidura de Pedro Sánchez, Illa mantiene un secretismo férreo, pero da pistas de lo que puede venir en las próximas semanas. Su objetivo es que ...

Salvador Illa (La Roca del Vallès, Barcelona; 57 años) ha hecho de la discreción su principal seña de identidad política tanto cuando era ministro de Sanidad como ahora que dirige el PSC. En un momento de máxima trascendencia para su formación, con todos los focos mirando a Cataluña por el peso de los partidos independentistas en la ecuación de la investidura de Pedro Sánchez, Illa mantiene un secretismo férreo, pero da pistas de lo que puede venir en las próximas semanas. Su objetivo es que la negociación sobre la amnistía desemboque en un texto firmemente anclado en la Constitución y que, más que rápido, sea “sólido”. A los independentistas les pide que reconozcan la “pluralidad” de Cataluña antes que priorizar cualquier tipo de renuncia a sus fundamentos políticos.

Pregunta. ¿En qué fase se encuentra exactamente la negociación de la investidura?

Respuesta. Estamos en el inicio del proceso, que tiene el límite legal del 27 de noviembre. Intentaremos que se haga lo antes posible, pero lo importante es que se haga bien, con solvencia.

P. Hace una semana hubo turbulencias cuando el independentismo vinculó la investidura al referéndum. Los socialistas dejaron claro que había margen para la amnistía, pero no para el referéndum. ¿Fue una ventaja táctica para ustedes, con vistas a rebajar la trascendencia de la amnistía?

Pedro Sánchez dejó claro que no habrá pacto hasta que todo esté acordado”

R. No hay táctica, lo que hay es convencimiento en unas políticas que han dado resultado en el ámbito económico y social, y en la generación de convivencia. Y una disposición a seguir de forma coherente con esas políticas. Un Gobierno del PP y Vox sería un retroceso para España.

P. Cuando el Gobierno concedió los indultos, en muchos sectores se echó de menos un mejor relato para explicar la utilidad de dicha medida. ¿Se va a solventar esto ahora con la amnistía?

R. Para cualquier observador objetivo de la realidad catalana, los indultos ayudaron a restaurar la concordia. Y para la sociedad española también. Está en la base del apoyo a Sánchez el 23-J.

P. ¿La ley de amnistía estará lista antes de la investidura?

R. Lo importante no es hacer las cosas rápido, sino bien.

P. ERC dice que la amnistía ya está pactada. ¿Es así?

R. Nosotros explicamos los acuerdos cuando los hay.

P. ¿Pero lo está o no?

R. Cuando hay acuerdos los hacemos públicos. Y no hemos hecho público nada.

Una investidura fallida generaría mucha frustración en Cataluña”

P. ¿Es partidario de la amnistía?

R. Lo soy de atender los resultados del 23-J. Y dicen no a un Gobierno de PP y Vox y sí a uno progresista liderado por Sánchez. Hay que articular una fórmula de gobernanza con diálogo, coherencia, discreción y oficio político.

P. Siempre se había opuesto a ella. ¿A qué viene el cambio?

R. El objetivo ha sido superar con diálogo los acontecimientos dolorosos de 2017, afianzar la concordia. La política desplegada ha dado frutos palpables.

P. Pedro Sánchez utilizó el viernes por primera vez la palabra amnistía. ¿Por qué les ha costado tanto verbalizarla?

R. Hay que respetar los tiempos de la política. Hubo el tiempo de [el líder del PP, Alberto Núñez] Feijóo, que ha fracasado. Sánchez, como candidato, ha nombrado a su equipo negociador. Si hay políticas que dan resultado, es de sentido común avanzar en ellas aunque resulten incómodas.

El objetivo ha sido superar con diálogo los acontecimientos dolorosos de 2017″

P. Se pueden decir las cosas por su nombre.

R. Intento trabajar con prudencia, discreción y dejando claro que me debo al marco de la Constitución.

P. Sánchez dice que la amnistía serviría para superar las consecuencias judiciales de una de las peores crisis territoriales que ha vivido España. ¿Cree que con esta medida se cerraría el procés?

R. El presidente dejó muy claro que no habrá pacto hasta que todo esté acordado. Hay que ir paso a paso, y no es muy prudente aventurar escenarios futuros. Lo que sí sabemos es que la Cataluña de 2023 está mucho mejor que la de 2017. Y en esto las políticas lideradas por el presidente Sánchez han tenido mucho que ver.

P. ¿Se puede hacer sin que el independentismo renuncie a la vía unilateral?

R. Nosotros apostamos por el diálogo y por soluciones acordadas que reflejen una mayoría muy amplia de la sociedad catalana. Cataluña ha pasado página de enfrentamientos y de recetas que tanta tensión generaron. Queremos avanzar, no repetir los errores del pasado. Los socialistas trabajamos por la convivencia, no por la tensión.

P. ¿Quieren que el preámbulo de la futura ley refleje que no se repetirá lo de 2017 o la renuncia a la independencia unilateral?

R. Estamos en una fase de conversaciones. Y percibo una actitud en la sociedad catalana de querer pasar página a hechos muy dolorosos. Por eso, intento tener una actitud acorde con lo que percibo, sin ingenuidades, y que mi formación actúe con generosidad para dar salida a ese sentimiento que detecto. Confío en que todos tengamos altura de miras. No pediremos a nadie que renuncie a sus ideas políticas, pero todos tenemos que reconocer la pluralidad de Cataluña y la pluralidad de España, que hay maneras diferentes de pensar.

P. Hay 22 sentencias del Tribunal Constitucional que pueden avalar la amnistía, pero también dejan claro que no vale cualquier tipo. ¿Cuáles son los límites?

R. No haremos nada fuera del marco de la Constitución.

P. ¿Es partidario de derivar a la mesa de diálogo lo que no se pueda acordar en negociación, incluido el referéndum?

R. Lo soy de alcanzar la investidura y de que el acuerdo tenga un recorrido para toda la legislatura.

P. En la negociación también se está hablando de otras cuestiones importantes para el autogobierno como el traspaso de Cercanías o una nueva financiación. ¿Ve factible el acuerdo en estos puntos?

R. Hay una agenda de temas sobre diferentes competencias, pero tenemos que dejar trabajar discretamente a los negociadores.

P. ¿La rivalidad independentista puede frustrar la investidura?

R. Tengo el convencimiento de que no. Todos somos conscientes del momento en que vivimos y de lo que la ciudadanía pide.

P. ¿Qué le parece la figura del mediador que propone el expresident Carles Puigdemont? ¿Hay alguien del PSC en el equipo negociador?

R. Vamos a dejar que el presidente Sánchez y su equipo, que va a mantener conversaciones con los grupos, salvo con Vox, hagan su trabajo. Ya dijo respecto a Cataluña que va a mantener la interlocución conmigo y el PSC, que ya es muy fluida.

P. Puigdemont le ha negado la categoría de interlocutor en esta negociación. ¿Se va a retirar?

R. No voy a entrar: pido respeto por los resultados electorales de Junts, del PSC y del resto de formaciones. Cataluña ha pasado por momentos difíciles que han generado frustración. La investidura fallida de Pedro Sánchez crearía otra frustración en Cataluña. Y los catalanes no pueden ir de frustración en frustración.

P. Viaja a Bruselas esta semana. ¿Se verá con Puigdemont?

R. No, no está en la agenda.

P. ¿Ha hablado con él? ¿O tiene intención?

R. Esto no se ha producido.

P. Si la investidura no prospera, ¿no votará los Presupuestos del Govern como hace un año?

R. Procuramos no mezclar. Su acción es muy mejorable y ha ido perdiendo apoyos, pero no queremos que las cosas vayan mal; queremos ayudar a que vayan bien.

P. ¿Está la propuesta de amnistía de Sumar en la línea que propone el PSOE?

R. Solo quiero recordar que quien va a apelar a la confianza de la Cámara no será Sumar sino Pedro Sánchez. ¿Si buscan protagonismo? No lo sé. Nosotros intentamos actuar con mucha prudencia y respeto a los procedimientos. Es adecuado hacerlo con discreción y dejarlo muy claro siempre dentro del marco de la Constitución. Y, con todo el respeto, que cada uno haga lo que crea que tenga que hacer.

P. Hoy hay una manifestación en Barcelona contra la amnistía. Usted se manifestó en el pasado con Societat Civil. ¿Es una situación rara para usted?

R. Yo no la comparto. Me gustaría que ciertos dirigentes vinieran a Cataluña a escuchar, a sentirla, conocerla y a ayudar a generar vínculos de convivencia. Yo no baso mi proyecto en ir en contra ni en rivalizar con nadie. Intento ir a favor, generar vínculos y puentes.

P. ¿Cree que el PP irá a esta manifestación para intentar incendiar Cataluña?

R. No lo sé. Lo que sí sé es que el diferencial de escaños con el PP en Cataluña es de 13. Y hace cuatro años era de 10. Y esto no es interpretable: es objetivo.

P. El PSC se presentó al 23-J sin incluir en su programa la amnistía. ¿Temen que su cambio de postura les afecte electoralmente?

R. No lo sé. Buena parte de la sociedad catalana ha reconocido que el PSC ha intentado solucionar situaciones muy complicadas en momentos de incomodidad. Y lo vamos a seguir haciendo sin ingenuidad pero con generosidad y reconociendo la pluralidad de Cataluña. Y luego los ciudadanos dirán. Parece que de momento mal no nos va.

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