El Macba de Elvira Dyangani Ose teje nuevas complicidades

Elvira Dyangani Ose (Córdoba, 48 años) lo anunció tras ser nombrada directora del Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona (Macba) el pasado verano: quería acabar con la estructura casi del siglo XIX del museo, hacerlo más abierto, plural y permeable, prestando especial atención a las nuevas narraciones de la historia no siempre oc...

Elvira Dyangani Ose (Córdoba, 48 años) lo anunció tras ser nombrada directora del Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona (Macba) el pasado verano: quería acabar con la estructura casi del siglo XIX del museo, hacerlo más abierto, plural y permeable, prestando especial atención a las nuevas narraciones de la historia no siempre occidentales y a la intervención de los espacios públicos. Y tras seis meses en el cargo, el aire fresco y arrollador que insufló a la institución parece que comienzan a dar sus primeros frutos después de “escuchar a las personas, colectivos e instituciones que rodean la vida del Macba”.

Es lo que ha dejado ver este jueves en la presentación de la programación de la temporada 2022 del Macba protagonizada por artistas mujeres, que también luchan por romper las estrategias establecidas. Como las tres principales dedicadas a Teresa Lanceta, Cinthia Marcelle (que ya estaban previstas en la anterior etapa de Ferran Barenblit) y María Teresa Hincapié. En su presentación también anunció que la colección permanente, que desde 2018 se muestra bajo el título Un siglo breve con un relato cronológico, pasará a ser temática: “Es un preludio de lo que se verá desplegado cuando se muestre toda la colección tras inaugurar la ampliación del Macba”, explica la directora que trabaja con la fecha de apertura del 28 de noviembre de 2024, coincidiendo con los 29 años de vida del museo, casi un año después de que las obras del edificio se den por terminadas a finales de 2023, como se anunció.

Para el nuevo curso destaca que la mayoría de iniciativas están pensadas en colaboración con otras instituciones, tanto barcelonesas, españolas como internacionales. La primera cita será la exposición monográfica dedicada a las producciones textiles: tapices, tejidos y telas, de Teresa Lanceta (Barcelona, 70 años) llamada: Tejer como código abierto, que se está coproduciendo con el IVAM de Valencia y que comisaría su directora Nuria Enguita. En ella se mostrará la mayor selección de las obras realizadas por Lanceta y piezas nuevas no expuestas como es un tapiz creado con alumnos del instituto Miquel Tarradell, sobre los oficios del Raval.

De otra creadora, Cinthia Marcelle (Brasil, 47 años) podrá verse Cinthia Marcelle. Una conjunción de factores en la que se expondrán sus filmes, de gran impacto visual y sus instalaciones a gran escala realizadas en las últimas dos décadas dominadas por la preocupación de las dinámicas de los colectivos, la acumulación, multiplicación y repetición.

En julio, explicó la directora, cambiará la exposición de la colección permanente que se muestra en la primera planta del edificio, mostrando las obras de forma temática y “poniendo énfasis en las prácticas estéticas que no han tenido la oportunidad de participar en las narrativas del museo. Servirá para replantearse la colección, mostrar piezas que se han adquirido recientemente que no se han podido exponer y prefigurar lo que se podrá ver cuando se inaugure la ampliación del centro a finales de 2024″, ha dicho Dyangani Ose. Entre las novedades más destacadas: una instalación de Josep Grau Garriga, otro genio de los tapices que ha tenido más éxito fuera que dentro del país, que se podrá ver en la sala de la torre. También saldrán de las reservas obras de Lúa Coderch, Ignasi Aballí, Dora García, Mirtha Dermisache, Albert Serra, Mar Arza, Rosângela Rennó y Concha Jerez, entre otros creadores.

Con el otoño no llegará el frío al Macba, porque vendrá cargado de interesantes proyectos para el museo. La primera será la exposición monográfica dedicada a la artista Maria Teresa Hincapié (Colombia, 1956-2008) en la exposición Si este fuera un principio de infinito, una coproducción con el Museo de Arte Moderno de Medellín, sobre esta pionera de la performance en América Latina que se verá primero en Colombia y luego en Barcelona; “una artista preocupada por la historia y la búsqueda de nuevos mitos a través de acciones rutinarias en actos simbólicos”, ha dicho la directora.

En otoño también verá la luz el proyecto de Mariana Botey y El Espectro Rojo que pondrá su mirada en una de las minorías no colonizadas: el pueblo indígena americano mixe, para poder hablar y reflexionar sobre indigenismo y neoindianismos, un proyecto coproducido con el Festival Hacer Noche de Oaxaca (México).

El museo también se sumará a una de las iniciativas más colaborativas que se recuerdan en la ciudad, culturalmente hablando. Se trata de la muestra dedicada a una de las principales artistas contemporáneas, la afroamericana Carrie Mae Weems que se presentará en el centro de fotografía KBr de la Fundación Mapfre y en la sede de Foto Colectania. La exposición recorre cuatro décadas de trayectoria tratando temas como la lucha de clases, la presencia de la mujer en el arte, el racismo y la cultura popular. Estará comisariada por la propia Dyangani Ose y contará con una tercera sede: la Capella Macba donde podrá verse la videoinstalación Lincoln, Lonnie and Me – A Story in 5 Parts en la que la artista dialoga, como si fuera un espectro, con el presidente Lincoln que, entre otras acciones, abolió la esclavitud en Estados Unidos en 1865.

En junio Barcelona acoge la 27ª edición del Simposio Internacional de Arte Electrónico (ISEA2022) impulsado por la UOC, el Ayuntamiento de Barcelona, el CCCB, el Santa Mónica y la New Art Foundation. El Macba participará convirtiéndose en un laboratorio de archivos con la exposición Sismografía de las luchas, de Zahia Rahmani donde se podrán ver 800 publicaciones periódicas culturales no europeas que abordan temas como la diáspora africana, india, caribeña, asiática y sudamericana, que han dado voz a la resistencia crítica de pueblos que han sufrido el colonialismo, la esclavitud, el apartheid y el genocidio.

En su voluntad de favorecer la apertura del museo, también se ha impulsado una nueva comisión asesora con cinco miembros, cuyas atribuciones irán más allá de asesor en la compra de obras. “Serán embajadores del Macba en el mundo”, aseguró Dyangani Ose. Y una vez más está presente la idea de “trabajar en red” y tejer nuevas complicidades. Los cinco nuevos miembros son: Jessica Morgan, directora del Dia Art Foundation de Nueva York; Naomi Beckwith, subdirectora y conservadora del Guggenheim Museum de Nueva York; Pablo Lafuente, codirector artístico del Museo de Arte Moderno de Río de Janeiro; Shumon Basar, arquitecto y miembro del Thought Council, Fondazione Prada, de Londres y Martí Manen, director de Index–The Swedish Contemporary Art Foundation, de Estocolmo; además de Chris Dercon, presidente de Réunion des musées nationaux–Grand Palais de París, que ya formada parte de la comisión.

Elvira Dyangani Ose cuenta para toda la temporada con un presupuesto de 10.590.000 euros, de los que entre 500.000 900.000 son para actividades y exposiciones. Insuficientes, seguramente, para todos los planes de la nueva directora.