El PP abrió un expediente a Jorge Fernández Díaz hace 29 meses que sigue sin resolver
El exministro fue suspendido de militancia en julio de 2021, cuando fue procesado por el ‘caso Kitchen’
El veterano exministro Jorge Fernández Díaz mantiene la militancia del PP suspendida desde julio de 2021, cuando fue procesado por el juez de la Audiencia Nacional Manuel García-Castellón, que investiga la Operación Kitchen de presunta corrupción parapolicial bajo su mando en el Ministerio del Interior, durante el primer Gobierno de Mariano Rajoy (2011-2015). El PP le había abierto un expediente informativo unos meses antes, en septiem...
El veterano exministro Jorge Fernández Díaz mantiene la militancia del PP suspendida desde julio de 2021, cuando fue procesado por el juez de la Audiencia Nacional Manuel García-Castellón, que investiga la Operación Kitchen de presunta corrupción parapolicial bajo su mando en el Ministerio del Interior, durante el primer Gobierno de Mariano Rajoy (2011-2015). El PP le había abierto un expediente informativo unos meses antes, en septiembre de 2020, cuando resultó imputado por ese mismo caso. Desde entonces el PP no ha practicado ninguna actuación, diligencia, indagación o ha tomado declaración al exministro, según confirman fuentes cercanas a Fernández. El PP actual de Alberto Núñez Feijóo no se siente relacionado de ninguna forma con ese escándalo, ni con Fernández tras la petición de cárcel por parte de la Fiscalía Anticorrupción.
El 18 de septiembre de 2020, cuando Jorge Fernández fue imputado por dirigir una presunta trama para tapar el escándalo de financiación ilegal del PP y espiar y arrebatar a su extesorero, Luis Bárcenas, documentos comprometedores para el partido, el entonces presidente popular, Pablo Casado, tiró de la literalidad de los estatutos y se limitó a abrirle un expediente informativo. La transformación de ese expediente en otro disciplinario, con la posible suspensión o expulsión de militancia, quedaba pendiente de que el juez ordenara su procesamiento o se abriera el juicio oral. Aquel PP esperaba que Fernández, antes, se diera de baja como militante, algo que no sucedió. Lo que sí hizo Casado fue no incluir al exministro, amigo y mano derecha durante lustros de Rajoy, en ninguna lista, pese a sus pretensiones.
El 29 de julio de 2021, el instructor de la Audiencia Nacional ordenó el procesamiento de Fernández por el caso Kitchen y su cúpula judicial, vinculándolo con las operaciones impulsadas por el polémico comisario jubilado José Manuel Villarejo, el comité de Derechos y Garantías del PP comunicó al exministro su suspensión provisional de militancia. Y Casado aprovechó para intentar desmarcarse del asunto: “No tengo nada que ver con Villarejo, ni nada que temer” y emplazó al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a que respondiera si sabía algo de la trama.
Esa estrategia de apuntar hacia otros escándalos o casos relacionados con el PSOE es la que quiere seguir ahora el PP de Feijóo. El líder popular no se ha pronunciado aún sobre la petición de 15 años de prisión para Fernández Díaz que formuló ayer la Fiscalía Anticorrupción, pero en su entorno sí avanzaron que no tenían nada que añadir y que preferían centrarse más en otras polémicas de mayor actualidad como el caso Mediador, que ha implicado en prácticas corruptas a un exdiputado del PSOE y otros posibles afectados de esa formación.
El presidente del comité de Derechos y Garantías del PP, José Antonio Monago, no fue el responsable de abrir aquel expediente informativo y luego de suspensión al exministro y este viernes desconocía el estado actual del mismo. Fuentes cercanas a Jorge Fernández Díaz sí aseguraron este viernes que el PP no había practicado en todos estos meses —29 desde que se abrió el expediente informativo y 19 desde que se le suspendió de militancia— ninguna actuación al respecto, ni se le había llamado para tomarle declaración.
La defensa particular de Fernández recibió el viernes el escrito de la Fiscalía en el que se solicita los 15 años de prisión y se aprestó a preparar su escrito de defensa de cara a la apertura del juicio oral, que podría resolverse en menos de 20 días. Ni Fernández ni su abogado han tenido ningún contacto con la actual dirección del PP.