15 fotos

Protestas frente a la minera Vale en Río de Janeiro

La rotura de dos presas en una mina de Minas Gerais causó al menos siete muertos. Cuatro cuerpos siguen sin ser identificados

La empresa Vale es propietaria, junto a la australiana BHP, de la minera Samarco. Esta última operaba en Mariana, donde el pasado 6 de noviembre dos presas se rompieron causando al menos siete muertes.YASUYOSHI CHIBA (AFP)
Participantes en la manifestación arrojan barro sobre la sede de Vale.YASUYOSHI CHIBA (AFP)
"Estamos empeñados en responsabilizar a quien tiene que serlo. Y el responsable es una empresa privada, Samarco, que tiene como socios Vale y BHP Billiton", declaró la semana pasada la presidenta Dilma Rousseff .YASUYOSHI CHIBA (AFP)
Los manifestantes de Río protestaban en la sede de Vale por la avalancha de residuos fangosos sobre el pueblo de Mariana.YASUYOSHI CHIBA (AFP)
Un mensaje sobre el barro en la fachada de Vale reza: "No fue un accidente".MARIO TAMA (AFP)
La rotura de los muros de contención de la presa en Mariana causó daños incalculables en la zona.MARIO TAMA (AFP)
Unas 18 personas continúan desaparecidas por el alud de barro de la mina de Mariana.MARIO TAMA (AFP)
La tragedia de Mariana ha puesto en evidencia la dependencia que la zona tiene de Samarco, una minera que aporta el 1% de su lucro a la localidad.SERGIO MORAES (REUTERS)
De la minera Samarco depende el 80% de la recaudación municipal, según el alcalde de Mariana.MARIO TAMA (AFP)
Samarco genera unos 1.800 empleos directos y 2.000 indirectos en Mariana.YASUYOSHI CHIBA (AFP)
Las actividades de la empresa minera han sido paralizadas hasta que acaben las labores de rescate y la investigación de la tragedia de Mariana.MARIO TAMA (AFP)
Samarco ha admitido este martes que dos muros de contención más corren riesgo de romperse.SERGIO MORAES (REUTERS)
Samarco tendrá que pagar 250 millones de reales (unos 65 millones de dólares) por el desastre de Mariana.SERGIO MORAES (REUTERS)
La presidenta Dilma Rousseff ha prometido esfuerzos para recuperar el área afectada, incluido el río Doce, muy dañada por el alud de barro.SERGIO MORAES (REUTERS)
Fachada de la sede de Vale.YASUYOSHI CHIBA (AFP)