Cartas al director

No nos vamos, nos echan

El artículo del 21 de julio Fuga a Londres contradice las ideas de Esperanza Aguirre y de otros como ella que piensan que es estupendo salir fuera y tener nuevas vivencias, que dicho así, como la “popular” política lo comenta, parece que todos estamos deseando que nuestro hijos, sobrinos, nietos y, ¡qué leches!, nosotros mismos nos tengamos que ir para ver nuestras vidas realizadas. Pero la pequeña diferencia que estas personas no ven, o no quieren ver, radica en la voluntad de querer marcharse de España o no. Ellos se van porque en España sobran, porque simplemente ¡no hay trabajo! A...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

El artículo del 21 de julio Fuga a Londres contradice las ideas de Esperanza Aguirre y de otros como ella que piensan que es estupendo salir fuera y tener nuevas vivencias, que dicho así, como la “popular” política lo comenta, parece que todos estamos deseando que nuestro hijos, sobrinos, nietos y, ¡qué leches!, nosotros mismos nos tengamos que ir para ver nuestras vidas realizadas. Pero la pequeña diferencia que estas personas no ven, o no quieren ver, radica en la voluntad de querer marcharse de España o no. Ellos se van porque en España sobran, porque simplemente ¡no hay trabajo! Ahora se van por necesidad y no saben si podrán volver. Ahora ya no suena el “soy un pobre emigrante…” de Juanito Valderrama. Ahora nuestros nuevos emigrantes tienen carreras, pero siguen fregando platos, limpiando casas, cuidando niños. Necesitamos una canción de Sabina o Serrat para poder llorar también por ellos.

Archivado En